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Capitulo: Día miércoles.

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—Hola, primita. —Dijo Yeji sentándose frente mío, y de Haechan.

— No me llames así, ¿Qué mierda quieres? —Pregunté.

— Viste que terminé robandote a tu Jenito?

— Vete, Yeji. —Dijo Haechan en un tono enojado.

— Tú no te metas, estoy hablando con Sun.

— Conseguiste al estúpido que querías, ahora déjate de estupideces, y vete ¿sí?

— No lo haré. —Respondió ésta.— Sun, querida, no sabes lo BIEN que lo hace Jeno. ¡joder! ¡Es tan bueno en la cama!
Y sus besos? ¡Ay, son increíbles!

— ¿Sólo venías a contarme ésta mierda? Yeji, lo que hicieron no me interesa ¿Si?

— Es que, amo verte así, te ves tan débil y triste...

— Yeji... —Se escuchó una voz masculina, Jeno.

— Jeno, hermoso, hola! —Dijo Yeji y se levantó de la silla para pararse frente a él, ella se acercó a sus labios, y plantó un beso en éstos, yo bajé la mirada a mi comida.

— No me beses, Yeji. —Dijo Jeno.

— Ay, solo trataba de demostrarle a Sun, que eres mío.

— Tuyo? Ni en sueños! Sun, podemos hablar? —Preguntó Jeno.

No respondí.

— Me voy, nos vemos después, Haechan. —Dije levantándome de la silla dispuesta a irme.

— Yo te acompaño. —Dijo Haechan, y dejamos a Jeno, y a Yeji solos.

Fuimos hacía los casilleros, mientras más nos acercábamos las personas más nos veían.

— Qué mierda miran? —Preguntó en un caso "susurro", Haechan.

— No lo sé. —Dije, y nos acercamos a nuestros casilleros para abrirlos.—

— Estás bien por lo de hace un rato? —Preguntó Haechan, y abrí mi casillero, al hacerlo "millones" de papeles, y basura, cayeron de éste.

Me tiré al piso a ver los papeles, que por cierto tenían cosas escritas, como;

"Era hora de que Jeno te deje, eres horrible."

"¿Cómo te sientes?, ¿cómo se siente que tú novio se haya acostado con tu prima a tus espaldas?"

"Eres horrrible."

"Hazte una operación para sacar un poco de fealdad de tu cara (Seguro no te funciona)."

" Jeno es muy hermoso para fijarse en alguien como tú, ¿Por qué eres tan ilusa? "

" Yeji, es PERFECTA, ¿y tú? ¡Tú eres HORRIBLE! SUN, ILUSA."

Eso entre más cosas.

— ¿¡Quién mierda hizo ésto!? —Preguntó Haechan alzando su voz.

Todos en el pasillo estaban grabando, son una mierda.

—¿Qué sucedió aquí? —Preguntó Jeno viendo hacia nosotros junto con Yeji.

—¿Cómo se enteró la escuela de la mierda que le hiciste a Sun? Esa es la verdadera pregunta. —Preguntó enojado, Haechan, mientras miraba a Yeji.

—Relaja tu tono conmigo. —Dijo Jeno en un tono enojado.

—Debería hacerlo después de lo que le hiciste a Sun!? Agradece que no te golpee, porque no sabes las ganas que tengo de hacerlo.

—Entonces hazlo, golpéame, vamos. —Dijo Jeno, acercándose a Haechan de una forma desafiante.

—No lo haré.

—Hazlo, o eres muy cobarde? —Preguntó Jeno, y le empujó el brazo.

Todos en el pasillo veían como si de un show se tratase, ¿no tienen algo mejor que hacer?

—No, sabes por que no lo haré? Porque no pienso rebajarme a tú nivel de estupidez, no pienso golpearte en frente de todos, y mucho menos de Sun, deberías pensar en eso también. —Dijo Haechan, y tomó mi mano, Jeno bajó su mirada a nuestras manos unidas.

—Suelta su mano. —Dijo Jeno con voz rabiosa.

— Por qué debería hacerlo?

— Ella es mía, no puedes tocarla. —Respondió Jeno, y yo reí.

—Yo no soy tuya, Jeno, y nunca lo fui, nunca fui ni tuya, ni de nadie. ¿Ahora dime quien de los dos se encargó de que toda la estúpida escuela se entere de qué estuviste con Yeji a la misma vez que estuviste conmigo?

— Fui yo. —Respondió, Yeji.

— ¿Por qué mierda lo hiciste, Yeji? —Preguntó Jeno enojado.

— Porque sí, todos se tenían que enterar que lo estuvimos haciendo durante dos meses, que estuve con Jeno, el chico más lindo de la escuela, o bueno, que los dos más hermosos de la escuela se acostaron, y que todo ocurrió mientras estabas con la fea de mi lamentablemente, prima, Sun.

— Eres una mierda ambos lo son. —Dije a punto de llorar.

¿Por qué me derrumbo en los momentos en los que quiero parecer o mostrarme fuerte?

Solté mi mano de la de Haechan, y fui hacia la terraza de la escuela.

Apoye mis brazos en las barandillas, deje caer todo mi peso, y comencé a llorar desconsoladamente. De repente, sentí unos brazos posarse en cintura, bajé lentamente la mirada, y vi unos lindos brazos, con un tono canela hermoso, Haechan.

— Hermosa... —Dijo Haechan.

— Haechan... —Dije y volteé, quedando frente a frente con él, quien aún tenía sus manos en mi cintura. — Te quiero...

— Sun, también te quiero. —Dijo y me abrazo fuertemente. 

To me, You Are Perfect.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora