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En la recepción del hotel podrías observar muchas cosas, diferentes personas pasar y algunas cosas extras que eran divertidas. Pero en ese momento, estaba pasando algo que no debería estar pasando, Katherine observo a Iris entrar, aquella mujer que no había visto hacia algunos días.

Katherine se acercó a la mujer de cabellos cenizos al verla algo inestable, la tomó de un brazo y la ayudo a caminar hacia uno de los sofás de la recepción, la ayudo a tomar asiento para sentarse junto a ella con Liz Taylor de pie frente a ellos.

───Iris, ¿dónde demonios estabas? ─── preguntó Katherine

───Te ves horrible

───Liz, por favor no digas esas cosas─── respondió la rubia───. ¿Hay algo mal?

───Lo que está mal es que me preguntes que está mal─── hablo Iris───. Solo quiero dormir, ¿es un problema?

───No, cariño─── respondió Katherine sonriendo levemente───. ¿Quieres que te acompañe a tu habitación?

───No es un problema

───Parece que mami necesita un poco más que eso... ─── Katherine observo a su mejor amiga para asentir un poco───. Para ayudarla a dormir

Juntas, caminaron hacia el bar. Katherine ayudo a la mujer de cabellos cenizos a subir las escaleras y también la ayudo a sentarse también. Junto a Liz Taylor, camino hacia detrás de la barra para comenzar a hacer una bebida junto a su amiga, quien sirvió el líquido fue Liz Taylor para así, dárselo a Iris.

─── ¿Qué es esto?

───La bebida especial de Liz─── respondió Katherine───. Tú solo bébela, amor─── Iris tomo la copa examinándola ───. Bebe, no es veneno─── Iris tomó un sorbo

─── ¿Esta bueno?

───Bueno

───Debe estarlo─── respondió Liz Taylor───. Es la receta secreta... De la Condesa

─── ¿Estoy bebiendo sangre? ─── Katherine asintió un poco

───Con una gota de triple seco ─── respondió Katherine asintiendo un poco

───Ya sabes cómo funciona esto, cariño

───Este pequeño coctel te durará por un par de horas, pero vas a necesitar más─── susurro Katherine

───Te faltara alimentarte de sangre fresca... ─── continuó Liz Taylor───. Sangre caliente y viva

───Dios

───Pronto... ─── siguió Liz Taylor───. Durante 20 años

───He mirado los ojos de esos niños y he visto el dolor y el miedo en sus ojos. ¿Cómo voy a...? ─── Katherine alzo la ceja───. Ni siquiera puedo decir las palabras, ¿puedo tomar más?

───Claro, cariño─── Katherine vertió la bebida en la copa

───Mírate, en el momento de tu resplandeciente renacimiento... ─── hablo Liz Taylor───. Que emocionante

─── ¿Emocionante? Dame un respiro, este mundo no tiene nada para las mujeres como yo, cuando llegas a mi edad los hombres te miran como si no fueras nada. A no ser que quieran algo, no solo ellos, todo el mundo, eres invisible, a no ser que puedas darles una llave, una maldita almohada más. Pregúntale a cualquiera de los huéspedes de arriba quien los registro, y te garantizo que no recordaran ni el más mínimo detalle. Es irónico, ¿verdad? Estoy condenada a la eternidad en este cuerpo... Con esta vida, esta oscura e insignificante alma

American Horror StoryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora