Cap 90

886 56 14
                                    

Tras salir de aquella pista de hielo, hicieron planes para recorrer y disfrutar al máximo ese día.
Decidieron ir primero por un almuerzo, en un restaurante sumamente tradicional.

Al salir continuaron con los planes que ya tenían para el resto del día. Disfrutaron, rieron y por momentos se perdían ambas parejas por sus rumbos, encontrándose casualmente de nuevo, hasta que la noche cayó y Hanna quería llevar a su sobrino por una sorpresa como parte de su regalo de cumpleaños

Hann. - Se los llevo en la noche, lo cuidaremos muy bien

Ash. - ¿Lo prometes? Es mi niño chiquito -dijo viéndolo con amor-

Angel. - Pff, porfavor, es obvio Ash, somos su tíos, lo cuidaremos bien

Joy. - Es mi pequeño, cuidenlo mucho mucho porfavor -dijo sin querer aceptar- Mmm, está bien -asintió-  pero dejen les organizo las maletas, denme dos minutos se acercó a una banca para acomodar las cosas-

Hann. - La mamá responsable -rió-

Ash. - Hey, yo también lo soy

Angel. - Si, pero ella te deja abajo -rió-

Ash. - Cierto -se unió a las risas viendo a Joy concentrada separando la ropa sucia de la limpia, y empacando las mamilas limpias- 

Joy. - finalizando- Ten Hann, aquí está todo

Hann. - Gracias mamá luchona -sonrió burlonamente-

Joy. - Amor! Que han hablado de mi, eh? -cruzó sus brazos de forma pacífica simulando enojo-

Ash. - Nada, nada amor, cosas buenas

Hann. - Bueno, bueno, lamento interrumpir pero, entonces les entregamos en la noche a su bendición

Ash. - ¿Podría quedarse a dormir con ustedes?

Angel. - ¿Y eso?

Ash. - Mi novia me prometió una sorpresa para la noche   -alzó los hombros-   Quizá sea una cena elegante, o una rumba para bailar, no sé que planes tenga, solo dijo que me iba a hacerla pasar muy bien   -pasó su mano por la cintura de Joy dando una apretón sensual-   ¿Verdad amor?

Joy. - Ohh, cierto, es algo romántico, ¿pueden cuidarlo hasta mañana?

Hann. - Bien, solo porque fue su cumpleaños, y porque Angel debería ya de ir practicando

Angel. - se sonrojó-  Hann, preciosa, me parece una excelente idea -sonrió cargando al pequeño de los brazos de Hanna-   Vamonos, guapos.

Ashley. - Chaoo

Joy. - Adiós mi príncipe hermoso!

Hann. - Good Bye!

ASHLEY

Noche libre para Joy y para mi, nada me hacía sentir tan acelerada que en ese momento saberlo.

Joy. - Así que te debo una sorpresa, ah

Ash. - Al parecer sí -sonrió-

Joy. - Am, tengo una idea, toma el auto y dirígete a la habitación, llego en unos minutos

Ash. - ¿y eso?

Joy. - Es la sorpresa

Ash. - Oh por Dios, haré una pequeña cena, allá te espero amor

Joy.- Bien amor, enviame mensaje cuando llegues, yo no tardaré

Ash. - Tomas taxi ¿okay?

Joy. - Ok, amor. Allá te veo - le dió un corto beso en los labios- Cuidate amor, te veo irte

Ash. - giró lista para montar el auto, pero antes de subirse recibió una palmada sobre su gluteo-  Mmmhg, ¿comenzamos desde aquí?

Joy. - Pff, como quisiera hacerlo, y pegar esas tremendas sancas en mí.

Ash. - Te deseo tanto

Joy. - Ya, me voy a apresurar para hacerlo, te vel al rato, adiós amor -le cerró la puerta para que se pudiese poner en marcha-

HANNA

Salimos de aquel lugar a media calle, y llegamos a una pequeña jugueteria clásica en Alaska, entramos y de inmediato nos acojimos en su calor de luces navideñas y aquel olor a nuevo de cada juguete situado dentro de allí.

Recorrimos cada pasillo mirando la utilidad de las cosas, Eduardo iba sumamente feliz viendo todo, en sus manos llevaba consigo un oso de peluche, era algo clásico y sumamente sencillo, pero desde que cruzamos la entrada Angel se lo dió y ya nunca más lo soltó, por mas juguetes que le enseñarámos, no se despegó de él.

Entramos los tres con una pañalera en mano, y salimos acompañados de unas cuantas compras de nuestro pequeño y querido sobrino.

Nos dirigimos a un lugar para comer, en el cual había área para niños, Eduardo no tenía la edad para estar ahí así que pude ver la escena que me enamoró aún mas, Angel cargando a Eduardo para que recorriera cada extremo del circuito de juego.

Simplemente sonreí, y tras algunos minutos pedimos una cena un tanto ligera para poder dormir después.

JOY

Fui por aquella sorpresa que le tenía en mente a Ashley, acompañada de un buen vino y comida china para el siguiente día, me encontraba llegando al hotel.
Baje de aquel taxi después de pagar, tomé los bolsos, y me dirigí a la habitación que había sido asignada para ambas. En cuestión de segundos ya estaba totalmente derretida por aquel olor tan rico que invadía mis fosas nasales. Caminé hasta tomar por la cintura a mi chica, la cual al saber que era yo, me pegó su trasero a la pelvis, creando una rica fricción entre ambas partes

Joy. - Mmmngh, amor, pero que rico -dijo jadeando-

Ash. - ¿Qué cosa? ¿La cena, o ésto? -en ese momento comenzó a mover aun más sexymente su trasero contra Joy

Joy. - Mmmmmhg, la cena, obvio -se apartó de ella-   Puufffff, que calor hace ¿no?  -dijo sonriendo nerviosamente y quitando su chaqueta-

Ash. - Dame esas bolsas, te ayudo

Joy. - NO!   -las arrebató-   Yo lo hago, no te molestes -dijo nervisoa-

Ash. - ¿Qué es Huerta?

Joy. - Compre sushi, y am, un gran postre

Ash. - Oh vaya! Pues voy sirviendo la cena para después probar el postre ¿ok?

Joy. - Si quisiera verte probándolo -dijo murmurando-

Ash. - ¿Qué?

Joy. - Que me gustaría ya probar tu cena, amor

Ash. - Ahhh, okey, siéntate ya -dijo inocentemente-

Tras acabar aquella cena, Ashley se puso de pie acercándose al lava platos, ya que así como era ella, no toleraba ver desastres de cosas sucias.
Joy la dejó terminar, y acabó apagando las luces que ya no se utilizaban, se acercó a los bolsos que había llevado a casa, y sacó aquella sorpresa que compró horas atrás.

Se acercó por la parte de atrás de su alta, y la agarró en una excelente posición

Joy. -Colocando una de sus manos sobre el pecho de quien fregaba los platos sucios-   Amor, ya vamos al postre -pronunció con una voz ronca que hizo exitar a aquella morena-

Ash. - Trago saliva- Mmmgh, amor -dio la vuelta encontrándose de frente con aquella castaña-  Porque estás tan nerviosa, ¿tan bueno es el postre?

Joy. - Oh vaya, creo que es extremadamente bueno, y quiero probarlo contigo-   Dijo rozando aquel juguete contra el brazo de Ashley-

Ashley. - Al ver lo que era, la puso ahora en nervios a ella-   Oh, Joy, esto será sumamente diferente

Joy. - Lo sé -se abalanzó a besarla calientemente-

Ig. joyleyoficial
Ig. feertorreess

Mi Historia Entre Tus DedosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora