Sana y Jihyo se encontraban en el ático de uno capilla que las hermanas religiosas habían dejado de utilizar, limpiaron un poco y quitaron la estatua religiosa que estaba ahí por la foto de Lisa.
Dejaron aquello así y bajaron del ático, cerrando la puerta de este para que no entrará alguien más esa tarde.
El rechino era fuerte así que era fácil descifrar cuando habían cerrado la puerta.En otro lugar se encontraban dos alumnas conversando alegremente en los baños del lugar, eran las últimas, siempre lo eran, les gustaba que el baño estuviera solo para poder hablar tranquilamente.
— ¿De verdad?
— ¡Si! Las audiciones del otro día me fueron muy bien
Ji-eun hablaba con Momo, ambas eran las únicas que se estaban cepillado los dientes, la única luz prendida era la del baño. Las dos jóvenes chicas hablaban sobre cómo Momo quería ser cantante, había participado en varias audiciones.
— ¿En verdad?
— Si, a pesar de que no pase la prueba de documentos ¡creo que estuve muy cerca! —Mencionó Momo con una gran sonrisa—
Ji-eun miró a Momo sin quitar el cepillo de cuentes de su boca, aún no terminaba de cepillarse
— Estaba a un paso de mi sueño de convertirme en idola
— ¡Bien por ti! — Ji Eun mostró una sonrisa— Por pensar positivamente
— ¿A qué te refieres con "positivamente"?
— Me refiero a que sigues intentando, nunca te rindes — Mencionó Ji-eun como un cumplido para luego terminar de cepillarse mientras la otra chica le agradeció por el comentario, Ji-eun se despidió de su amiga mientras que Momo seguía lavando se sus dientes—
Momo se miró al espejo para ver si estaba cepillado bien sus dientes, aunque la luz amarilla no ayudaba mucho; se enjuago la boca y escupió el agua en el lavamanos. Limpio todo para irse a su habitación y poder dormir.
Cuando empezó a caminar noto por el espejo que Lalisa estaba detrás de ella, aunque está tenía una mirada perdida y un rostro serio, la mirada penetrante estaba ahí sin embargo momo no lo noto
— ¿Lisa? ¡Por fin regresaste! — Exclamó emocionada viendo a Lalisa, una sonrisa se formó en su rostro, quería hacerle millones de preguntas—
Sin embargo Lalisa no dijo ninguna palabra, simplemente camino por el pasillo, Momo la siguió para ver hacia dónde se dirigia la chica.
Estaba junto a las escaleras, como si estuviera esperando a que Momo se acercara a ella, algo que sin duda hacía la chica, caminaba a paso lento hacia la chica que la traía enamorada.
Estaban a menos de un metro de distancia, pero estaban lejos aún— ¿Qué sucede? —Preguntó la japonesa un poco confundida, había algo extraño en Lalisa—
La pregunta fue ignorada y en cambio la mano de Lalisa fue levantada lo suficiente para poder tocar la mejilla de la japonesa quien cerró sus ojos para poder disfrutar del tacto de esta.
El cabello de Lalisa empezó a moverse, aunque no hubiera viento de noche.Momo abrió sus ojos, Lalisa estaba tan cerca de ella que hacía que su corazón de acelerara rápidamente, estaba tan cerca que podían besarse, sin embargo Lalisa se acercó a su oído.
— Liberame de esta maldición... —Susurro la chica de cabello Naranja, haciendo que Momo abriera sus ojos—
Pero estaba en un lugar diferente; estaba en el ático, frente a la foto de Lisa ¿cómo había llegado hasta ese lugar?
Era una de las preguntas de la japonesa, sin embargo noto que estaba tan cerca de la foto de Lisa que podría besarla, se alejo de la foto haciendo que cayera al suelo de rodillas.
Miró a su al rededor para saber dónde se encontraba, gracias a la poca luz de la luna pudo saber donde se encontraba, sin embargo la japonesa estaba confundida.
Miró nuevamente la foto de Lalisa, era como si la llamara, casi como un conjuro; sin embargo se alejo de ella y salió rápidamente del lugar, estaba asustada.
Camino rápidamente a su habitación y cerró la puerta con cuidado para no recibir un sermón de las monjas, se sentó en su cama, tenía una lámpara de noche que iluminaba la habitación.
La foto que había visto en el ático hace unos minutos, era la misma que había visto en la habitación de Rose, cuando entró en su habitación unos días después de que ella desapareciera, sin embargo no había tenido el valor de llevarse aquella foto.
La cuchara de Momo cayó sobre su bandeja causando ruido en la cafetería, llamando la atención de Jisoo que se había sentado junto a ella y Ji-eun.
Habían empezado a comer puesto que las otras chicas tardaban demasiado en llegar. Algo que tenían en claro Ji-eun y Jisoo, era que Momo estaba extraña, tenía grandes Ojeras como si no hubiera dormido toda la noche, se había quedado dormida en clase y su mirada estaba perdida.
— ¿Te sucede algo? —Preguntó Ji-eun un tono preocupado mientras Jisoo esperaba la respuesta de su amiga—
— Me siento... Algo extraña —Momo miro a sus dos amigas, iba a decir algo más así que ninguna de las otras dos chicas dijo nada—
— Veo... Alucinaciones de Lisa todo el tiempo — Ji-eun miro preocupada a Momo, tal vez había enloquecido lo que decía la japonesa no era nada bueno—
— Me siento rara... Tal vez me gustaba mucho Lisa...
— No es eso... —Interrumpio Jisoo, se había guardado aquello solo para ella, sin embargo tal vez debía decirlo—
— Yo también... También la veo —Momo miro a Jisoo, pensó que ella era la única que podía verla y eso la había puesto nerviosa, sin embargo ahora podía estar un poco tranquila—
Mientras que Ji-eun estaba preocupada por ambas ¿cómo podían ver a Lisa? Se preguntó la chica de cabello negro mirando a Momo y Jisoo
– Día tras día, también veo a Lisa... —La mirada de Jisoo era de preocupación, como si de alguna manera buscará descansar pero no podía hacerlo—
Sin embargo aquellas dos chicas no eran las únicas que tenían aquel problema, Jihyo y Sana también veían a aquella alucinación de Lisa.
Estaban cansadas de verla, aquel hecho las asustaba.
Jihyo y Sana, habían escuchado la pequeña conversación de Momo y Jisoo.— También... La vemos —Dijeron al unísono, haciendo que Momo y Jisoo las miraran—
Tenían que hablar seriamente sobre aquello, no podía suceder aquello sólo porque si.
Pero aún tenían clases, así que decidieron reunirse en la habitación de Jennie para hablar sobre aquel tema.Solo les quedaba esperar con un poco de paciencia a que las clases terminarán, soportar un poco más el sueño que tenían desde hace días.
Ninguna sabían el porque miraban una alucinación de Lisa, por una corazonada sabían que Jennie también la veía, puesto que, aunque estuviera faltando a clases por enfermedad las veces que la habían visto comiendo, estaba con la mirada perdida y con unas grandes ojeras lo cual era algo que todas poseían en aquel momento.
ESTÁS LEYENDO
Crossroads || ʲᵉⁿˡⁱˢᵃ
Kısa HikayeEn un internado exclusivamente de chicas ubicado en Busan, Corea del Sur; existe una leyenda, la cual trata sobre una maldición que solo afecta a las chicas. Las chicas empiezan a desaparecer misteriosamente, las chicas empiezan a temer por su vida...