~ XLI ~

1.4K 131 41
                                    


-¿Ya vamos por el Rarito?-

Preguntó Jeon, abrazando tiernamente a Jimin por la cintura mientras se mantenían en el pasillo de cristalera en vez de paredes.

-Se llama TaeHyung-

Aclaró Jimin, mientras apoyaba tranquilamente la mejilla en el pecho del más alto, a la vez que lo abrazaba por el cuello con delicadeza, esperando poder estar lo más cerca de ese tranquilo latido perteneciente a Jeon.

-¿Eso me debería importar porqué...?-

Preguntó restregando levemente la cara en el cabello rubio del mayor, dejándose llevar por la cálida sensación que le proporcionaba el hecho de estar entre los brazos de Park y, que a su vez, Jimin estuviera entre los suyos.

Para cualquiera sería un simple abrazo de dos personas que se aman, pero para ellos no era nada de simple, con ese abrazo no solo se demostraban el amor que sentían, sino, que también se transmiten seguridad: Jimin sabe que ningún idiota llegará a dañarlo si está entre los brazos de su chico, así como cuando eran pequeños y Jeon era el pequeño más rudo de la escuela y de donde vivían, así que nadie los molestaba porque Kook les daría una paliza; Y JungKook sabe a la perfección que ninguna voz aparecerá si Jimin está ahí, y si es que llegara a aparecer, sabe que la voz de Park siempre aparecerá para traerlo devuelta a la tierra de los cuerdos.

-Porque es mi amigo, y quien se encargó de mantenerme vivo hasta que apareciste.-

Medio regaño antes de separarse con cuidado del cuerpo que tanto calor y seguridad le brinda, solo para poder tomarle la mano antes de comenzar a caminar hacia la oficina de Jin, donde debería estar Kim esperandolos luego de la terapia.

-Eso fue un golpe bajo, eh-

Aseguró Jeon, quien le soltaba la mano para poder ser capaz de abrazarlo por la cintura mientras caminaban, asegurándose de que a Jimin ningún loco se le acercara.

Ya llevaba tanto tiempo ahí, que había notado que en ese lugar no eran malos, solo estaban locos y por eso hacían locuras ¿pero acaso no lo estaba él también? Todos ahí tenían problemas, y todos los demostraban de forma diferentes, pero eso no quitaba que entre locos se incomodaran, y ese era el caso de su pequeño rubio. Con el pasar del tiempo, noto que JiMin en vez de haber mejorado esa actitud sumisa que siempre tuvo, solo había incrementado.

¿Entendia el motivo por el cual incrementó? Si y no, abusaron de él, lo sabe, sabe que abusaron de todas las maneras posibles de su pequeño ángel así que era lógico que estuviera así, pero ¿no había pasado tanto tiempo para que él ya fuera capaz de, por lo menos, mirar a las personas a la cara? Eso no lo entendía.

A pesar de todo lo que dijera Jin para autoconvencerse y no traer a Jeon aquí, todos sabían que este lugar era el mejor. Era un paraíso encargado de recordarle a cada loco que la vida es linda, y que con ayuda, todo se ve mejor, por eso es en "pareja", son sus propios cables a tierra, uno se recuerda a otro que está bien, que pueden juntos mientras tienen a los mejores expertos lavandoles el cerebro para arreglarlo, entonces... ¿Por qué JiMin aún no mejora? Estar en este lugar sale una fortuna, no cualquiera puede costearse una instancia en este psiquiátrico que aseguraba el 99% de mejoría, por no decir que el 100%. JiMin lleva años aquí, pagando una fortuna que ni siquiera sabe de dónde salió, porque ninguno de los dos cuando era pequeño tenía tanto dinero, no eran pobres, pero no eran millonarios. ¿Que se supone que pasa? ¿Por qué JiMin aún sigue estando en este lugar sin grandes logros?

-Puedo ver tus engranajes moverse ahí dentro.- Comentó con una leve sonrisa Jimin, mientras lo miraba curioso. -¿Que piensas tanto, Kookie? Algo utiliza tu mente y no me prestas atención, eh-

You're good? [KookMin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora