The Narrow Street «Mystic Messenger» [Jumin Han]

18. ¿Qué pasa con la RFA?

Jumin se acercó a la chica y puso una mano en su hombro, no estaba muy seguro de qué estaba pasando, pero al verla tan asustada decidió acercarse. MC estaba parada en medio del departamento leyendo la nota una y otra vez, ¿no deberías confiar tanto en ellos? No entendía porqué una organización que hacía fiestas de caridad tenía que recibir ese tipo de atentados.

El pelinegro recorrió todo el departamento con la mirada, era evidente que alguien estaba intentando intimidarla. El chico se acercó a la ventana, miró atentamente el agujero que había en ella intentando averiguar cómo alguien había logrado subir hasta ese piso sin ser descubierto.

—¿Alguien te está extorsionando? —preguntó volteando a verla.

—¿Qué? No —MC tenía la mirada fija en el suelo—. Y-yo... no entiendo, ¿qué demonios pasó aquí?

—Al parecer, alguien entró a tu casa anoche. Es un alivio que no hayas dormido aquí, quien sabe qué intenciones pudo tener esa persona. —Jumin intentaba mantener la calma, pero realmente estaba más preocupado que MC —¿Estás recibiendo alguna amenaza? ¿Tienes problemas con alguien?

—Seven... —dijo ella y corrió a buscar su teléfono— Estoy segura que él sabe algo de esto.

—Dudo mucho que Luciel tenga algo que ver, probablemente sea...

—No te lo quería decir antes, Jumin —interrumpió MC, el pelinegro giró la cabeza confundido—. Creo que estamos en peligro, no sólo yo, puede que tú y el resto de miembros de la RFA también. —Él parecía no creerle. La chica le explicó lo que le había dicho Seven el día del robo.

—Sé que hay secretos en la organización, pero no creo que V oculte algo así, mucho menos que ponga en peligro nuestra seguridad.

—Seven me lo advirtió, me dijo que tuviera cuidado... no creí que alguien fuera capaz de entrar a mi casa y hacer esto —el pelinegro empezaba a comprender la situación—. Escucha, puede que V sea tu amigo y el líder de la RFA, pero no pasaré por alto lo que pasó hoy. Si Seven no se lo dice al resto, lo haré yo —dijo MC con firmeza.

—Bien, tienes razón. Es mejor tomar precauciones. —Jumin sacó su teléfono y empezó a llamar a V.

MC marcó rápidamente el número de Seven, él contestó casi al instante. Al escuchar el tono de preocupación de la chica, el pelirrojo se puso serio. Ella le contó a detalle todo lo que había sucedido, recorrió nuevamente el departamento para describir mejor el dibujo que habían pintado en su pared.

Seven suspiró aliviado al escuchar que MC no había estado allí esa noche, él sabía que algo andaba mal, pero jamás imagino que algo como eso pasaría.

—Lamento tener que decirte esto —él resopló con frustración—. Quien quiera que esté haciendo esto, ya sabe donde vives. No es seguro quedarte allí. Aunque estoy casi seguro de que todo tiene que ver con el hacker.

—¿Tengo que irme de mi casa? —preguntó MC preocupada— Seven... Yo no tengo ni idea de a donde podría ir.

—Tampoco sería seguro ir a algún hotel, podrías quedarte con Jaehee... No, mierda —contestó él intentando pensar en una buena solución—. Ninguno de los otros miembros ha recibido un atentado, podrían estar en peligro si vas con alguno de ellos.

—¿Y ahora qué hago? —Ella estaba empezando a desesperarse.

—Te diría que vengas a mi casa, pero estarías en más peligro aún. No puedo... por mi trabajo. Lo siento —contestó Seven—. Voy a llamar a V, te prometo que encontraremos una solución.

—Bien... gracias. Tú también ten cuidado —dijo MC antes de que él colgara la llamada.

—¿MC? —Jumin se acercó a ella— V no me contesta, lamento...