Mi Historia Entre Tus Dedos

Cap 84

JOY

Desperté muy temprano al amanecer siguiente, miré a mi lado y allí estaba mi pequeño aún dormido, pero Ashley Grace no estaba ¿Acaso no llegó en toda la noche?

De inmediato me puse de pie, y salí en búsqueda de ella, mas que por celos o enojo, tenía preocupación de que verdad no hubiese llegado a dormir. Busqué en el baño, y estaba su toalla húmeda, eso me decía que estaba dentro de casa, eso me relajo mucho, fui a la cocina, y allí estaba ella, mi corazón comenzó a regular sus latidos al verla bien y en casa conmigo

Joy.- Ash, aquí estás

Ash.-Corazón, ¿dónde más estaría? -sonrió-

Joy.- No sé, te esperé y no llegabas, y de pronto el sueño me atacó

Ash.- Te vi muy dormida que no quise despertarte, para decirte que ya había llegado

Joy.- Lo hubieras hecho -encarnó ambas cejas-

Ash.- No amor, pero aquí estoy -alzó ambos hombros- Dame un beso ¿sí?

Joy.- algún extremo de ella estaba aún con orgullo- Emmm, debo ir a alistarme

Ash.- ¡El vuelo!, debo cambiar al niño, darle una ducha

Joy.- No, ayer ambos nos dimos una ducha antes de dormir

Ash.- ¿De verdad?

Joy.- Sí, mientras saliste con Hanna -dijo haciendo notar el sarcasmo y se dirigió a la habitación para cambiar su ropa-

ASHLEY

Con la actitud de Joy, creo que si fue mala idea salir a altas horas de la noche un día atrás, pero era algo que de verdad tenía que hacer, y mismo que Joy aún no podía saber. Ahora tengo que hacer el intento de hacerla olvidar "el mal rato" de anoche.

Me levanté de aquel banquillo en el que estaba, y fui tras de ella hasta la habitación, antes de entrar quise observarla sin que supiera que yo estaba allí, y pude admirar la escena que alegró mi mañana de ese día... La vi frente al espejo que teníamos, bailando diferentes ritmos, mientras aumentaba una prenda sobre ella, hacía pasos y expresiones en su cara, distintas. Simulaba estar con un micrófono cantando, se agachaba y levantaba, sonreía y hacia expresiones sensuales, un total estuche de monerías vi en ese instante.

Una enorme sonrisa se pinto en mi rostro, y una que otra carcajada llegué a exhalar, hasta que en un momento donde levantó su micrófono (que en realidad era el control del televisor), cayó al suelo de madera, haciendo ruido, provocando que el pequeño que estaba dormido abriera sus pequeños ojos.

La reacción de ambas fue correr al instante en que despertó, para hacerle saber que sus madres estaban allí con él; Joy se sorprendió al ver lo pronto que llegue para ver al niño, y pude ver sus mejillas encenderse a color rojo. Tomé al niño entre mis brazos, y tomé lugar en la cama, Joy se acercó sentándose a mi lado

Joy.- Me gusta verlo despertar

Ash.- Se ve tierno ¿no es así?

Joy.- Mucho, me gustan sus pestañas risadas -se dirigió al bebé- Hola guapo, aquí estoy yo....tu mamá la más bella, nos parecemos en algo

Ash.- ¡Heey! ¿Y yo qué? ¿Dónde quedé?

Joy.- Mentira.... tu mamá la más hermosa es ella... es Ash

Fue allí donde la vi un poco distraída, y me abalancé hasta robarle un beso en aquellos labios fríos que estaban en dirección hacía nuestro hijo. Al principio se quitó, mirándome a los ojos "con rabia" ...Debo aceptar que Joy Huerta no sabe fingir, ella sentía el mismo deseo y amor que yo, y con esos mismos ojos de enojo, los bajó pronto a mis labios, fue allí donde entendí que quería seguir con aquel beso, y sin más, me acerqué nuevamente para crear un profundo beso.

20... 30... 50... minutos habían pasado, y la hora de nuestro vuelo estaba muy cerca, salimos del departamento apagando todas las luces, nos subimos al uber, y en menos de lo esperado ya estábamos en el aeropuerto esperando el vuelo.

NARRADOR

De vuelta en Alaska, tras varias horas de viaje, nuevamente regresaron al país que tanto las enamoró, y en el cual prometieron regresar juntas y con su pequeño hijo.

Joy se encargó de ver llegar el auto que había sido importado con sus pertenencias dentro, mismo en el que se irían a un hotel que ella misma reservó, como parte de la sorpresa que les dió.
Al llegar a la habitación, toda la familia fue a ducharse junta, pues les caería bien antes de ir a dormir, ya que fue el primer vuelo de su pequeño, y fue algo muy cansado para todos, incluso aún más para Huerta; ya que ella se preocupaba por cada cosa que pasaba frente a su hijo, esa atención de Joy con Eduardo, era la que hacía derretir de amor a Ashley al mirarlos tan tiernos juntos.
...
Tras salir de la ducha, fueron a recostarse, ya que por la tarde Joy había planeado una cena, en donde los tres irían muy guapos y así lucir bien para ellos mismos.

ASHLEY

La hora a la que debíamos comenzar a alistarnos, había llegado, me metí en bata al baño, ya que quería lucir lo suficiente atractiva como para que Joy se paralice al verme y tentarse, ya que no podría tocarme en público.

En aquella habitación de baño saqué la calentadora de pelo, y comence a hacerme ondas sobre mi cabello negro.
Posteriormente coloque en mi, el vestido que veía adecuado, era color vino, tenía un gran escote por la parte delantera, lo suficiente para que ambos pechos relucieran, mi espalda estaba totalmente al descubierto; coloqué unas zapatillas del mismo color, y tras ponerme un poco de maquillaje, salí para ver si Huerta estaba lista.

Quería dejar sorprendida a Joy, pero quien me dejó boquiabierta fue ella a mi, ya que con ella portaba un pantalón y saco beige, entallados a sus caderas, aquellas que me volvían loca, por dentro cargaba una polera de encaje negra, ajustada totalmente a ella, a través de aquel transparente podía ver resaltar sus dos pechos, aquellos en donde me gustaba hundir mi rostro y aspirar cada parte de su fragancia.

Simplemente intenté normalizar aquella palpitacion que se creo que mi centro, tragué en seco y me acerque a ella, quien se giró a espaldas de mi, cuando me vió dar pasos a hacia ella.

Ig. feertorreess
Ig. joyleyoficial