Es el heredero de la familia Kim, un omega pequeño y bonito pero bastante mimado; todo lo que dice se debe de hacer...
Jin lo tiene todo, padres que lo adoran, una casa grande, un perro, un criado que lo mima demasiado, no le hace falta nada, sin em...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Nunca había salido de casa de sus padres sin permiso, y menos a un lugar prohibido como lo era el norte de la ciudad.
Tenia puesto un modesto traje de color marrón y un sombrero de listones que lo hacían ver menor a lo que era.
Jin miro a la puerta esperando a que llegara Yoongi emocionado pero nervioso, esta era su primera vez con el viajando y estaba pensando varias cosas que Yongsun le dijo de manera maliciosa una noche anterior.
"¿Lo vas a hacer con el finalmente?"
―No sé, quizá―
―Ya no serás un virgen― se burló.
―No te burles, estoy nervioso―
―Nada que temer, no es un alfa, los alfas son horribles y te hacen daño―
Jin miro los libros en la cama
―¿Es así?, me contaron que te rompen―
―Son unos brutos y meten el nudo haciendo llorar al omega no importa que te niegues, suerte en no enamorarte de uno―
Jin bajo la mirada
―¿Segura que todos lo hacen?― la omega asintió, tomo un libro y se lo mostro.
―Los alfas y las alfas no controlan su lado animal por que sus padres piensan que no es necesario, entonces cuando toman a los omegas les da igual si les duele o no, solo lo hacen, por eso nadie se divorcia, prefieren seguir con su alfa por que ya le conocen a pasar por el dolor de encontrar otro que les haga daño―
―¡Todos los omegas casados no disfrutan del sexo?!―
―La mayoría―
Jin trago saliva, pero Hoseok se había contenido, no lo daño y aunque dolió no fue aterrador en absoluto, Jin no supo que decir, tomo el libro y lo leyó confundido.
Entonces la única manera de probar si la teoría era cierta también era haciendo aquello con Yoongi, de todas maneras, era su novio.
―¿Estas bien?―
Jin miro a Hoseok y suspiro.
―Amo, el joven Yoongi no vino por una emergencia no por que no lo quiera― Jin suspiro una vez más.
―Vamos, anímese, será un verano juntos y sin la señora Doona diciéndole que no se meta al agua fria―
Jin asintió viendo con pena la entrada de la estación del tren y suspiro otra vez.
Escucho una risita burlona detrás de el y ambos giraron para verle.
―¿Qué te causa gracia?― Jin miro a Taehyung molesto.
