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Capítulo 9

─ "..."

El ruido en la habitación se detuvo por un momento. Pero estaba acostumbrada a que todos se quedaran en silencio cuando Essie entraba, ya que sucedía todos los años.

Tan pronto como entré, comencé a buscar a Agrita.

«¿Dónde está ella?»

«¿Dónde estás, heroína?»

El silencio en la habitación se rompió cuando la gente se acercó a saludarnos.

─ Hola, duque y duquesa Lydia.

─ Es un honor conocerte.

─ Ustedes dos siempre lucen como si acabaran de salir de un cuadro. Duque Weadgreen, feliz décimo octavo cumpleaños.

Me distraje porque nos sometieron a un torrente de saludos.

Mientras miraba a las personas que se apiñaban a nuestro alrededor, confirmando que la mayoría de ellos solo estaban enfocados en Essie, me di la vuelta de nuevo.

Agrita Grace. Solo quiero verte. ¿Dónde estás?

«¡Ah!»

Justo cuando estaba buscando en cada rincón del salón de banquetes, la encontré.

Había una dama parada cerca de la entrada al exterior.

La reconocí de inmediato. No había forma de que no lo hiciera.

Su descripción física sobre la que había leído innumerables veces coincidía exactamente con lo que veía de ella ahora.

Incluso sabía qué ropa llevaría hoy al banquete. Había una descripción extensa de su ropa en el libro.

A primera vista, no tenía mucha presencia con su cabello castaño común y ojos marrones.

Pero su rostro delgado y pestañas espesas mostraban que era una belleza poco común.

Agrita era como una flor de pera. Esa fue mi primera impresión de ella.

─ Pensé que el libro decía que era de una belleza sencilla.

El libro estaba lleno de mentiras. Había descrito a Agrita Grace como una belleza sencilla que podía mantener una mirada dulce y hermosa sin siquiera vestirse.

«¿Qué quieres decir con simple? Es tan difícil ser guapa sin vestirse elegante»

Independientemente, tal como lo describe el libro, Agrita atrajo la atención de las personas sin siquiera intentarlo conscientemente a pesar de no tener un disfraz o accesorios.

No era solo porque era bonita, más bien, tenía una forma de atraer tu atención hacia ella.

Su vestido color perla sin accesorios le sentaba bien como si estuviera hecho a propósito de esa manera.

Con solo mirarla, obtendría una sensación de pureza y limpieza. Cuanto más mirabas, más difícil era apartar la mirada.

Finalmente volví a mis sentidos después de estar fascinado por Agrita.

Ah, Essie.

Essie ya debe haber visto a Agrita, ¿verdad?

Debería haber pasado ese punto. Porque en el libro, Essie ve a Agrita justo después de entrar al salón de banquetes.

Y se sentía como si las personas que se agolpaban alrededor de Essie no recibieran ninguna respuesta de él, así que básicamente estaban hablando entre ellos.

Esto significaba que la atención de Essie estaba en otra parte.

¡Debe ser Agrita!

Mientras pensaba esto, volví la cabeza hacia Essie y me sorprendí.