4| MY ONLY STILES ||teen wolf. [ᴍᴏᴅ]

3. bardo

🌙

A LA MAÑANA SIGUIENTE SAMANTHA SE encontraba ingresando a la secundaria con la mochila con la anterior brazos y una preocupación en los hombros. Tenía la esperanza de ver a Stiles en el salón. Normalmente habría llegado con él pero Lydia le pidió que se quedara a dormir para controlar a Allison. La rubia accedió ya que sintió el impulso de decir sí. Y tuvo razón: la pelinegra se levantó asustada a las 2 de la mañana con una daga en la mano. Casi apuñaló a Lydia.

Samantha se levantó segundos antes de que su amiga lo hiciera y ahora tenían un pequeño secreto entre ellas.

Pero, en definitiva si la pelinegra había actuado de esa forma no quería imaginarse de cómo estaría pasando su mejor amigo.

Yendo demasiado sus pensamientos, no reaccionó cuando un cuerpo apareció de la nada y chocó con ella. Sus libros de economía cayeron rápidamente, y en segundos conectó su mirada con la de la chica nueva, Kira.

─Hey... ─dijo Samantha algo feliz por haberse encontrado con ella, la clase anterior en historia había querido presentarse pero la pelinegra desapareció. Aunque se puso en su lugar al 100% y entendía que lo hizo para evitar la vergüenza de haber sido expuesta por su propio padre, un profesor.

─Oh por Dios, cómo lo siento ─exclamó esta agachándose rápidamente y juntando los libros que se le habían caído a la rubia─. No me sorprende, siempre me pasa esto, soy muy distraída, ¿sabes? Y también hablo de más, por lo que soy muy nerviosa y también ansiosa. Repetí la palabra también, ¿verdad? ¿Serán nerviosismo y ansiedad las mismas cosas? ─se detuvo a preguntarse en enfrente de Samantha aún sin entregarle los libros. La rubia no pudo responder porque en seguida la joven de rasgos asiáticos volvió a hablar─: No tienes que contestar es una pregunta tonta y deberías ir a tu clase...

─Okey, okey... ─Samantha levantó las manos para que se callara─. Primero, tomaré eso ─señaló los libros, acercándolos a su pecho y luego ofreció una de sus palmas para que Kira la estrechara─. Mi nombre es Samantha. Sé que tú eres...

─Kira ─completó la pelinegra alegrándose de que alguien supiera su existencia. La rubia sonrió y rió un poco.

─Exacto. Me habría gustado presentarme ayer pero saliste despavorida.

La joven asiática se sonrojó.

─Mi papá tiende a dejarme en ridículo. Ni siquiera me deja intentar hacer amigos por mi cuenta. Me gustaría ser alguien como tú. He visto que saludas a todo el mundo. Pareces muy sociable.

─Sí, bueno... conozco a la mayoría de los estudiantes... pero es básicamente porque soy muy metiche y me aburro cuando no están mis amigos, así que hablo con desconocidos ─Samantha se encogió de hombros como si no fuera la gran cosa, pero Kira la miraba admirando la personalidad tan abierta que tenía la rubia siendo ella tan tímida─. Pero deberíamos sentarnos juntas en alguna clase o en el almuerzo.