boy crush | matsquare

48.

'Estaras aquí con nosotros hasta que las cosas mejoren' conteste rápidamente yo. Intentando convencerle aún aunque supiera que todo estaba perdido. 'Por favor' dije entre lágrimas y apretando mis labios con fuerza.

'¡No puedo Matias!' dijo después de unos segundos.

Trague saliva y respire profundo. 'Me gustaría creer que te quedas...'

'...por mi' dije finalmente mirándole con los ojos enrojecidos.

'No seas así' contestó el, siendo algo más serio que yo. 'No se trata de ti, se trata de mi'

'Se trata de lo mejor para mi' explicó y cuando acabó de decirlo, no pude evitar sollozar con fuerza. Como si me faltara la respiración.

Pocas veces hago ruido cuando lloro pero esta vez, no lo pude evitar.

'Matias...' pronunció mi nombre intentando acercar su mano para que dejará de llorar. 'No' respondí yo firmemente, aunque sabía que en esos momentos, necesitaba ayuda.

Un abrazo, algo que me calmara.

'¡Matias!' llamo mi nombre captando toda mi atención, rodeando mi cara con sus manos sobre mis mejillas. Mirándome fijamente y haciendo que yo también mantuviera la vista sobre el.

'Sos mi primer amor' pronuncie en un pequeño hilo de voz mientras los dos manteníamos el mismo juego de miradas. Rod cerró los ojos con fuerza, como si el también intentara retener las lágrimas.

Sin abrirlos, se abalanzó sobre mi y comenzó a besarme rápida y ansiosamente. Mis manos temblaban.

'¿Que hora es?' preguntó delicadamente cuando acabó de besarme. Sabía por qué lo preguntaba, mire al pequeño reloj de la mesa de noche. Eran casi las 7 de la mañana.

'Me tengo que ir' dijo, acariciando mi rostro intentando consolarme. Comencé a mover la cabeza hacia los lados, como si quisiera negar lo inevitable. Como si quisiera parar el tiempo, como si sirviera de algo negarme a mí mismo que dentro de unos minutos, todo habría acabado.

Y pensándolo, Rod era muy fuerte al tomar esa decisión por si solo. Sus padres le habían dado la espalda y yo le traicione acostándome con Ana en un momento de debilidad. Pero eso a el no le parecía preocupar más, simplemente sabía que mañana ya no estaría aquí y que no servía de nada discutir más sobre esos temas.

'¿Me acompañas a la parada de autobús?' preguntó, yo asentí y me limpie las lágrimas con la manga de la remera.

Comenzamos a caminar por la calle hacía la parada de autobús para salir de allí. Estaba a las afueras pero no tardaríamos mucho en llegar, nuestro pueblo era pequeño.

'¿No podré ir a visitarte?' pregunté mientras el caminaba delante mío sosteniéndome de la mano. El lo negó con la cabeza.

'No quiero más de esto'

'¿Por qué?'

'Quiero olvidarte' dijo. Sus palabras sonaban con tal fuerza y frialdad que me hacía pensar que para él era fácil olvidarme. Para mi no.

'¡Lo siento, lo siento lo siento...!' repetí una y otra vez dejando mi peso entero sobre su brazo. 'No quiero que te vayas, sé que la he cagado muchas veces pero te quiero...' giró repentinamente para mirarme. 'Conmigo' dije finalmente.

'Perdoname, por favor' lo último lo dije casi sin fuerzas. El mundo se me venía abajo y yo me venía con el. No quería no volver a verle. Quería repetir el tiempo. '¡Por favor!' suplique.

Rod, quién miraba hacia otro lado, supongo que para evitar llorar. Ablandandose por completo, pestañeo un par de veces y torció los labios dibujando un puchero. 'No puedo quedarme'

'Todo cambiara' solté.

'Te lo prometo' dije, intentando convencerle de cualquier forma que no se fuera.

'Matias, voy a llegar tar...' intento mirar hacia otro lado y seguir hacia delante. Yo tire de fuerza de su brazo.

'Por favor' volví a decir cuando le tuve cerca, el se sorprendió de que tuviera tal fuerza de atraerlo hacia mi. 'Yo no te voy a volver a dar la espalda, Rodrigo'

'¿Y cuando te canses de mi?'

'¿Y cuando te canses vos de mi?' pregunté con la misma entonación que el lo hizo.

'Las relaciones se acaban, Matias' dijo con tristeza. 'Tan solo tenemos dieciocho años'

'¡Vale!' grité. 'Entonces se acabara' baje un poco mi tono de voz. 'Pero hasta entonces te haré la persona más feliz del mundo'

'No lo sé, Matias' dijo confuso. Al menos lo estaba y ya no estaba seguro de marcharse.

'Nos despertaremos todos los días juntos, vivirás conmigo el tiempo que haga falta, mi casa será la tuya, te abrazare todas las noches...' intenté convencerlo más calmado de que se estuviera replanteando su decisión de irse.

'Dejalo Matias' dijo finalmente. Como si aceptará su última decisión. 'Me iré.'

Volví a comenzar a llorar porque sabía que no había ninguna otra forma de que se quedará. Comenzamos a caminar hacia la parada, cada vez quedaba menos y cada vez me entraban más ganas de morirme. Saber que yo había intervenido en su decisión de irse por culpa de lo que ocurrió con Ana aquella noche, me hacía tener rabia conmigo mismo. No quería ir.

'¿Que pasara con Nacho?' me atreví a preguntar cuando ya estábamos sentados en la parada, esperando al tren que se lo llevaría lejos de mi y de todo lo que habíamos formado en esos meses. '¿Y con Claudia?'

'Ellos no lo saben' contestó. Entonces entendí por qué razón no estaban allí con nosotros. 'Se lo contaras cuando yo ya me haya ido'

'¿Por qué no se lo dijiste?' pregunté con los ojos enrojecidos y las manos metidas entre mis piernas.

'Porque no quiero oír más razones para quedarme'

Asentí con la cabeza y luego mire al suelo de nuevo. '¿Tengo yo la culpa de que te vayas?' me atreví a preguntar con timidez. Rod río tiernamente y luego soltó un pequeño quejido en forma de que iba a comenzar a llorar.

'¡No!' dijo y luego me miró extrañado y al mismo tiempo feliz. '¿Como podés pensar eso?'

'No confías en mí Rod, por lo de Ana' explique.

'No es Ana' dijo insinuando que era una tontería. '¿Te acordás cuando te dije que el amor era triste?' asentí. 'Habran problemas, habrán días en los que discutiremos y donde me quieras ver lejos de ti, habrán días en los que te cansarás de los besos y los abrazos...'

'Y algún día, verás a otra persona de la misma forma en la que me viste a mí en un principio' dijo.

Eso sonó deprimente. Creo que lo normal es no pensar estas cosas cuando estás enamorado. ¿Quién habrá herido tanto su corazón para ver el amor como algo tan triste?

Yo.

'Vos también Rod' respondí. 'Vos también verás algún día a alguien de la forma en la que me viste a mi'

Suspiré. 'De eso consiste el amor' dije con fuerza, moviendo mis manos para recalcar mis palabras. 'De amar hasta que todo acabe'

'Vos también acabarás cansado de mi' añadi. 'Te cansarás de que sea tan inmaduro, tan estúpido, la cague constamente...Te cansaras de que me emborrache y haga tonterías, te humille alguna vez incluso' se me escapó una carcajada. 'Como hago continuamente con mis amigos...'

'Pero hasta que pase eso, seremos muy felices Rod' agarre su mano y la puse sobre la mia. 'Hasta entonces, todo será pasión, cariño y amor' dije finalmente.

Rod miró al suelo entre lágrimas y luego levantó su mirada para sonreírme. Asintió con la cabeza. 'Vale' respondió.

'Vale' sonreí yo también.