Jade~
Ya había pasado una semana después de haber regresado de las vacaciones y Jack era ignorado por Sally o recibía miradas de desprecio por parte de la mencionada.
Era obvio que lo hacía con la intención de hacerlo sufrir y eso me molestaba mucho, aunque también me hacía sentir aún más culpable.
Ni siquiera le había dado lugar a Jack para explicarle.
Pero lo peor de todo es que él casi no me habla, y eso me hace sentir peor que antes.
Un día antes de regresar a clases me dijo que volvería a su casa, claro que no lo iba a detener, estaba en todo su derecho, pero incluso en esta semana he intentado llamarle y no contesta, y cuando lo hace es para decirme que no está de ganas.
Lo único que me queda es dejarlo estar, y que se tome su tiempo.
[...]
Me estaba durmiendo literalmente, ya que el profesor no dejaba de hablar de, quién sabe qué, cuando el timbre sonó.
-Muy bien jóvenes, nos vemos mañana - dicho eso todos comenzaron a salir, pero alguien salió con más prisa.
Jack.
Iba a seguirle pero alguien me interrumpió.
-Señorita Collins - me llamó el profesor.
-¿Sí? - me acerqué a él, a una distancia prudente, claro.
-¿Podría hacer el favor de ir a dirección?
¡Jesucristo¡ ¿Y ahora qué hice? ¿Será porque me estaba durmiendo? Yo no tengo la culpa de que él hable tanto y de cosas aburridas, además.
-¿P-por qué?
-Quiero que lleve estos papeles, son muy importantes, y yo tengo que irme ya por otro compromiso.
Ay sí, compromiso. Eso mismo le dije a mi mamá cuando salimos de compras con la señora Clayton hace tres meses. El escape perfecto.
-¿Podría hacerlo por mí?
-Sí, no hay problema.
-Bien. Muchas gracias.
Y como si huyera de algo, salió rápidamente del salón.
[...]
Era la hora del almuerzo y yo aquí, en la dirección, esperando a que me atiendan en esta fila infinita.
Minutos después logré entrar a la dirección dejando los dichosos papeles en manos del director, para luego salir de ahí.
Decidí salir al enorme campus para distraerme un rato, sólo para encontrarme no muy lejos, a Jack tratando de hablar con Sally; pero ella se negaba a escucharlo.
Estaba a punto de irse, pero la detuve.
No puedo creer que esté a punto de hacer esta estupidez.
-¡Oye!
Ambos voltearon hacia mí. Él con cara de sorpresa y preocupación, como si pensara que voy a arruinar algo; y ella con su típica cara de bru- digo, de fastidio.
-¿Qué quieres? - preguntó notablemente molesta y fastidiada.
-Hay un asunto que debemos arreglar.
-Jade - parecía que me rogaba con la mirada que me detuviera antes de decir algo que lo arruinara aún más.
-No tengo tiempo para tus estupideces niña.
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¿Más Que Una Amistad?
Teen Fiction-- A veces pienso que debería enviarte a un manicomio -- parecía que el chico estuviera reflexionando. -- ¿Pero? -- preguntó ella curiosa levantando una ceja. -- Pero después creo que debería ser yo quien vaya a uno por hacerle caso a tus locuras...