MOS| Samantha sentía un vacío que no podía ser reemplazado. Perdió su luz... su camino y lo peor... estaba a punto de perder la esperanza.
Sin embargo, nunca tuvo en cuenta que sería el comienzo de una línea desafortunada de eventos...
incluyendo a...
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LOS SEGUNDOS PARECÍAN PASAR MUCHO más lento de lo que deberían. Samantha no creía que en verdad el padre de Scott creyera todo la explicación que se habían organizado para ocultar los sucesos sobrenaturales de Kira, Barrow, etc. Ella mentiría bien en su parte. Siempre sabía mentir, aunque no fuera una excelente virtud. Pero sólo rezaba para que Rafael se tragara el verso.
Y que Kira no los delatara.
Rafael McCall escuchó las historias que habían pensado, sin engañar demasiado. Pero con su expresión Samantha confirmó lo que quería evitar: No lo creía ni un poquito. Por eso el agente comenzó a hacer preguntas al hijo del sheriff, quien había narrado la versión.
─¿A qué hora llegaste?
─Al mismo tiempo ─respondió Stiles de mal humor.
─¿Al mismo tiempo que quién?
─Al mismo tiempo que yo ─dijo Scott a la vez que Stiles y Samantha lo señalaban.
─¿Por coincidencia?
─¿A qué te refieres por coincidencia? ─intrigó nuevamente el pelinegro de lunares.
─Es lo que estoy preguntando a ustedes. Llegaron al mismo tiempo. ¿Fue por coincidencia?
Samantha frunció el ceño, ¿qué clase de pregunta era esa? Acababan de explicarlo.
─¿Me preguntas a mí? ─aludió Scott, como siempre, sin terminar de entender.
─Creo que me pregunta a mí ─Stiles sólo se divertía haciéndole la cabeza al agente del FBI.
─Probablemente les pregunte a los dos ─terció Samantha con los brazos cruzados mientras el padre de Scott pasaba la mirada de un lado a otro como partido de ping pong. Suspiró exagerado e interrumpió a los adolescentes.
─Bueno, déjenme a mí contestar las preguntas.
El silencio invadió la sala. Todos dirigiendo las miradas hacia el agente que se rascó la nuca al no saber qué decir.
─Déjenme a mí hacer las preguntas ─corrigió sacando una libreta. Samantha asintió con obviedad sintiendo las repentinas ganas de reír mientras Stiles le hacía un gesto que decía: «Así está mejor»─. Quiero tener esto totalmente claro: Barrow se ocultó en el closet de química en la escuela. Alguien le dejó un mensaje codificado en la pizarra diciéndole que matara a Kira. Luego Barrow llevó a Kira a la subestación eléctrica y la ató con la intención de electrocutarla, lo que dejó toda la ciudad sin luz.
─Así es.
─¿Cómo supieron que iría a la central eléctrica? ─Stiles y Samantha intercambiaron miradas de complicidad y superioridad ante los ojos intensos del agente del FBI.