Despertó con un dolor insoportable, se encontraba en posición fétal pero al lado contrario del que le habia recostado la noche anterior ¿acaso le estuvo moviendo toda la noche? Sabía que no era un sueño, todo era real; giró su vista por la habitación mas no vió rastro del castaño, como si le hubiese llamado con el pensamiento, la puerta se abrió, mostrando al chico aquél. Ataviado en unos jeans negros y un hoddie guinda con letras rosas y el emblema "words don't fight", bastante curioso para alguien que solucionaba las cosas hablando.
Al mirarlo cerró los ojos, la vergüenza lo invadió ¿cómo había caído tan bajo como para terminar liciado en la cama de su vecino?
— buen día — pronuncia Jung, hacercandose a él con agua y más analgesicos. — no simúles dormir, ví tus ojos abiertos al ingresar —
Lo giró cuidadosamente conservando la posición fétal, colocó su brazo derecho bajo la cabeza del recostado, le enderezó gentilmente y con la izquierda le dio algo de agua y las pildoras.
El pelinegro obedecio derramando lagrimas, su vida estaba en picada, preferiria haber muerto a provocar lastima. Una suave mano se deslizó ligeramente por su rostro, limpiando el agua en sus mejillas.
— coadyuva por favor — menciona levantandole de la cama
Tanto la cama como los pantalones estaban manchados de sangre, el semblante en Sehun totalmente decaído, casi moribundo. El contrario lo sabía pues durmió abrazado a él toda la noche y al levantarse su muslo estaba manchado.
Lo llevó al cuarto de baño para una ducha rapida y volver a curarle.
— debo ir a casa — pronuncia en voz debil.
— no lo apruebo, debemos ir con un profesional —
— necesito descansar, es todo — dice con la cabeza casi oculta en su pecho.
El lider estudiantil niega con la cabeza.
— ¿eres indolente? Dame un argumento no fútil para dejarte ir —
— ¡YA BASTA DE TU MIERDA JAE! no te entiendo. Bien, acertaste en lo de la erección y la infección y todo eso ¿satisfecho? El mundo tiene que estár de tu lado para permitirte ver esto — no puede evitarlo, las lagrimas corrian intensas — me largo —
Jung le abrazó fuerte, no para consolarlo sino mas bien porque se encontraba al borde de la tina y como no podia moverse bien, talvez resbalaria si intentaba pararse.
Lo soltó luego de algunos segundos de lloriqueos y debiles forcejeos.
— dejame conservar algo de dignidad, sigo siendo un chico —
El dueño de la habitación comenzó a lagrimear.
— no es momento de actuar vehemente. Apuesto a que ni Jaehyung, ni cualquier otra victima se descalabazaron en su lecho de muerte ¿vamos a rumiar tu situación? Exculpame pero no pienso discurrir tu lacrimógena situación, sería tirar por la borda... No importa, solucionemos esto o feneceras —
A jalones le sacó del baño y repitio el proceso anterior, Oh cerró sus ojos y guardó silencio, no tenia la fuerza física ni los argumentos para frentearse con él.
Sacó unos calzoncillos ajustados y con dificultad por el diseño les colocó una toalla sanitaria, le subió la ropa interior, cuando el pelinegro sintio aquello, pegó un salto.
— ¿qué haces pervertido? —
— ¿yo? ¿Pervertido? ¿Crees que te dejaran subir a un taxi si sigues sangrando? — ya no puso tanto cuidado y luciendo molesto le vistio rapidamente. Unos jeans oscuros, hoddie negra y pantuflas de osos polares.
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El manual de: Dear Me
FanfictionJohnny es un locutor de radio que busca cambiar al mundo de manera positiva, poco a poco su visión se nubla tras la tragedia que comienza a inundar la ciudad, llenándola de crimen y violencia.