-Valeria, Nick venga que vais a llegar tarde- escucho decir a mi madre desde el pasillo.
Me levanto de la cama, despacio. Me pesa el cuerpo y estoy muy cansada. No tengo ningunas ganas de ir al instituto. Primer día de clases, esas palabras suenan muy mal.
Cojo unos shorts vaqueros con una camiseta básica y unas vans. Me meto en el baño para darme una ducha y vestirme.
Bajo las escaleras y voy directa a la cocina. Allí se encuentra mi madre con mis hermanos.
-Hola pequeña- saludo a Julieta- hey- digo saludando a Nick. Mamá, ¿dónde esta papá?
-Trabajando.
-¿Tan pronto tiene trabajo? Que suerte. Nick, ¿nos vamos?
-Si, ya estoy listo.
Por suerte, cuando llegamos, mis padres le regalaron a mi hermano un coche BMW blanco muy bonito que sera nuestro transporte para el instituto. Nos montamos y arranca haciendo rugir el motor.
-¿Sabes dónde esta?- le pregunto.
-Si, papá me enseñó el camino.
-Genial.
***
-Nick porfavor no te separes de mi- digo pero cuando me giro, el ya no estaba a mi lado.
Genial ya estoy sola. Comienzo andar por el caminito de azulejos que llevan hasta la puerta principal. Miro hacia todos lados y hay muchos adolescentes saludandose, abrazandose y preguntandose cosas sobre como han pasado el verano.
Me quedo mirando a un punto fijo en el que se encuentran Lucí y Bea, ¡oh no están en mi instituto! Al principio pensé que eran buenas personas pero cuando me dijeron que no me acercara a Lucas, me entró un odio hacia ellas.
Llego a dirección y pido mi horario y la llave de mi taquilla. Me ha tocado la 109, ¿cuántas más habrán? Miro el horario y veo que a primera tengo matemáticas, me dirijo a mi taquilla y guardo los libros que no me harán falta hasta el almuerzo.
Entro en el aula y para mi desgracia ya hay gente. Encuentro un sitio vacío al final de la clase y decido que ese será mi mesa. Quedan aún tres minutos para que comience la clase por lo que me pongo a ojear el libro de matemáticas.
-Ejem- escucho decir a alguien. Levanto la vista y no es nada menos que Lucía.
-¿Necesitas algo?- le digo borde.
-Estás en mi sitio.
-Venga ya no me fastidies, es el primer día y los sitios aún no están asignados.
-Señorita Thompson, ¿se puede sentar?- dice el profesor refiriendose a Lucía. Ella da una patada al suelo y menea sus caderas hasta los sitios de alante.
Val: 1
Lucía: 0
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No todos somos perfectos
Novela JuvenilValeria una chica popular y capitana del equipo de animadoras se enfreta a distintas situaciones, una de ellas separarse de sus amigos y de su ciudad tras mudarse a España. ¿Cómo conseguirá adaptarse a su nuevo estilo de vida?