Hasta donde tú estés

16.- No te metas en mi vida

—¡Siguiente! — dijo la cajera

Emilia se encontraba en el banco para sacar el dinero para la mitad de su traje, paso y sacó su tarjeta.

— Hola, quiero depositar este dinero y hacer un giro bancario de $700 dlls por favor — dijo Emilia

— si....lo siento pero su tarjeta no tiene el dinero suficiente para hacer el giro — dijo la cajera

— No puede ser, tengo $1586.19 ahorrados allí, hago un seguimiento de todo ¿Puede revisar de nuevo? — dijo Emilia

— Lo entiendo señorita pero aquí dice que no tiene dinero, de hecho, la copropietaria de la tarjeta retiro el efectivo hoy en la mañana, Alicia Becker— dijo la cajera

(...)

— Te robaste todo mi dinero — dijo Emilia a Alicia

— Hay por favor, esa cuenta era de ambas y no vengas a decirme nada por qué tú me debes más. Te mantuve 18 años — dijo Alicia

— Era mi dinero, estuve ahorrando durante mucho tiempo pero ya cerré la cuenta ¡No te metas en mi vida nunca más!— dijo Emilia y salió enojada del lugar

Martina salió de los vestidores y se le quedó mirando feo a Alicia —¿Es cierto?— dijo Martina

— Claro que no, Emilia está enojada por qué no será la única que tenga un vestuario bonito para competir, tu estás de mi lado ¿Cierto Cariño? — dijo Alicia sonriendo

Martina sonrió enojada — Se que es difícil controlar a veces a Emilia por qué eres bipolar — dijo Martina

Alicia paso saliva y miro a Martina

— Hola Mich — dijo Martina saludando a su entrenador

Alicia volteo y se encontró con Mich confundido y desconcentrado, miro a Martina furiosa —¿Por qué hiciste esto? — dijo

— Estoy harta de tus abusos en contra de Emilia — dijo Martina enojada

Alicia tomo sus cosas y salió del lugar furiosa.

(...)

— Hola ¿Podrías entregar está caja a Mandy cuando llegue por favor?— dijo Claudio colocando la caja enfrente del escritorio de Antonia

— Si señor Daves — dijo Antonia con una sonrisa

Mandy y Maximiliano entraron riendo al hostal, Claudio los miro y se enojó aún más pero aligeró su enojo.

— Ya llegó — dijo Antonia

— Genial, los encontraste. Muchas gracias Claudio. Antonia ¿Podrías ayudarme a repartir los folletos por todos lados por favor? — dijo Mandy

— Si señora

— Cariño, no se te olvide que cenaras solo está noche — dijo Mandy, le dió un beso a Max y se metió a su oficina

— Ya escuchaste a la señora ¿Qué tal si vamos a la ciudad y compramos un par de filetes?— dijo Max

—¿No pudiste decírmelo frente a frente? Me tuve que enterar gracias a mis hermanitos que Mandy y tú tendrán un hijo  — dijo Claudio enojado

— Claudio yo...

— Ya se que te importa una mierda lo que yo piense. Lo que me irrita realmente es que soy el único que parece recordar a mamá — dijo Claudio enojado

— No tiene nada que ver con tu madre — dijo Max molesto

— Si, ya me voy — dijo Claudio y dió la vuelta para irse