Sickness [OhmFluke]

Juntos

"Armonía, tomada del griego αρμονια, proviene del concepto de: juntar una cosa con otra en un orden placentero".

La habitación cayó en un silencio sepultural.

Las dos personas sobrias tenían la sorpresa pintada en el rostro escuchando pasos y barullo en el pasillo a pesar de pasar la media noche gracias a los gritos irracionales de Fluke.

Recuperando el temple luego de unos segundos al escuchar a alguien más aproximarse, la anciana se puso velozmente a lado de su hijo inconsciente para sostenerlo del brazo dulcemente e intentar mantenerlo tranquilo a lo que se venía.

La virreina estaba entrando a la habitación luego de seguirle los pasos.

Earth se quedó atónito, mudo ante la complejidad de la situación mientras intentaba maquinar cualquier cosa que sirviera para ahuyentar a su madre que entraba con una expresión extraña en su rostro.

La mujer apenas le dedicó una mirada vaga, pues toda su atención estaba en el príncipe que casi se colgaba del brazo de su nana balbuceando cosas inentendibles.

Calmada, sonrió con falsa amabilidad-. ¿Qué has dicho, Fluke? ¿Amar a quién? -preguntó queriendo confirmar lo que había alcanzado a escuchar del escándalo.

El nombrado la observó divertido dispuesto a aclarar su pregunta cuando su nana dio un pequeño tirón de su brazo para llamar su atención y sonreírle con los ojos, desviando su poca razón del tema que su tía quería abordar.

-Está muy borracho, madre -aprovechó Earth acercándose a la dama en pijamas que ya había arrugado la nariz al no obtener la confirmación que necesitaba para desatar toda la furia que sentía hacia el heredero, y que se había incrementado con sus sospechas acerca de que él era el verdadero culpable de robar la llave del rey-. Habla incoherencias y se ríe de ellas, por favor, no haga caso de sus palabras. Lo mantendré callado, ¿sí?

-¿De qué palabras? -cuestionó la reina entrando con un par de sirvientas siguiendo sus pasos para atenderla en caso de que algo se le ofreciera.

-Tía... -alcanzó a murmurar Earth antes de pararse al frente de su nana y Fluke previniendo cualquier cosa.

-Tú hijo está confesando su amor por un hombre, querida, y no cualquiera, sino por su cuñado- informó con suficiencia.

La reina frunció su pequeño rostro en un gesto de asco observando a su hijo casi en el suelo -. ¿Qué tonterías estás diciendo? Es repugnante.

Molesta por la nula credibilidad que tenían sus palabras para la alzada dama, la virreina caminó hacia el muchacho -. ¡Qué te lo diga él mismo! ¡Anda!

Observando la molestia de su madre, Earth se plantó con más fuerza delante para detenerla tomándola por los hombros mientras se sacudía frenética intentando alcanzar con sus uñas a Fluke.

-¡Madre, por favor! Está borracho, no haga esto, va a meterse en más problemas con mi tío, contrólese -suplicó, pero la mujer lo empujó a un lado.

Sin poder defender, Earth vio a su madre abalanzarse hacia su primo confundido hasta que la misma reina la sujetó del brazo para jalonearla hacia atrás y evitar que lo tocara.

-No me hagas perder la paciencia, deja a mi hijo en paz, hija de mala madre.

Durante unos segundos, todos callaron sorprendidos de que la reina pareciera preocupada por un hijo al que jamás le había prestado atención más que para vestirlo como muñeco cuando había eventos importantes en los que tuvieran que figurar como una familia real, pero más rápido de lo que hubieran querido, se dieron cuenta de que eso no iba a cambiar.