11

2.1K 316 20
                                    

Jimin mantenía sus ojos cerrados mientras soltaba varios gemidos debido al placer que estaba recibiendo y debía de admitir que el demonio era todo un experto en lo que hacía, pues le estaba generando un enorme placer que le era difícil de expresar. Yoongi se encargaba de chupar toda la extensión del pene del humano, deleitándose de los gemidos que le estaba provocando, además de sentir como se tensaba, dándole a entender que el humano estaba al borde del éxtasis del placer y la lujuria carnal, el castaño arqueaba la espalda cada vez que la lengua del pálido demonio tocaba la punta de su pene. Jimin abrió sus ojos sintiendo como lágrimas de placer se deslizaban por sus mejillas y como su garganta le pedía que gritara por todo lo que sentía, por todo lo que el demonio le estaba haciendo sentir. Yoongi dejo el pene de Jimin con un "pop" de fondo para verlo a los ojos, el humano era todo un desastre y solo para él, Yoongi lo miro a los ojos mientras pasaba su lengua por los labios de Jimin que dejaban probar aquellos finos labios demoníacos.

—Prepárate Jiminie. —dijo. —sabrás que es tocar el infierno mismo.

Jimin solo asentía cegado por las caricias y por todo el placer que estaba sintiendo su cuerpo, solo quería ser tomado y profanado por el demonio, el pálido levantó a Jimin y lo puso en su regazo, a lo cual Jimin cerró los ojos y soltó un fuerte jadeo al sentir lo duro que estaba el demonio. Yoongi se dirigió al cuello de Jimin mientras que este hacía su cabeza hacia atrás para darle todo su permiso al demonio para que hiciera con él lo que quisiera, el demonio aceptó la invitación dándole así una fuerte mordía, eso hizo que Jimin gimiera y el demonio se burlara de lo patético que estaba siendo el humano.

—Deseas mi polla en tu interior. —se burló el demonio. —¿No es así humano?

Jimin asentía deseoso de tener ese trozo de carne muy en su interior, Yoongi gruñó al sentir como el alma pura se movía en su polla erecta invitándolo a entrar ya en él, el demonio tiró a Jimin a la cama con fuerza para verlo y se quitó su última ropa para pasar su pene húmedo por el pre semen en la virgen entrada del humano, Jimin miraba aquel trozo de carne asombrado por el tamaño y no pudo evitar morderse los labios y soltar un suspiro.

—¿Te gusta? —le preguntó con maldad.

—Sí. —respondió Jimin con dificultad, pues se sentía muy excitado.

El demonio se acercó a Jimin y lo volvió a besar, esta vez uniendo sus lenguas en el beso, Jimin sentía como aquella lengua experta recorría toda su boca y Jimin pudo distinguir en la boca del pálido el sabor de alcohol. Jimin se sentía nervioso a fallar en el beso, por lo cual decidió bajar sus manos a la hombría del demonio y tomarla con sus pequeñas manos, provocando que el demonio le diera una mordía en su labio.

—Vaya Jiminnie donde quedó tu inocencia. —habló mientras lo tomaba del cuello, pero sin imponer fuerza.

—Usted dígame. —sonrió para tratar de calmar sus hormonas.

El demonio lo tiró con fuerza a la cama por lo cual Jimin retrocedió y con sus manos tomó los barrotes para respirar con dificultad, el castaño gimió al sentir besos y mordidas en sus piernas hasta llegar a su cuello, Yoongi le dio una mordida en el lóbulo de su oreja mientras que con su mano lo masturbaba con lentitud para torturarlo.

—Abre las piernas. —le ordenó mientras apartaba uno de sus mechones.

Con nerviosismo, Jimin las iba abriendo viendo cómo el demonio se saboreaba al ver su entrada, Yoongi llevó dos de sus largos dedos a la boca de Jimin y le ordenó que los chupara, la pequeña lengua del castaño bailó a lo largo de los dos dedos del demonio llenando estos de su saliva y admirando la penetrante mirada que el demonio le daba ante tal acto tan morboso. Yoongi los sacó de la boca de Jimin viendo el hilo de saliva que se había formado y los llevó a la entrada de Jimin dónde metió los dos dedos sin una pizca de delicadeza, lo que provocó que el humano gritara de dolor ante tan violenta e inesperada intromisión en su interior.

Demon [Y.M][#1][✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora