You're good? [KookMin]

~ XI ~

-¿Jimin? Hey, pequeño... Todo estará bien...-

Susurró JungKook, al mismo tiempo que se colocaba en cuclillas frente a un tembloroso Jimin, que se encontraba abrazándose las rodillas, manteniendo oculta la cabeza tras estas, como si fuera un huevito, sin tener intenciones de mirar o acercarse a alguna persona de la habitación, listo para los golpes que esperaba atento a que llegaran.

-Jimin... Mírame, ¿Si?... Todo irá bien...-

Murmuró bajo, mientras se acomodaba para tratar de abrazarlo con muchísimo cuidado y precaución, con la intención de no asustarlo en el intento de reconfortación que estaba llevando a cabo, lo cual no resultó del todo bien al principio, ya que el más bajito se comenzó a remover con fuerza entre los brazos del menor, tratando de que lo soltara mientras repetía una y otra vez que lo dejara, que él no había hecho absolutamente nada malo.

Recordando todo lo que Jin hacía por él cuando tenía crisis, se mantuvo firmemente abrazando a Jimin mientras le susurraba que todo estaría bien, que no pasaría nada malo.

-Yo no fui... No hice nada malo... Lo juro...-

Susurró aún entre sollozos una vez que se rindió ante el abrazo de JungKook, el cual no lo soltó en ningún momento, provocando que terminara sentado en el suelo con Jimin casi a horcajadas sobre él.

-Lo sé... Claro que lo sé... - Murmuraba manteniendo un brazo firme en su cintura para abrazarlo mientras le acariciaba la nuca con la otra mano -Fue mi culpa... No fue tuya, Gatito... No hiciste absolutamente nada malo-

-Yo me comporto bien... Yo... Yo ya aprendí la lección, no lo volveré a hacer... Ya no grites más... Po-Por favor...-

Susurraba acurrucándose en el pecho de Kook, el cual estaba logrando tranquilizarlo poco a poco, gracias a las caricias y a la manera tan tranquila en la cual le hablaba.

-Lo sé... Ya todo acabo...- Murmuraba sin dejar de acariciarlo -Nunca más volverá a pasar... Lo prometo Gatito...-

-JungKook... No soy un gato-

Murmuró haciendo un pequeño puchero que no era visible por nadie que no fuera Kook, el cual lo miraba atentamente mientras este ocultaba la cara en su pecho, notoriamente más tranquilo, consiguiendo por fin volver en si mismo, recordando donde estaba.

-¿Ah? Claro que si ¿acaso no te has visto frente a un espejo, Gatito?- Preguntó riendo levemente, sin dejar de acariciarlo, con claro temor de que si paraba, Jimin podría caer en ese vacío otro vez.

-Minnie, ¿que tal va el hambre? ¿Ya te dio?-

Preguntó el mayor de los tres chicos presentes mientras volvía a sentarse tras su escritorio, notoriamente más relajado al ver que ya se había calmado no una, sino, dos situaciones bastante feas, la de JungKook con su enojo y la de Jimin con su pequeña crisis de pánico.

-Ya pasó una hora, el medicamento debería tenerte con hambre a estas alturas, pequeño-

Dijo como si nada, mientras los otros dos se despegaban como si fueran agua y aceite al recordar que no estaban solos en ese despacho, sintiendo una notoria vergüenza al verse "descubiertos" en esa situación, la cual no se solía ver con nadie que no fuera TaeHyung.

-¿Eh?... Si, si, creo que un poco, Hyung...-

Murmuró colocándose de pie, a la vez que el menor, para comenzar a limpiarse la ropa como muestra del notorio nerviosismo que comenzó a sentir después de analizar el estado en el que estuvo con el chico que acababa de llegar al lugar.

-¡Excelente! Ahora, yo creo que TaeHyung los debe estar esperando afuera- Sonrió entregándole un vasito con pastillas y una botella de agua al menor -Estos son tuyos, JungKook, se te calmarán los temblores y el seguro dolor de cabeza que te debes estar trayendo-