-Lápiz, lápiz, lápiz- Pensaba una y otra vez Jeon, manteniendo la nota entres sus temblorosas manos. -Hoseok ya debería estar por venir, y de seguro con algún lápiz...- Seguía pensando. -Alguien debe darme mis medicamentos, ¿no?-
Tratando de controlar su respiración acelerada por la emoción, comenzó a caminar de un lado hacia a otro frente a la puerta roja, esa que siempre esta cerrada frente a él.
Mientras tanto, entre paso y paso, se dispuso a leer y releer un incontable número de veces la nota que tenía entre sus manos, esperando "pacientemente" a que algún médico o enfermero viniera por ese pasillo para pedirle prestado algún lápiz, porque claramente no está dispuesto a abandonar ese lugar por un simple lápiz, si no lo había hecho antes que habían mayores razones, mucho menos lo haría ahora que estaba teniendo señales de Jimin, señales que le daban la esperanza para seguir esperándolo ahí, esperanza que le grita que existe la posibilidad de que Jimin lo perdone por todo lo que le hizo, y que así, puedan estar juntos otra vez.
Si vienes, por ejemplo, a las cuatro de la tarde, comenzaré a ser feliz desde las tres
-Jimin
-Harás un agujero en el suelo, JungKook-
Comentó Taemin, quien estaba llegando hasta él, sin siquiera haber sido notado por el menor.
El terapeuta siempre estaba igual, su ropa siempre bien estilizada, todo combinaba y estaba pulcramente estirada, junto a su bata totalmente blanca y el maletín negro con todos sus documentos.
-¡¿Me prestas un lápiz?!- Medio grito, dando grandes zancadas para llegar rápido hasta donde el mayor.
-¿Un lápiz?- Le mira extrañado
-Si, un lápiz ¿Acaso estás sordo?-
Habló a la vez que toma un lápiz de los que tenía el mayor en el bolsillo del pecho de su bata blanca, sin importarle para nada la respuesta que podría haberle dado el doctor Lee.
-Si, JungKook, puedes tomar un lápiz- Suspiro luego de haber hablado sarcásticamente mientras veía como el chico se hincaba para poder comenzar a escribir rápidamente en un papel. -¿Que se supone qué haces?- Preguntó extrañado, hincándose frente a él para mirar que hacía.
-Nada que a ti te importe-
Respondió dándose la vuelta, aún hincado, para que Taemin no fuera capaz de ver, y mucho menos leer, la hoja que le había "mandado" Jimin.
-Jeon, soy quien se encarga de tu cuidado aquí, todo lo qué haces me importa. Debo asegurarme que no sea algo malo para ti, ni para los demás.-
-Con UN hermano mayor me basta y sobra, gracias- Dijo a la vez que comenzaba a gatear rápidamente hacia la puerta de color rojo.
-¡Hey, no! ¡JungKook, no te acerques a esa puerta!- Medio grito, acercándose rápidamente al menor esperando lo peor, hasta ver que solo introducía un papel entre la separación que había entre el suelo y la madera roja. -¿Qu... Qué haces?- Preguntó extrañado, mirando atentamente por donde había entrado la hoja.
-Como dije antes, nada que a ti te importe-
Respondió indiferente, levantándose para luego comenzar a caminar como si nada pasara hacía el baño, pero en su interior, había un montón de emociones chocando entre sí: felicidad, miedo, cariño, pánico...
Quedando completamente anonadado y solo en el pasillo al ver como es que el menor simplemente se fue al baño, Taemin se acercó cuidadosamente hacia la puerta roja, llegando a escuchar una leve, casi imperceptible, risita desde el otro lado de esta, junto a un "Ese es mi Kookie".
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You're good? [KookMin]
Fanfiction-¿Que es capaz de hacer una persona que está en un hospital psiquiátrico?- Jeon JungKook, un "drogadicto" que puede cambiar de personalidad bruscamente y que además, escucha voces, es llevado a un hospital psiquiátrico donde trabaja su hermanastro m...