Cuarenta

2.1K 250 65
                                    

El cansacio era innegable, había sido un mes agotador, se había sumido en el trabajo para reducir su estado deplorable, el estar sometido a un exceso tan grande de estrés le ayudaba a olvidarse de algunas cosas que no deseaba tener presentes, él había optado por esa solución, yendo desde horas muy tempranas a la compañía y regresando pasada la media noche.

Encendió la luz de entrada y lentamente se despojó de su abrigo colgándolo en el perchero que muy convenientemente Jimin había colocado en la entrada, llevó sus manos a la lisa madera tocando suevemente imaginando en que estaría pensando su ex esposo al momento de comprarlo, quizá pensó que sería beneficioso para su persona, ya que llegaba muy tarde por la noche y era bueno despojarse de esa prenda al entrar y el solo hecho de pensar eso hizo que una sonrisa triste se dibujara en sus labios, porque sí, así era Jimin... así era Jimin cuando aún estaban juntos, siempre pensando en las necesidades y comodidades ajenas antes que en las propias.

Suspiró profundamente y negó tratando de reducir la horrible sensación que le inundaba al llegar a casa, por que hacía un maldito mes en el que por más que se llenara de trabajo, por más que pasara la mayor parte del tiempo fuera de casa, por más que lo intentara, ese vacío persistía y no podía reducirlo y lo odiaba, Yoongi lo odiaba con toda el alma, odiaba la necesidad de sentirlo cerca, odiaba el añorar sentir su calor por las noches, odiaba el intentar en vano encontrar su olor cerca, ese que tenía grabado en su memoria como si no pudiera desprenderse de él... Odiaba el desear llegar a casa y ser recibido con un plato caliente sobre la mesa y una sonrisa nerviosa de bienvenida, extrañada esos postres recien horneados desprendiendo el delicioso aroma que inundaba sus fosas nasales de manera maravillosa, porque sí, lo extrañaba, añoraba su sonrisa apacible a modo de bienvenida, sus ojos castaños viéndole con cariño desde la cocina, su olor a vainilla, su suave voz, lo extrañaba a él.

Arrastró sus pies ignorando la terrible molestia que se había instalado nuevamente, ya debería estar acostumbrado, pero no era así, llevó sus manos a su cuello y masajeó suave tratando de reducir el dolor en la zona, fue a la cocina y tomó un poco de agua, no había comido bien últimamente y eso debido a que era muy olvidadizo, llevó la bolsa con pequeños toppers al comedor y se dispuso a comer lo que NamJoon le había llevado "Debes alimentarte mejor Hyung, comer tanta comida chatarra o saltarte comidas te hará mal" había dicho para luego dejar dicha bolsa sobre su escritorio, tomó asiento y comió un poco, dejó los trastes en el lavado, para después ir a su habitación, necesitaba dormir, su cuerpo se lo pedía a gritos.

Al estar limpio y vestido con su pijama miró a su alrededor, Dios él en serio debía limpiar, la casa era un completo desastre ¿Que pensaría Jimin si viera eso? Sin duda se volvería loco porque él era un amante del orden ¿Desde cuando no limpiaba? Hacía mucho, desde que Jimin se fue... - Desde que Jimin se fue- repitió su mente quiriendo torturarlo un poco más, se metió entre las sábanas y se dio la vuelta, justo frente al lugar que le pertenecía a Jimin ¿Que estaría haciendo ahora mismo? ¿Estaría bien? ¿Sufriría su falta al igual que él o ya lo habría olvidado? ¿Lo perdonaría algún día? Y nuevamente su mente repetía con insistencia las mismas preguntas que se hizo durante todo ese mes, resopló con molestia y resignación porque una noche más no podría dormir.

[...]

Los meses habían pasado de manera lenta y tortuosa el trabajo se había reducido un poco con la ayuda de sus hermanos, pero la incomodidad en su ser no se iba, le extrañaba y eso lo jodía al punto de casi volverlo loco porque lo único que quería era averiguar donde estaba e ir a buscarlo. Sus días eran largos y sus noches también, no había hablado con nadie de lo que pasaba por su cabeza porque no lo necesitaba, él no entendía como es que comentarle a sus hermanos o a alguien más su situación reduciría su malestar... Y es que en el fondo sabía que merecía eso y mucho más, porque había sido un cretino y sufrir la pérdida de la persona que se había robado su corazón era lo menos que se merecía, el karma le había golpeado directo a la cara y él no haría nada para detenerlo.

Encendió la chimenea afuera el clima era frío, tomó asiento en uno de los sillones de la sala y llevó la taza de chocolate caliente a sus labios y no pudo evitar recordar las veces en las que Jimin le ofrecía éste en compañía de alguno de sus postres y Dios, él odiaba el chocolate, pero había aprendido a tolerarlo y ahora hasta lo disfrutaba, Yoongi rió con amargura porque cada maldita cosa que hacía le terminaba recordando a él, a ese pequeño de ojos castaños y tristes... Jimin le miró siempre con tristeza, tristeza que era provocada por él, por sus malas decisiones y por su egoísmo, una mueca se dibujó en su rostro, Jimin nunca fue feliz a su lado, él lo sabía mejor que nadie, pero no le importó porque pensó que nadie merecía su tiempo y esfuerzo, porque él no necesitaba de nadie y mucho menos de ese niño tonto que lo esperaba todas las noches despierto con una sonrisa llena de ilusión, misma que desaparecía cuando él le miraba de mala gana, pero aún así Jimin dijo que no lo odiaba y Yoongi no lo entendía, no comprendía como era posible que no lo hiciera cuando él mismo se odiaba por haber sido un idiota.

Sí, Yoongi se odiaba, odiaba en lo que se había convertido, odiaba sentirse vulnerable, odiaba ser débil, odiaba haberse enamorado, pero odiaba más el hecho de haber destruído los sentimientos de alguien que lo había amado sin importarle la horrible persona que era, lo había amado con todo y sus defectos. Una risa amarga salió de sus labios porque por primera vez había amado a alguien más que a sí mismo, pero había sido demasiado idota como para darse cuenta o aceptarlo.

Habían pasado seis meses y lo extrañaba como el primer día, pero si de algo estaba seguro era de que él estaría mejor lejos suyo, porque él era un desastre, porque él era malo, porque él era egoísta.

Jimin estaría mejor lejos, pero eso lo estaba matando ¿Como estaría ahora mismo? ¿Lo habría olvidado ya? Esperaba que sí, él por su parte seguiría adelante como siempre lo hizo, nunca se había dejado dominar por sus emociones y aunque le costara lo lograría esta vez también.

¿Algún día podría perdonarlo? Y nuevamente esa maldita pregunta se repetía torturándolo, realmente no lo sabía... pero solo quizá él no merecía ese perdón porque si él fuera Jimin no se perdonaría, porque él era malo, porque él solo no había querido intentarlo.

Tarareó suavemente esa triste melodia, esa que Jimin escuchaba por las mañanas a un volumen bajo para no despertarlo ¿Porqué dudó tanto? ¿Porqué permitió que todo acabara? Jaló sus cabellos con frustración ¿Como fue tan ciego?
Y Yoongi lo sentía tanto, estaba tan arrepentido de no haberlo intentado, se arrepentía de haber ignorado su llanto por las noches o de pasar por alto sus ojos tristes que lo miraban con tanto amor, amor que nunca mereció, esos ojos castaños nunca debieron haberse posado en él, porque una persona como él no lo merecía, porque había roto su corazón en más de una oportunidad y no se detuvo a ver el daño que había ocasionado.

La nieve siguió cayendo suavemente en las afueras y la llama de la chimenea se fue apagando poco a poco dejando con su huida una atmosfera tan fría como su corazón y él solo miró las llamas extinguirse lentamente con su mirada impávida y cansada.

-Alguien te amará- Le susurró a la nada.

-Alguien te amará y lamento no haber sido yo.

🖤

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

🖤

Broken

Había publicado por error este capítulo incompleto así que tuve que anularlo para poderlo acabar.

¿Recuerdan que había dicho que solo faltaban dos capítulos? Bueno no pude resumirlo todo, así que tendré que subir uno o dos más.

Gracias por los 7k esta historia es muy especial para mí y agradezco mucho su apoyo.

Broken || YoonMin/AgustMin +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora