Cap 75

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Narrador

Decidieron dirigirse al hotel, ya hacía hambre y quisieron ir a almorzar en el mismo hotel. Llegaron, se encontraron una mesa y pidieron sus platillos.
Charlaban un poco, para ver que planes les surgían para ese día que tenían libre, hasta que un amiguillo apareció justo frente a la mesa de ambas.

Joel. - ¡Hey!    -se dirigió primero a Joy- Hermosa, hola  -volteó con Ashley-  am, y hola Ash.

Ash. -seria- Hola, ¿Qué haces aquí?

Joy. - ¡Ash! -la regañó-  Hola Joel, ¿Qué andas haciendo por acá?

Joel. -Vine con colegas suyos, iremos a un pequeño bar escondido pero famoso aquí en Alaska ¿Vienen?

Ash. -se dirigió a Joy a modo de que solo ella entendiera lo que diría-  Yo no sé, tu eres la que tiene algo moviéndose allá abajo, y bueno, yo solo quiero estar contigo, como tu veas-

Joy. -Por mi no hay problema  -después se dirigió a Joel-  Si, si vamos.

Joel. - Genial, entonces venganse.

▪️
Tras decir aquello, Joel espero a que pagaran la cuenta y se levantaran de su lugar.
Mas que por ambas, espero a por Joy, en cuanto ella se levantó él la tomó por la cintura de la parte trasera, y caminaron hacia la recepción, en donde todos estaban reuniéndose, Ashley al ver aquello se llenó de rabia, le molestaba que alguien más estuviera así de cerca de Joy.

Una vez estando todos los que irían, se dirigieron a aquel lugar, sería
Salty Dawg Saloon muy reconocido aquel lugar en Alaska, se caracterizaba por su interior, lleno de dólares pegados por todas partes, no solo de la gente que iba a beber, sino que ir a aquel bar a dejar alguna pertenencia tuya, era parte de recibir la suerte de Alaska.

Se quedaron embobados todos al ver tan reluciente lugar, se acercaron a la barra, y pidieron algo relajado para comenzar la noche.
Tras unos cuantos cócteles después, Joel se acercó a invitar a la pista de baile a Joy.
La castaña dudó mucho, ya que Ash estaba con ella, pero finalmente accedió tras una mirada cálida por parte de ella.

Ashley intentaba observar hacia otras partes, para no llenarse de celos, pero fue prácticamente imposible no verlos, se detenía a observar cada movimiento de Joy, la forma en que su mirada la penetraba al hacer cada movimiento con su cuerpo, solo se estremecía y pasaba saliva pesadamente.
Ambas se dedicaban miradas, en cuanto Joel intentó hacer algo más que bailar, dando el famoso "arrimón", a lo cual Joy, desconcertada se quitó de inmediato, Ashley lo notó, y supo que era su momento.

Ash. - ¡Que te ocurre! Ya vete de aquí!

Joy. - Hey, Ash, está bien, déjalo.

Ash. - No, no está bien

Joy. - Está tomado, ya. Mejor baila conmigo, ¿si?

Ash. -Una sonrisa se pintó en su rostro- ¿Quieres que bailemos juntas?

Joy. - No solo lo quiero, lo deseo -dijo con una voz ronca que hacia estremecer cada extremo de Ashley-

▪️
Tras aquellas exitantes palabras, ambas se dirigieron a la pista, nuevamente, y entre tanta multitud, comenzaron a bailar al ritmo de la música.
Se dedicaban miradas, sonrisas y besos en el cuello cuando nadie las miraba, entre su locura y el alcohol todo se elevaba de tono, aquel redondo trasero perfecto de Joy, pegaba a la pelvis de Ashley, quien sostenía fuertemente sus caderas para no hacer separación alguna, todo aquello provocaba palpitaciones en la parte pelvica de aquella alta.

Joy. - ¿Te gusta?

Ash. - Demasiado, no sabes lo bien que se siente ésto

Joy - ¿Ah si?

Ash. - No sabes cuán húmeda está mi entrepierna

Joy. - Mmm -gimió roncamente-  Eres jodidamente caliente

Ash. - Tu lo provocas, me pones en tensión con semejantes movimientos de ese culo perfecto que tienes

Joy. - Mmm, no pares de hacer ese roce

Ash. - Mejor vamos al hotel, ¿si?

Joy. - No haremos nada, lo sabes ¿no?

Ash. - Anda, por favor

Joy. - No Ash, pero sí, ya vámonos

Ash. - Genial

▪️
Se despidieron de todos, quedando en verse temprano para trabajar en aquel hospital.
Justo antes de salir del bar, Joy frenó en seco antes de llegar a la puerta, sacó su billetera, y saco un par de dólares, a lo que Ashley la miró  confundida.

Ash. - ¿Qué harás?

Joy. - Espera, ven

Ash. - Okey?

▪️
Tras aquello, Joy tomó de la mano a Ashley, quedando recargadas nuevamente en la barra, pero alejadas de todos.
Joy le susurró algo al bartender, quien a los segundos volvió y le entregó un plumón tinta negra, la castaña lo recibió y en el dólar anotó:

"Que Alaska me conceda una vida con Ashley Grace"    

.... Ash al ver aquel escrito sonrió y tomó el otro billete, colocando otro sello diferente diciendo:

  "Y si Alaska no se lo concede, lo haré yo, Señorita Joy Huerta"

Ambas sonrieron, y se observaron directamente a los ojos, profundizando el amor en sus miradas, y fue Ashley quien se abalanzó y probó aquellos labios que la volvían loca, aquellos que le reflejaban una eternidad de la que no quisiese salir nunca, porque ese era su lugar, el lugar donde quería estar.

Colocaron en lo alto de una pared sus dos dólares, con la esperanza y felicidad de que harían hasta lo imposible porque se cumplieran aquellas palabras que pedían a la suerte de Alaska.
Una vez saliendo de aquel bar, se dirigieron al hotel, Ashley se quitó los nervios y le dijo a Joy que no quería dormir sola, y pícaramente mencionó que quería dormir entre sus brazos, Joy sonrió y tiernamente le dijo que podía quedarse con ella, y sin hacer ruido fueron directamente a la habitación correspondiente de Joy.

Al tiempo en que Ashley cerraba la puerta tras ella, "torpemente" Joy dejó caer las llaves al suelo, enseguida se agachó para alzarlas, pero en ese mismo instante Ashley pretendía seguir avanzando, consiguiendo así chocar contra el gran trasero de Joy, no dudó en colocar ambas manos sobre él, y restregar su parte pelvica en él; Joy al sentir aquello, soltó un ahogado gemido que la hizo quedar en aquella posición de veinte uñas sobre el piso.

Ig. feertorreess
Ig. joyleyoficial

Mi Historia Entre Tus DedosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora