Simplemente hay cosas que cambian con el paso del tiempo y una de esas cosas somos nosotros, que por sucesos de la vida hacen que uno ya no sea el mismo que era antes.
Los días pasaron rápido, tanto que la fecha del funeral llego sin que los Mikaelson, Salvatore junto con Saltzman y Forbes lo notaran. Justo ahora todos los invitados se alistaban para aquel evento, algunos nerviosos, otros nostálgicos e incluso tristes.
Alice junto con sus primas y mejor amiga se alistaban entre risas y recuerdos.
–¿Recuerdas cuando tía Scar y tía Amara nos traían de esos chocolates con galea adentro?– la pequeña rubia cepillaba su cabello mientras veía a su melliza.
–Claro que sí, eran lo mejor del mundo, terminábamos manchadas de galea por todo el rostro, mamá siempre nos regañaba– sonoras carcajadas se escucharon en la habitación de la castaña, la cobrizo Mikaelson simplemente las veía con una pequeña sonrisa, y terminaba de prepararse.
Hope no se sentía muy bien en ese momento, después de todo, ella no tuvo conexión alguna con Amara, ni siquiera la conoció aun y que su prima le platicara de ella todo el tiempo, ella hubiera preferido conocerla, todos esos pensamientos la hacían sentir un poco mal, su castaña prima junto con la vampira castaña lo notaron, con la diferencia de que a una sí le importaba.
"¿Estás bien?"
"Si"
"Sabes que no puedes mentirme, puedo leer tu mente pequeña " – Alice con sumo cuidado gira su vista a Hope quien le proporciona una pequeña sonrisa, la castaña devuelve su vista a Josie para a si seguir con su trabajo de cepillarle el cabello.
"Lo sé, tranquila estoy bien"
"Bien, te creeré, pero si necesitas algo, platica conmigo por favor"
–Entonces, ¿se aprendieron la letra?–
–Claro que sí– dicen las chicas con una sonrisa.
–¿Todas?– pregunta de nuevo Alice con algo de nerviosismo.
–Si Alice, estas más histérica que nuestra madre– habla la rubia bruja entre ellas con una pequeña risa al final.
–Lo siento Jenna, es que solo quiero que esto salga bien–
–¿Lo haremos antes o después del discurso? – pregunta Josie mirando a Alice con una pequeña sonrisa.
–Después, les daremos una sorpresa a todos, incluso a mis padres desde donde estén–
Al terminar de prepararse, el pequeño grupo de chicas toman sus pertenencias y salen de la habitación de la mayor, dirigiéndose hacia la salida de aquella escuela, algunas personas las miraban fijamente sin entender a donde se dirigen. Al estar fuera sus familiares adultos las esperaban en sus respectivos vehículos, Laila se dirigió con su padre y hermanos, mientras que las mellizas fueron con Alaric.
–¿A qué auto nos subimos? – pregunto la menor de las Mikaelson presentes.
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