El asecino.

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El chico abria la puerta, esa casa donde antes habia estado, donde habia compartido bellos momentos con su famila, parecia que volvia el tiempo atras y que ahí encontraria a sus hermanos, una sonrisa se dibujo en el rostro del chico, hacia tiempo que no los miraba, pero habia una razón para ello.

Anterior mente habia peleado con sus hermanos y no pensaba en ser el quien hablara primero, el no tenia la culpa de nada y ellos debian reconocerlo.

Al día siguiente, T/n se fue corriendo a clases pues se le habia hecho tarde.

-Perdon profesor se me ah hecho tarde-Interrumpio la clase T/n.

-Toma asiento T/n siempre llegas tarde, ya no hay lugar... Espera sientate a un lado de el-señalo al chico nuevo, realmente no conocia su nombre pues no le puso atencion a su presentación.
-Pero...
-¡AHORA!-Griro el profesro molesto.

La chica se sento a su lado y lo miro, -de verdad que es apuesto-penso ella, las chicas murmuraban algo, ella supuso que era por que se sento a su lado, pero pronto escucho unos susurros.

-¡Escuche que el salio de la carcel, por matar a su propia madre!

Ella no creia esa historia -aún que a decir verdad, el es un poco raro-, la chia no podia evitar pensar en esa posibilidad.

-¿Cual es tu nombre?-Dijo ella alfin.
-Creo que en realidad eso no te importa, solo te da curiosidad saber si es verdad lo que ellos dicen.
-¿Y es verdad?
-La gente cree lo que quiere creer, pese a lo que diga. 
-¿Entonces que no es verdad?
-Lo que quiero decir es que piensa lo que quieras no me importa. 
-Creo que...
-¡T\N! ¿Ademas de llegar tarde estas hablando?, ¡porfavor callese!-Grito el profesor a la chica.

Los chicos salieron a comer, pero el pelirojo, esta vez se sento solo, los chicos con los que habia estado ayer, no quisieron pasar más tiempo con un "asesino", la gente hablaba sin saber si herian a alguien o no.

-Gaara, asi te llamas-Llego la t/n alegremente.
-¿Que quieres?.
-Bueno, creo que hemos comenzado mal, me presento me llamo, T/n estoy en esta universidad desde primer grado.
-No me importa.
-Si aigues con esa actitud jamas tendras amigos.
-Dejame solo, ¿no entiendes que no necesito amigos?
-Esta bien te dejo.

La chica no entendia por que trataba de ayudar al pelirojo a conseguir amigos, ella nunca haria algo asi, por lo general era un poco timida con personas nuevas.

Gaara y tu. Se Mía.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora