•ɴɪɴ̃ᴏ ᴍᴀʟᴄʀɪᴀᴅᴏ• Sonadow

IX

—Ésto me huele muy mal— Susurró Rouge con las manos en la cintura, observando como el erizo se alejaba.

—Ni me lo digas...— Contestamos Knuckles y yo al unísono.

Mas tarde, nos dirigimos a casa. El par de tortolitos se fue por su lado, dejándome afuera de mi hogar.

Entré a casa y saqué mis libros para estudiar un poco. Hojeando las páginas, un pedazo de papel sobresalía del libro; lo tomé y ví que tenía una nota escrita:

"Me han sorprendido tus habilidades en la carrera, no voy a negarlo. Sin embargo, no creas que te has librado al cien por cierto de la humillación que puedo hacerte, Shady. No creas que no me dí cuenta que tus dos amigos entraron a indagar en mis cosas, aunque bueno, fue divertido ver como se sentían espías. En fin, que no tenga las fotos no significa que no puedo hacerte quedar mal con alguna otra cosa; por lo que espero que hagas un buen trabajo cuando vengas... Te mando besos 💋"

Al terminar de leer, sentí mis mejillas calientitas, no sabía si era por enojo o porque quizá iba a enfermarme, pero... Leer esa nota me quitó todas las ganas de estudiar, lo dejaré aquí por hoy.

Al día siguiente:

El día de hoy fue un día escolar bastante normal, nada del otro mundo porque es Viernes. Solo leer, trabajar y soportar a algunos compañeros odiosos.

Después de unas horas, específicamente a la hora de salida, pude ver de lejos como Sonic se subía a una camioneta totalmente polarizada y sin placas, con guardaespaldas detrás.

—Una vida de rico es lo que todos quieren pero, yo no la quiero, no la necesito y no quiero relacionarme con nadie de ahí— Digo en voz baja mientras saco el pedazo de papel con la dirección del cobalto. Suspiro y me dirijo para su hogar.

Después de caminar como... Unos 10 de kilómetros y haber tomado más de 3 camiones mientras veía Google Maps para no equivocarme, llegué a una especie de condominio y el guardia de éste se me quedaba viendo despectivamente.

—¿Busca algo, joven?—

—Y-Yo estoy buscando a Sonic the hedgehog—Contesté apenado, evitando mirarle la cara.

—¿Cuál es su nombre?— Cuestionó el hombre.

—Shadow, soy Shadow the hedgehog—

De repente, el guardia me mira asombrado.
—¡Oh, joven Shadow! Lo siento... Espere un poco, deje llamo al guardaespaldas del joven Sonic para que pase por usted— Exclamó el guardia mientras llamaba a una extensión desde su viejo y polvoriento teléfono.

—P-Pero yo... Eh...— No sabía de contestar, ¿Sonic habrá pedido que me trataran bien o solo era un guardia muy amable?

Un automóvil idéntico al que se subió Sonic en la salida llegó y un enorme cocodrilo bajó del lado del conductor, abriéndome la puerta de atrás.
—Adelante, joven Shadow— Dijo.

Me quedé petrificado, pero antes de reaccionar, el guardia ya me había empujado al auto y había cerrado la puerta. De un momento a otro, el auto ya estaba andando.