No te voy a soltar (Sichul)

Capítulo 14

Seis meses después

Heechul

Nunca hubiera imaginado lo que iba a pasar después de la boda, el niño dulce y amable que conocí años atrás se esfumó y dejó a un hombre frío y calculador que sólo le importa su propio bienestar, no le importa pasar por encima de quien sea necesario para lograr su cometido, ese es el nuevo Han Geng, nada de aquel chico que me gustaba y me hacia suspirar cada que lo veía. Aun recuerdo lo que me dijo cuando llegamos a China: "Vivirás en un departamento lujoso y alguien estará contigo siempre, yo estaré trabajando y viajando, evita molestarme".

Casi nunca estamos juntos, nuestra vida como esposo es simplemente inexistente y agradezco por eso, el mayor acercamiento que tenemos es cuando salimos a alguna reunión de negocios y mi presencia es estrictamente necesaria, ahí nos comportamos como dos personas enamoradas que viven un matrimonio feliz. Tengo a una secretaria que se hace cargo de mi vestimenta y de seguirme por todos lados en el departamento. Me resulta incomodo vagar por el, pero decidí que debía memorizarlo para poder sentir un poco más de libertad y me dio algo en que ocuparme. La comunicación con mi hermano y amigos es prácticamente nula, no tengo la libertad para hablar con ellos de forma privada y si lo hago debe haber alguien conmigo monitoreando todo lo que digo, sé que él ha visto a Shindong debido a los negocios que ahora compartimos, al casarnos mis acciones de la compañía familiar pasaron a ser de su control. En una ocasión quise platicar con él sobre mi plan de retomar las clases de braille, quizás buscaba apoyo y aceptación, no me dijo nada y siguiendo leyendo, lo se porque escuchaba el pasar de las hojas y el olor de su perfume me indicaba que él seguía ahí.

Hay días en los que quiero acabar con este matrimonio, pero escuchar a Shindong feliz y viviendo por fin una vida, hace que todo quede en el olvido, mi vida no están mala.

Después de la misma rutina de todos los días es hora de ir a la cama, siento un malestar en el estomago y tengo la sensación como si algo malo fuera a pasar, por ahora me encuentro cansado y aburrido, así que la mejor opción es dormir. Escucho ruido fuera de mi habitación, tocó el reloj que se encuentra a un lado y me indica que son las 3 A.M., intento descifrar que es lo que ocurre hasta que escucho la voz de Han Geng y abruptamente alguien entra en mi habitación, es él por el olor de su perfume que se mezcla con el del alcohol.

-¿Han Geng te encuentras bien? ¿Qué necesitas?

-En que me podrías ayudar tú, no me sirves para nada solo para causar lástima, aunque debo reconocer que me ayuda a cerrar tratos rápidamente.

-Estas borracho, podemos hablar en la mañana cuando te sientas un mejor. -El olor se hace más intenso y siento como su mano atrapa mi rostro y lo sostiene fuertemente.

-Es un desperdicio que seas tan bello, no tuvimos noche de bodas, quizá la podamos tener ahora.

Comienza a besarme bruscamente y a recorrer con sus manos mi cuerpo de forma desesperada, el sabor de su boca a alcohol es asfixiante. Intento liberarme, pero no funciona, me acuesta en la cama, coloca su cuerpo sobre el mío y me deja inmóvil. Solo puedo pensar que esto es una horrible pesadilla y que nada es real. Le suplico que me deje y comienzo a llorar. Pasa su lengua por mi cuello y rompe mi camisa para después pasar a mi pantalón. ¡BASTA POR FAVOR!, le suplico pero parece loco e ido, muerde mi cadera y siento que es el final. Regresa a mi boca y mete su lengua, muerdo su labio hasta sentir un sabor metálico en la mía y cuando se aleja un poco le propinó un golpe en su zona genital.

-Maldito ciego.

Siento un golpe fuerte a un lado de mi labio y un líquido salir de ahí. Escucho un portazo y se que por fin se fue, me levanto de forma torpe y caminó hasta la puerta para cerrarla con seguro y regreso a la cama, me hago bolita debajo de las sabanas y abrazo mi cuerpo. Nunca creí que él pudiera hacerme algo así. Pasó la noche en vela, temiendo que pueda regresar y hacerme más daño. No se en que momento me quede dormido pero un grito me despierta y es él indicando que no me den de comer y que me quedaré encerrado todo el día.