Promesas selladas con un beso

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(Narra Marta)

Volvimos a la clase cuando apenas quedaban cinco minutos de esta, el profesor nos “fulmino” con la mirada, y recalco lo de fulmino entre comillas, porque aquella mirada era demasiado débil para intimidar aunque fuese a un bebé.

-¿Dónde estaba si puede saberse señorita Siles, y porque ha tardado tanto en traerla de vuelta a clase señorito Tomlinson? – agaché la cabeza, con resignación supongo, aunque algo agobiada también.

- yo….esto…- no iba a decirle: pues nada que me lo encontré en el baño y le dije cosas feas y el se deprimió y luego me arrepentí y le hice volver y….¡ah! se me olvidaba, casi nos besamos, pero llegó Emilie y tuvo que estropearlo todo……no, definitivamente no iba a decirle eso

- ha sido todo culpa mia – me cubrió Louis poniéndose delante de mí – yo la entretuve, me paré a hablar con la una alumna que estaba en el pasillo y la obligué a esperar a que acabara de hablar, lo siento muchísimo señor Stevens, no volverá a ocurrir, se lo prometo.

- por esta vez se lo pasaré señorito Tomlinson, pero que no vuelva a repetirse, y en cuanto a usted señorita Siles, tendrá que recuperar la clase perdida, esta tarde, se quedará un par de horitas

- ¿¡¡QUE!!? NO por favor….yo…yo tenía que ir…un asunto familiar- mi tino de voz iba disminuyendo pero el no parecía dispuesto a escuchar escusas…claro como el ya no tenía familia, todos habían muerto en la era mesozoica, pues no entendía la situación…

- pues su familia tendrá que esperar un par de horas, horas que usted pasará en compañía de el encargado de los castigos – se acercó un poco más a mi y me susurró – que, no debe decírselo a nadie, pero es el señor Tomlinson – yo solo asentí, eso si que lo entendía, si se decía a los cuatro vientos que Louis era el encargado de quedarse con los castigados, todas las chicas harían lo imposible por que las castigaran, y por otra parte, normalmente solo castigaban a chicos, y los chicos odiaban a Louis, el era el que acaparaba la atención de el genero femenino, todas las chicas tenían la vista clavada en el, y no tenían ojos para los demás tios….va, tonterías, Louis no era solo fama y físico, el era…..la persona más graciosa, divertida, amable, sensible, alocada, positiva, sexy, rematadamente adorable, con cuerpazo, guapo, con un culo…..¿pero que coño estás pensando Marta?

El profesor salió de la clase, ahora tenía que salir Louis, yo prefería alejarme de el, porque sentía las miradas de odio de todas mis amigas, solo por el hecho de estar a menos de diez centímetros de él, así que me giré con la intención de irme con Emilie y Alex, pero Louis me agarró de la muñeca, impidiéndome irme, escuché un sinfín de exclamaciones por parte de mis amigas, risitas por parte de mis amigos, miré a Emilie que me sonreía devertida, yo la mataba…Alex estaba serio como un profesor, con el ceño claramente fruncido, si que era sobre protector el tio….pero eso no estaba bien, porque más allá de las risas y las exclamaciones, estaban las fulminantes miradas de odio…..temía por mi seguridad, de modo que giré la cabeza

-¿Qué haces?, suéltame por favor, tengo que irme

- nop

- ¿perdona? – el sonrió mostrándome sus perfectos dientes, se escucharon suspiros de fondo

- no te soltaré, jamás dejaría ir a mi chica – entrelazó sus dedos entre los míos – vámonos si – no me dio tiempo a responder, solo me dio un fuerte tirón haciéndome salir de aquella habitación escopetada tras de el, el….me estaba cogiendo la mano…y había dicho que era si chica, ¿de que iba?, haber, me conocía a mi misma, antes en el baño había sido muy claro, cuando dije que no había significado nada, me refería a nada, el no podía haberme entendido mal…pero ¿de verdad se creía que era su novia?...y lo más importante, ¿Por qué me iba tan rápido el corazón, y porque mis mejillas estaban ardiendo?

¿Amor?, imposible...(Louis Tomlinson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora