ESP -MYSTIC MESSENGER -Je te promets! (Te prometo)

Conflicts

—Hace unas horas recuerdo que estabas de viaje en el extranjero, ¿no? Deberías recomendarme la aerolínea que tomaste  para poder llegar tan pronto a mis reuniones como tú —, reprochaba sarcásticamente Jumin a un joven que había entrado sigilosamente por otra puerta, contraria al estacionamiento trasero donde se encontraban los demás.

Nervioso, dio un suspiro profundo y tragó saliva —yo, l-lo lamento… h-hay cosas que no puedo decirte, Jumin, pero por el bien de todos, es mejor que me creas.

—¿Creerte cuando en diciembre te dije que no te daría acceso a ninguna información privada de los invitados de hace cuatro años y a pesar de eso utilizaste a un hacker para que rompiera las reglas de mi empresa? ¿Creerte cuando mis empleados ya encontraron anomalías en las cuentas bancarias de dichas personas con fechas aproximadas a ese incidente?

—¿¡Qué!? No sé de lo que estás hablando —, respondía al verlo con una mirada de extrema preocupación.

El azabache exclamó fastidiado, cruzó sus brazos y nuevamente dirigió una fría mirada hacia su viejo amigo.

—Bien, te refrescaré la memoria si eso deseas —prosiguió con su queja sin la más mínima expresión facial —. Para ser exactos, múltiples transacciones que en total suman alrededor de quince millones de dólares fueron detectados en el sistema del departamento de finanzas de C&R.

V quedó sin respuesta alguna, su respiración era agitada por lo que el empresario comenzó a reír falsamente.

—¿Sabes qué es lo más agraciado aparte de tu cara? …Que el beneficiario de dicho movimiento es la RFA… —pausó por un breve momento y prosiguió —. Asumo que Luciel aún no tiene conocimiento de ello ya que no sería un completo estúpido como para dejar pistas tan descuidadas que incluso un amateur podría encontrar. Me pregunto porqué el ID de la computadora donde se hizo este proceso coincide con la dirección de tu departamento. ¿No será que estás jugando al hacker?

Anonadado, el acusado dio la media vuelta y con la voz quebrada atinó a decir —  es una equivocación, Jumin… puedes echarme la culpa si gustas pero te aseguro que yo no lo hice.
Molesto, el empresario lo tomó por el brazo y lo detuvo — Te diré una última cosa, Jyhun… Es obvio que te he sobrevalorado como ser humano y está más que claro para mí que está decepción podría sobrellevarla en estos momentos con una excelente vista desde mi penthouse, disfrutando de un delicioso vino a lado de Elizabeth III… Sin embargo, me encuentro en un hospital por razones que desconozco plenamente y que estas mismas indican que tienes fuertes lazos de lo que está sucediendo. Por lo tanto, como miembro activo de la RFA, me veo en la penosa situación de abrir una investigación en contra tuya y por ende, expulsarte de todo acceso a la fundación.

La lámpara del pasillo comenzó a parpadear como si en cualquier momento pudiera fundirse al igual que las expectativas de Jumin.

El azabache se retiró, dejando en el olvido los buenos momentos con su mejor amigo. Ocultando su tristeza al verse traicionado por la persona que menos creyó que le haría eso. La responsabilidad de todos los demás había caído completamente en sus hombros, por lo que daría las nuevas a todo el equipo, aunque quizás, no esa noche.

Observó el teléfono, había transcurrido una hora y media desde que empezó el incidente. Cerró por un momento sus ojos y cayó en un profundo sueño.

Dormitando, escuchó la voz de una mujer llamando a “Hyun Ryu”. Recobró los sentidos y volvió a mirar su reloj; pasaron seis horas. Suspiró y tragó saliva. Masajeó sus sienes y observó a Zen dirigiéndose a una oficina. Sin pensarlo, se levantó y los siguió.

—¿¡Sabe usted perfectamente que lo que está haciendo es considerado como un delito!? —acusaba molesta la doctora Kyo al señalarlo con una mirada llena de coraje.

—¿¡Delito!? Lo único que he hecho es ayudar a salvarle la vida, por el momento no tenía contacto con ningún familiar de ella — replicaba el albino al apretar los dientes y fruncir el ceño. Su respiración era violenta, se sentía frustrado al experimentar un malentendido.

—Nuestras cláusulas son más que claras… Al momento de prestar nuestros servicios no quedan excluidos los casos de urgencia, es sentido común — la mujer caminó en círculos y se fue acercando nuevamente a él, se le notaba desesperada —. Sin embargo, firmó un documento que no le correspondía… pudo haber avisado o explicado la situación, pero ahora que se hace llamar por el “responsable” llegan un sinfín de dudas a mi mente. ¡Nuevamente le pregunto! ¿¡De dónde conoce a esta joven!?

—E-es mi hermana…  —titubeaba estresado.
—¿Pretende que le creeré eso? ¡YA BASTA! A pesar de que no sea de su incumbencia le diré porque ya me tiene harta con su estúpido juego… conozco a Mayuri desde muy pequeña, de igual manera a su familia…  así que no puede andar por ahí y queriendo verme la cara. La hemos buscado como unos completos locos y llega a mis manos con heridas severas…

—Siento mucho escuchar eso…  —replicaba empáticamente al desviar su mirada al sentirse avergonzado por verse descubierto. 
—Yo opino que realmente no lo siente… — murmuraba al cerrar los ojos y negar con su cabeza —¿qué fue lo que le sucedió, al menos puede explicarme eso?

—N-no tengo idea, doctora… ya se lo dije. 
—¡Al carajo todo esto! Eso no es lo que quiero escuchar… ¿¡Acaso no fui clara!? Si sigue evitándome las preguntas, me veré obligada a que lo detengan por sospechoso…

—¿¡P-pero por qué a mí!?

—Exactamente me pregunto lo mismo —interfería el azabache al abrir la puerta y entrar sin previo aviso.

—¿¡Y tú qué haces aquí, destinado a CEO!? —chillaba el actor al incomodarse más.

—No podía soportar el parloteo sin fundamento de una persona con un posgrado, agradécemelo después.

—Oye, vete… no necesito de tu ayuda —cuchicheaba Zen al observarlo con una mirada reprobadora. Escondió sus manos de la vista de la mujer y comenzó a hacerle señas para indicarle a Jumin que se fuera.

—Hace mucho que no lo veía, señor Han pero si me disculpa, me encuentro atendiendo unos asuntos importantes —  replicó mujer al verse un poco inquieta.

—Dichos asuntos me conciernen.

—¿L-la conoces, Jumin? — preguntaba confuso al observar a ambos.

—En efecto… nosotros nos encargamos de distribuir el medicamento y el material sanitario que se utiliza aquí. Como sea… Ahora, me dirijo con usted, directora. Puedo asegurarle que a pesar de que este joven parezca un vándalo y no tenga educación, en realidad no es mala persona. Inclusive si lo fuera, estaría de acuerdo con usted pero me temo que no le permitiría que le avisara a la familia de la señorita Chou que se encuentra aquí.

Era obvio que Zen quería discutir con Jumin ya que lo estaba provocando, sin embargo, no era el lugar.

Decepcionada por la respuesta, la doctora apretó sus puños y prosiguió a hablar —. Le respeto, señor Han, pero no concuerdo con nada de esto… Usted no sabe cuánta preocupación está pasando su familia.

—Puedo imaginarlo y lo lamento mucho… pero sé que será inteligente al escucharme y que este historial será confidencial y estará bajo llave en nombre del juramento hipocrático…

—¡Tsk! ¿Por qué habría de guardar silencio en esto si mi razón me está gritando que debo divulgar esta noticia a quien le incumbe —Protestaba indignada al escuchar la amenaza disfrazada de propuesta.

Jumin se acercó a ella. Una mirada fría y dictadora emanaba de sus pupilas. Claramente se podía leer el mensaje que quería transmitir, ocasionando más inquietud y desesperación en la mujer.

—Si lo hace, ella, su familia e incluso nosotros estaremos en un grave riesgo… La hemos resguardado por voluntad propia para evitar un desastre. Desgraciadamente, el enemigo aventajó y no tenemos aún rastros de él, sin embargo, hay muchas pistas. Estoy seguro de que será inteligente y no armará un escándalo que eche a perder nuestro trabajo—afirmaba con seguridad.

—Antes de que digan alguna otra cosa, quiero que usted corrobore algo… — exclamaba Zen al fruncir sus cejas y llevar su mano derecha al pecho, llamando la atención de ambos al tener un comportamiento decisivo. Su postura mostraba la desesperación por ser reconocido como inocente —. ¡Nosotros queremos a Mayuri como a una de nosotros, es decir, como familia! Además, es imposible que quiera lastimarla… Siempre nos escucha, es una persona demasiado noble y está dispuesta a ayudar a los demás sin importar qué. ¿¡Cree usted que es la única quien está preocupada!? Acaban de herir a mi amiga y el agresor aún está suelto… Yo le prometí a ella que estaría ahí siempre, así que no dejaré que usted ni nadie se interponga con mi palabra.

El silencio se tornó aún más incómodo, sin embargo, un corazón fue tocado.

Sin querer concordar, la mujer exhaló y cruzó sus brazos. Su frente mostraba los pliegues de preocupación y su cuerpo le exigía que no prosiguiera — Realmente quisiera no creerle, Señor Han, pero soy consciente de que su palabra siempre ha sido de honor y… joven Zen, puedo percibir con esto poco que lo que dice es de corazón y me es difícil aceptarlo… —caminó desanimada, acercándose nuevamente a Zen y volteando entre lágrimas —. Tan sólo, permítanme cuidarla y estar al pendiente de su salud.

—Siempre y cuando respete un acuerdo entre nosotros, Doctora Kyo — replicaba Jumin al cruzarse de brazos —. Como le comenté, no puedo desmenuzarle la información de lo que sucedió pero necesito que usted crea que si mantenemos en secreto la identidad de ella es por su propio bien.

Las palabras zurcieron la grieta entre ellos, devolviéndole un poco de alivio a la persona que buscaba frenéticamente a la sobrina de un colega, aquella misma que veía como su propia hija, pues recuerdos al verse reconfortada por aquella niña después de un aborto espontáneo sumergían la sensibilidad de la especialista de cabello azabache.

—Me temo que en ese caso las curaciones y el personal encargado va a ser contado... En el hospital hay mucha gente que está enterada en su desaparición y no dudarán en llamar a la familia a cambio de la jugosa recompensa —, comentaba sería —. Pero eso no es importante ahora, hay que esperar a que despierte de la anestesia.

Holi, buenas tardes... Perdón por la desaparición TuT me desanimé escribiendo y me dio la depre xD pero ya voy a intentar retomar esto porque le prometí a mi beffi que iba a terminar la historia. Espero les guste y gracias a las personas que me apoyan. uwu