Y se volvía a repetir la historia, Masha y Emilia estaban en la pista simplemente observando como Machu y Gael entrenaban.
—¿Y Claudio? — dijo Machu con una sonrisa mientras se alejaba
— Prometió que estaría aquí — dijo Emilia decepcionada
Masha la miro y suspiro triste, si le dolía que Emilia tratara de dar lo mejor de sí misma y ella no poder hacer nada para ayudarla.
Emilia salió de la pista, tomo las placas de los patines y se los puso, salió casi enojada y Masha solo la miro confundida.
—¿A dónde vas? — dijo Masha sin recibir respuesta
[...]
Emilia entro al hostal demasiado enojada, aún con su traje de entrenamiento tomo el ascensor y subió hasta el piso de Claudio.
Llegó al piso, se abrieron las puertas, Emilia salió y comenzó a caminar hasta la habitación de Claudio, se paró enfrente de la puerta y comenzó a golpearla con fuerza hasta se abrieron.
— Vaya, me encontraste. Me mudé por qué una canadiense me secuestro — dijo Claudio con la camisa sobrepuesta y desabrochada
Emilia lo miro enojada mientras él sonreía y se abrochaba la camisa, la chica salió y después se metió al ver que no era la de servicio.
—¿Qué carajos Claudio? Creí que tú estábamos bien, creí que nos entendíamos — dijo Emilia enojada
— Sí también yo...
— Entonces ¿Qué te sucede? Prometiste estar allí en los entrenamientos TEMPRANO — dijo Emilia con su voz entrecortada
— Sí, tú prometiste que vendrías a noche y no estuviste así que ambos estamos llenos de mierda — dijo Claudio enojado
—¿Perdona? Así que todo esto es por qué no vine a tu estúpida fiesta. Tuve un problema pero...claro, tu no entiendes nada de familia, ni de problema por qué tienes toda tu vida resuelta más yo no, tengo que luchar todos los días por sacar adelante a mi hermana y cuidarla ¿Tú? Los abandonaste cuando más te necesitaban. Todo el tiempo me he atormentando con que esto es mi culpa, las alzadas, tu comportamiento que apesta por cierto; se que tengo mucho que aprender pero no puedo hacer esto yo sola por mi misma — grito Emilia enojada
Claudio bajo la cabeza y después miro los ojos de Emilia llenos de lágrimas por derramar aunque ella se hacía fuerte, él quería abrazarla pero su orgullo no lo dejaba.
— No se cual sea tu problema pero me importa una mierda, yo quiero ganar ¿Quieres patinar? Sabes dónde estaré y creo que es momento de reflexionar sobre tus acciones antes de que te quedes solo — dijo Emilia y se fue dejando a Claudio reflexionando.
Recuerdos se le vinieron a la cabeza a Claudio, cuando Masha estaba hablando con los oficiales, él se acercó a ella.
— ¿Qué pasa? — dijo Claudio
— Tu mamá.....Caroline está en el hospital — dijo Masha
Claudio comenzó a llorar y corrió a abrazar a Masha, ella siempre estuvo para él.
Llegó a la pista de patinaje ante la atenta mirada de Masha, se acercó a ella con la cabeza baja mientras miraban a Emilia patinar.
— Es más difícil cuando te importa y a tí no te a importado nada en años — dijo Masha
Emilia miro a Claudio y él la miro a los ojos — No se de qué hablas.....
Claudio se metió al hielo y patino hasta donde estaba Emilia, se puso enfrente de ella y bajo un poco la cabeza.
— Lo siento — dijo arrepentido
— Okey....
— Sabes que nunca te dejaría caer Emilia — dijo Claudio con una pequeña sonrisa
Se tomaron de la mano y poco a poco comenzaron a patinar, Masha les daba las instrucciones y como seguir los pasos.
Se llego el momento de la alzada al aire; Emilia miro a Claudio y él sonrió, eso la lleno de confianza y dejo que la alzara.
Y así, después de tantas semanas de entrenamiento, por fin Emilia y Claudio lo habían logrado, habían logrado una alzada perfecta y Emilia se sentía confiada.
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