1. Placer En Las Venas - Singtokrist -Terminada

Capítulo veintiseis

Cuando el informático llegó a su edificio, se encontró a Singto sentado en la puerta de su piso.

-Hey hola, ¿llevas mucho tiempo aquí?, iba ha llamarte para qu.....

-¿Podemos hablar?-preguntó este bastante cortante -... quiero que me digas algo, no te robaré mucho tiempo.

-¿Qué pasa?, ¿Estás bien?, la verdad es que me estás asustando- habló Krist mirándolo mientras metía la llave en su cerradura.

-Quiero lo digas y quiero la verdad ¿de acuerdo, Krist?-habló este tras entrar en el piso.

-Si claro, ¿De que se trata?-preguntó el informático sin sospechar las dudas de éste.

El moreno respiró profundamente.

-¿Has tenido algo que ver con el cambio repentino de Tay sobre el divorcio?.

Krist sintió morirse pues confiaba con que el profesor no se iría de la lengua, muy nervioso caminó hasta el sofá y allí se desplomó boca abajo llorando y entonces sintió cayó en la cuenta de que la respuesta era afirmativa.

Rápidamente lo cogió del brazo para que este le diese la cara.

-¿Qué has hecho?, ¿Qué mierda es lo que hiciste?- preguntó furioso.

El informático secó sus lágrimas con la manga de su jersey, entonces lo miró asustado.

-T-Tuve sexo con él pe-pero fue por ti... Que-Quería ayudarte- intentó explicarse.

Singto lo miró incrédulo.

-¿En serio fue por mi o te ponía cachondo follarte a mi ex?... ¿Te excitó saber que se encaprichó de tu precioso culo, Krist?

-¡Oye!, ¡no me hables así!-gritó entonces muy dolido el informático-...¡Yo no quería que te enteraras y él prometió que no te diría nada!.

-¡Él no me lo dijo!-gritó también singto-... alguien me dijo algo y he ido atando cabos yo solo pero no esperaba que fuese verdad.

-Escúchame, por favor...te iban a meter en la cárcel y él no te daba el divorcio... estabas muy mal y yo prometí ayudarte-dijo Krist intentando hacerle entender.

El ex acompañante se apartó.

-¿Sabes que es lo gracioso de todo esto?-dijo mirándolo con notoria decepción-... le golpeé por faltarte al respeto y entonces me doy la vuelta y vas tú y ...

-Pe-Pero Singto, entiende, no había otra opción... Lo hice para ayudarte.

Singto lo miró nuevamente pero esa vez éste tenía la mirada fría y de auténtica desilusión, por lo que el informático sintió que todo lo que tenían estaba por terminar.

-Tú eras como un ser divino, que había llegado a mi vida para guiarme y sacarme de una vida de degradación pero... te has comportado como una maldita puta y me daba igual por lo que había sido, nunca me lo hubiese esperado de ti-habló este destrozado.

-Singto, lo hice sin pensar, solo quería ayudarte, perdoname-Dijo Krist entre lágrimas.

-Yo no tengo que perdonarte nada, en realidad no somos nada.... Tan solo lo pasamos bien juntos y yo no te cobraba, eso es todo.

El ex acompañante estaba hablando desde el dolor pues nada de eso era cierto pues Krist lo era todo para él.

-¿Q-Qué quieres d-decir con eso?- preguntó el informático temiéndose lo peor.

-Pues eso Krist, que ya no es lo mismo, que esto lo ha cambiado.

Este frunció el ceño molesto.

-¿Qué es lo que ha cambiado según tú?.

Singto lo miró fijamente.

-Pues que no eres lo que yo creía y por eso será mejor que cada uno vaya por su lado.

Krist resopló, no podía creer lo que estaba escuchando.

-¿Así que me crucificas por ayudarte de la única manera que encontré?... te diré una cosa, maldito desagradecido... tú menos que nadie deberías juzgarme...¡joder!, ¡ese hijo de puta jamás iba a ceder!.

Singto estaba demasiado dolido para atender a razones, además los celos y la frustración nublaban su mente.

-¡Si te juzgo, maldita sea!... ¡Lo hago porque yo al menos me acostaba con ellos por un montón de razones!-gritó nuevamente-... ¡Una por miedo, otra por dinero, otra por necesidad, pero no lo disfruté jamás!.

Krist rió incrédulo.

-Ok... ¿Es qué acaso tú crees que yo lo disfruté?, ¡Maldito estúpido!.... ¡acostarme con el asqueroso de tu ex, ha sido lo peor que he hecho en toda mi jodida​ vida!.

El ex gigolo negó y acto seguido caminó hasta la puerta.

-¿Por qué debería de creerte?, ¿por qué no lo ibas a disfrutar? -éste se estaba arrepintiendo según lo soltaba-...conmigo lo hiciste y gratis.

El informático no lo soportó más pues se había pasado de la raya.

-¡Vete de mi casa!, ¡Joder lárgate maldito gilipollas!-le gritó furioso mientras corría a abrir la puerta de su casa para que éste saliese-...¡Vete de una maldita vez!...¡no quiero volver a verte en lo que me queda de vida!.

Singto asintió y cabizbajo salió.

-Oye... yo estoy dejando ese horrible trabajo porque desde que tú entraste en mi vida, vi que podía ser mejor persona.... Que podía salir de eso porqué tú me inspiraste, tú eras puro, bueno y te sentía mío en cierto modo... No quería que te mezclases en esa vida pero tu sólo te has metido.

-Yo sigo siendo él mismo-dijo Krist entre lágrimas-...Soy un patético friki con un mísero sueldo y que vive en una pocilga.... No soy bueno, ni puro, ni tampoco soy celestial, no soy nada de eso.... Tan solo soy una persona normal que comete errores como cualquier otra​ y se equivoca el 99% del tiempo....Volvería a hacerlo para poder ayudarte, así que si quieres crucificarme hazlo... tú mismo, mi conciencia está muy tranquila.... Y ahora te agradecería que te fueras y me dejes solo, ya no quiero hablar más de esto...Ojalá te salga todo bien y el resto de tus problemas se solucionen, adiós Singto, mucha suerte-dijo el informático cerrándole la puerta en la cara.

-Adiós pequeño... lamento que esto terminase así-susurró el ex gigolo mirando al suelo, antes de echar a andar escaleras abajo.

Después de eso, Krist corrió a su habitación y se tiró llorando sobre la cama, estaba muerto de tristeza y dolor pues todo se había acabado y no sabía que iba a hacer en adelante pues estaba enamorado de Singto y sentía que no podría vivir sin él.