Parte 2

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- Ya puedes soltarme - dijo Tae Ra halando de su muñeca en donde, por la fuerza que la sujetaban los dedos de Yoo Chang, cuando finalmente este consiguió llevarla de vuelta a los solitarios caminos a esa hora. Seguramente tendría hematomas al día siguiente en toda la muñeca y lo maldijo por ello, odiaba que se le marcara la piel con tanta facilidad. - Te dije que no quería nada de ti, así que todos aquellos regalos que llegaron hoy al escritorio, puedes pasar por ellos cuando quieras- como sabía de antemano cual era el propósito de Yoo Chang al llevarla a ese solitario no temió para nada echárselo en la cara inmediatamente pudo, además había podido ver encima del escritorio muchas cosas que ella detestaba lo cual probaba que ese imbécil tampoco la conocía en absoluto, así que no entendía cuál era el afán de salir con ella.

- Vamos, Tae Ra. Sabes que me interesas así que, ¿por qué te haces la difícil y no sales definitivamente conmigo? - la confianza en la voz del actor era tal que sin duda muchas otras habían caído en ese embrujo, pero ella era relativamente inmune, especialmente porque sabía quién era él como persona y todo lo que alguna vez escuchó de sus compañeras de actuación, respecto al infiel, perro y en ocasiones grosero que era Yoo Chang.

- Saldría contigo si me parecieras medianamente interesante pero no es así, ya te lo he dicho antes - comentó Tae Ra con el desdén plasmado en cada sílaba pronunciada, tono que hizo a estremecer a la persona que escuchaba aquel intercambio de manera impasible.

- ¿Sabes que si no accedes puedo dañar tu carrera en un chasquido de mis dedos? - los decibeles de persuasión habían disminuido a un tono áspero y amenazador, casi que con malicia. Tae Ra puso los ojos en blanco ya que esa no era la primera vez que recibía ese tipo de amenazas. No comprendía qué era lo que tenía que hacía que algunos hombres pensaran que podían emprender algún tipo de misión imposible intentando conquistarla.

- ¿En serio tienes que valerte de eso para conseguir una cita conmigo? ¿Por qué simplemente no puedes aceptar un NO por respuesta? - sacudió su largo cabello intentando que la mirada obsesiva del tipo no la asustara ni un poco. Debía actuar como si tuviera control de la situación, aunque en realidad no fuera así. Esto era algo que debió haber hecho antes, ponerlo en su lugar, solo que pensó que después de tanta negativa el imbécil se daría por vencido.

-Podemos salir para promocionar el drama - intentó una vez más sin éxito ya que ella expresó su mejor risa narcisista mientras Yoo Chang la miraba con mucho mas odio, ante cada negativa, dándose cuenta de que estaba echando sus esfuerzos en saco roto.

-Puede que necesites de algo como eso para aumentar tu popularidad, lo cual no es mi caso. Una vez más te aclaro que no quiero ni querré salir contigo nunca, así que, o te detienes o me veré en la penosa obligación de denunciarte por acoso - Iba a darse la vuelta para irse, pero nuevamente fue detenida por el brazo solo que esta vez no iba a tolerar ese contacto relativamente violento. Sin poder contenerse sacó desde lo profundo de su memoria los conocimientos básicos de Taekwondo que conservaba de su padre y madre y le golpeó las costillas al volverse velozmente haciendo que la soltara de inmediato. Éste retrocedió sujetándose el sitio donde ella lo golpeó tomando aire y maldiciendo a todas las mujeres como ella.

-Vas a arrepentirte de esto, zorra. No descansaré hasta que me las pagues - intentó ir por ella nuevamente que adquirió una posición defensiva esperando que en medio de sus movimientos no lastimara la cara del maldito para que al menos pudiera seguir grabando sin tener que tener una máscara de horrible maquillaje encima del hematoma que podía dejarle en la frente, pero Yoo Chang fue detenido por un brazo que lo hizo a un lado después de que un hombre emergiera de las sombras por donde habían entrado ellos y Yoo Chang, con esfuerzo y dolor, se ponía de rodillas al igual que Tae Ra, quien con la cabeza baja intentaba que su alocada cabeza no comenzara a hacer el tipo de preguntas que cualquier persona del reino independiente de Corea podía comenzar a hacerse en ese momento, especialmente aquellas que empezaban con "¿qué hace su majestad en un sitio como este?" o, "Diablos majestad, ¿no podía escoger un momento menos inoportuno para hacer su aparición?"

El Rey Tirano y la Actriz NarcisistaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora