Lo que pasó en realidad.

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Alyssa.

Tres días atrás.

–¡¿Las dejaste escapar?! –mi voz sale en un grito, mi estúpido primo había dejado a mis muestras huir de su sótano, es demasiado débil, en especial cuando se trata de niños, ¿qué nunca iba a aprender? Por el amor a Neptuno.

–No a ambas, solo a "S" y baja la voz si no quieres que nos escuchen. –rueda los ojos y antes de que pueda abrir la boca para reclamarle, me interrumpe, odio que me interrumpan, mi cabello rubio se torna rojizo y las llamas salen de las puntas –Alyssa, la niña pasó aquí tres cumpleaños, ya era hora, además, no la dejé frente a su casa, está en el bosque.

Con eso solo logra que mi enojo aumente y mis cabellos se prendan más.

–¿Cómo lo dices tan tranquilo? No es como si esa chica no nos recuerde y no vaya a decir nada, y también como sabrás; la pelirroja esa es cercana al hermano ¿no crees que lo ayudará? ¿Crees que cuando la encuentren, "S" no intentará recordar? ¿Acaso quieres perder tu mínima chance de tener una oportunidad con ella? –me mira a los ojos y en respuesta yo levanto una ceja despectivamente a la vez que dejo que mi cabello vuelva a su estado natural.

–¿No puedes pedirle a tu padre que haga una de esas cosas con el clima? Tal vez con una tormenta y mucha niebla no la encuentren.

–Sabes que no es tan fácil primo, él no me considera digna de hablarle por tener niños, si le digo que perdí uno... –un escalofrío recorrió mi espalda al pensar en todas las cosas que me diría.

–Inténtalo, solo inténtalo, si no podemos contar con su ayuda ya se me ocurrirá algo. Pero debes intentarlo Alyssa, sigue siendo tu padre.

–De acuerdo, pero si alguna vez vuelves a hacer un estupidez como esta, lo resolverás tú solo.

Él asiente y yo trago grueso, contactar a mi padre no era una de mis cosas favoritas del mundo precisamente, pero debía tenerlo todo bajo control, no podía darme el lujo de tener un solo error, y el más mínimo podría hacer que mi plan entero se vaya a la reverenda mierda.

· · ·

No me lo creo, ¿mi padre acaba de acceder a hacer algo que le pido sin preguntarme el por qué ni regañarme por algo que hice hace años? Esto no es algo que pase con normalidad, pero no me voy a quejar, es momento de que comience el plan.

–Dijo que sí, vámonos, debemos llegar a ella antes de que la encuentren.

–Vamos. –responde mi primo con una voz cargada en preocupación.

Al llegar al bosque nos encontramos con que ya era tarde para que pasen desapercibido nuestro error, pero yo tenía un plan de resguardo. Siempre lo tenía.

–Saca los pañuelos –en mi mente lancé la señal a mi padre, quien la respondió al instante haciendo que empiece a llover, comenzando por una llovizna suave que pasó a ser una tormenta casi al instante –ponte la máscara, si uno de ellos tiene un mínimo recuerdo de nosotros aquí perderán su confianza en nosotros, y recuerda, no uses mucha escopolamina, no queremos matarlos.

Él asiente y se la pone, estaríamos empapados de no ser por Tobías, pero tampoco estaríamos aquí de no ser por su idiotez.

–Ve por la niña, y si la vuelves a dejar ir, yo te juro que te mato. Yo iré por nuestro príncipe azul. –una sonrisa se forma en mi cara y voy de camino al chico, la niebla no permite que nadie aparte de mi primo y yo pueda ver o escuchar nada. Beneficios de que mi padre haya estado de buen humor, supongo.

–¡Ventu! Ponlos a dormir, ¡ya! –le grito, "no nos verán ni oirán hasta que sea muy tarde" me repito una y otra vez. "Todo saldrá perfecto"

–Ya lo hice, ¡llévatelo! Ya tengo a la niña. ¿Qué hacemos con Rawson? –oh, yo sabía muy bien qué hacer con ella.

 Llevé a Axel en un remolino de aire hasta la camioneta de Tobías, o mejor dicho, de su papá y volví con la pequeña pelirroja.

"Te despojaré de toda la energía que tengas, linda. Quedarás tan cansada que no podrás seguir luchando por tu vida, pero no morirás, no puedes hacerlo, no vas a romper su corazón."

Y así lo hice, en unos minutos la chica quedó inconsciente, y mientras ella alentaba el paso y quedaba más y más cansada, yo me llenaba de ánimo y ganas de hacer cosas.

Era algo difícil de hacer, por eso usamos drogas para los otros dos, y a diferencia de ellos; mini Rawson quedó en el bosque, y ahí estaría hasta que alguien la encuentre.
A ver si aún te entrometes en donde no te llaman luego de esto, pequeña.

Unas horas después.

Llamada de teléfono.

Xx: Aly, ella no aparece, te lo digo de verdad, si algo le pasa, no podría perdonármelo.

Alyssa: Tranquilo lindo, sabes que ella es fuerte y si algo le pasa se podrá defender, además, de seguro solo está evitando llegar a casa, en algún centro comercial, es una adolescente.

Xx: Ella siempre que sale avisa, siempre, sin excepciones. –su voz sonaba rota y eso me causaba un dolor en el pecho. Estúpidos sentimientos.

Alyssa: Ella volverá pronto, te lo aseguro lindo.

Pero no lo haría, al menos no esa noche.

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¡¡¡HOLAAAAAA!!! Bien, ¿saben qué? No diré nada, se lo dejo todo a sus cabecitas ingeniosas.
MUCHÍSIMAS GRACIAS POR LAS MIL LECTURAS SON UN ENCANTO. LOS AMO.

Y si están aquí y ya saben de la otra novela, subiré el prólogo este miércoles, estén atentos.
¡Los quieroooo! Ya sin más nada que decir.

XOXO💖

Kambio y Fuera.

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⏰ Última actualización: May 08, 2021 ⏰

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Aurora Boreal ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora