[ What if...?]
Jade~
Me desperté como todos los días, por el insesante sonido de la alarma en mi celular; aunque este día había una diferencia, y es que debía asistir al trabajo una hora antes ya que mi jefe me había dicho que me requería más temprano para acompañarlo a una junta.
Yo soy parte del equipo de planificación en la empresa de Ryan Craig, uno de los empresarios más jóvenes y respetados de la industria empresarial.
Se preguntarán, ¿qué sucedió con Jack?, pues en resumen, él sigue con Sally incluso después de tantos años, aunque eso lo sé porque mis padres y los de Jack siguen siendo amigos, pero no puedo decir lo mismo entre Jack y yo.
No nos hablamos desde que ellos regresaron, gracias a mí.
El señor Miller trató de convencerme de trabajar en su empresa pero me negué rotundamente, no quería ver a Jack y menos cuando Sally llegara a su oficina. Mucho había tenido en la universidad con sus exageradas muestras de cariño que le hacía a Jack a propósito sólo para que yo los viera.
Conseguí trabajo en esta empresa, y he de decir que no me va mal, mis compañeros de trabajo me tratan bien y aunque mi jefe es muy serio y poco amigable, no es malo conmigo.
Me dispuse a darme una ducha para luego arreglarme e ir a la empresa.
[...]
-Buenos días señor, Craig.
-Buenos días - respondió serio como siempre.
-¿Hannah no vendrá con nosotros? - pregunté al ver que sólo éramos él, su asistente Charles y yo caminando por recepción hacia fuera del edificio.
-No, ella debe atender la junta con el resto del equipo de planificación, y tú vienes en su lugar.
-Oh - fue lo único que dije.
La verdad es que a veces me daba algo de miedo y si le hacía más preguntas podría molestarse y no pienso perder mi trabajo por andar de metiche.
Entramos al auto que era conducido por Charles, estando yo en el asiento del copiloto y Craig en el asiento trasero.
Todo el camino fue en completo silencio, algo incómodo a mi parecer, y sí, digo a mi parecer porque para estos dos parecía ser algo normal.
Charles era casi similar a Ryan pero en versión asistente.
Casi quince incómodos minutos de viaje después, finalmente llegamos al lugar, uno que conocía a la perfección.
La empresa de los Miller.
No podía retractarme, si lo hacía mi jefe me cuestionaría el por qué.
Se imaginan que yo le diga: Es que el vicepresidente de esta compañía era mi mejor amigo, de quien estuve enamorada por años pero desde hace tiempo que no nos hablamos y no quiero verlo.
Ya sé, suena estúpido y patético.
Si le dijera eso a mi jefe probablemente me vería mal y me despediría sin pensarlo dos veces, y no lo culpo, yo también lo haría.
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¿Más Que Una Amistad?
Teen Fiction-- A veces pienso que debería enviarte a un manicomio -- parecía que el chico estuviera reflexionando. -- ¿Pero? -- preguntó ella curiosa levantando una ceja. -- Pero después creo que debería ser yo quien vaya a uno por hacerle caso a tus locuras...