How to be a heartbreaker - Aidan Y Tú. (Editando)

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De lejos.

Narra __:

Me llamo __ Viller, y yo soy una rompecorazones, este es mi manual para saber manejar a los chicos a tu antojo, tengo basta experiencia en esto así que pueden confiar en mí... O no?

Antes de empezar hablemos un poco de mi. Tengo 17, estoy en pleno desarrollo de mi juventud, nunca me he sentido perteneciente a algo, más bien siento que las cosas me pertenecen, ya se, ya se, muy egocéntrica, pero esa es mi escencia. Tengo una doble nacionalidad, por parte mi madre soy mexicana y por parte de mi padre soy americana, deben imaginarse como ha sido mi vida, ni de aquí, ni de allá. Mis padres se divorciaron hace 3 años así que tengo 2 casas, los últimos años vivía en México con papá por qué como todo hombre ambicioso y emprendedor decidió establecer un negocio bastante comercial en un país consumista. Pero ahora me mudare con mamá y su novio Robert a Estados Unidos.

Tengo fama por ser una rompecorazones pero nadie sabe la razón detrás de mi drama adolescente. Como era de esperarse la gente crea rumores, pero jamás sabrán cuál de todo es cierto. Al ser una persona influyente los ojos siempre están sobre mi, y aún que a veces trato de mantenerme lo más neutral posible, me es imposible atraer la atención y centrarla en mi.

Suficiente de hablar sobre mi, es hora de iniciar nuestro viaje, y justamente lo iniciaremos con un viaje al extranjero dónde está historia echará sus raíces.

Iba camino al aeropuerto, mi mirada estaba fija en mi celular, miraba Instagram, miles de celebridades que esperaba conocer y tantas amistades que podría hacer, sin duda era emocionante, aún que extrañaría demasiado a papá, me era imposible no imaginarme como sería mi vida en Los Ángeles, una ciudad llena de fiesta, y tantas víctimas por alcanzar.

De pronto ya habíamos llegado, baje de la camioneta que me transportaba y me despedí de Luis, el chófer que siempre me llevaba a todos lados, lo quería mucho por qué trabaja para nosotros desde que tengo memoria y es muy buena persona.

— Niña, no olvidas nada?— dijo desde el asiento de conductor mientras yo esperaba que mis guardias sacarán mis maletas de la camioneta.

— No Lu, no olvidó nada, hice una lista en físico y en mi celular para no olvidarme nada, la revise como 10 veces y abrí las maletas unas 8 veces más para asegurarme que nada faltará.

— Me preocupa que algo te haga falta, se que extrañarás tu casa.

— No te preocupes Lu, se cuidarme sola, he viajado sola millones de veces.— intenté tranquilizarlo.

— Si, pero siempre vuelves, esta vez no se cuando te volveré a ver, o si te volveré a ver, te convertiste en una pieza muy importante en mi vida pequeña, tantos años dedicados a cuidarte y trasladarte de un lado a otro me hacen sentirme algo triste. — me respondió.

— Volveré pronto Lu, espero volver para acción de gracias y cenaremos en casa, tu también eres como de mi familia.

— Me alegra tanto oír eso...— le sonreí y el me devolvió la sonrisa.- Saluda a tu madre de mi parte.

— Lo haré.— afirmé segura.

— Los niños y Julieta te mandan saludos y te desean la mejor de las suertes.— Julieta y los niños, son su familia sanguínea, Julieta es la ama de llaves en casa de papá, esposa de Luis, y sus hijos, compañeros de infancia que crecieron a la par mía.

— Los extrañaré muchísimo. Tengo que irme.— le sonreí pero de forma nostálgica y el asintió.

Me puse una gorra y gafas negras mis guardaespaldas llevaban mis maletas, di unos cuantos pasos y de nuevo escuché su voz.