MI HIJA PERDIDA || SAGA: MHP UNO ||✓

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Michael

Mordí mi labio inferior y a la vez movía mis manos desesperadamente, tenía un gran banquete en la mesa y no estaba dispuesto a dejar migajas para los pájaros.

Un delicioso y enorme pollo frito.

Estaba a punto de tomarlo con mi mano cuando Frank me interrumpió.

—¿ Que sucede Frank?—le di una mirada cansada—Estoy cenando.

—Se que estás cenando Michael, pero tú pata de pollo puede esperar— tenemos problemas.

—¿ Que clase de problemas?— pregunté.

—Sony—.

—¡Que quieren esos desgraciados ahora!—me levanté de mi asiento.

— Dinero Michael, ocho millones para ser exactos. Tenemos que entregárselos o todo se va por la borda—.

—¿No hay otra manera de salir del problema?—.

— No—.

—Bien, mañana nos ocupamos de eso. Déjame comer en paz—.

—De acuerdo—el salió del salón y mi mirada se detuvo en el pollo—Ahora solo somos tu y yo—le di un mordisco y cerre mis ojos.

En otro lugar

Aquella mujer se encontraba teniendo otro ataque de nervios. era el número seis en este mes, ella no sabía que hacer, tenia los pelos de punta, todo había sido una pesadilla desde hace unos días. Cuando ella y todo el mundo supo la verdad.

No sabía que hacer, penso por muchos años que el había dejado este mundo, pero no fue así. estaba con vida y todos lo sabían.

Se encontraba en un agujero sin salida, tenia miedo. Recuerdos se apoderaron de su mente, recordó las risas, los coqueteos, esas noches llenas de pasión y amor por parte de ambos. estaba aterrada .

Abrió una caja y saco una fotografía de ella y el. Ambos se encontraban felices, sonriendo, se veían enamorados o eso pensaba ella. paso la yema de sus dedos por la fotografía,la miro para luego romperla en pedazos y romper en llanto.

Lo seguía amando desde el primer instante en el que lo vio.

—¡Porque me haces esto!— lloraba—No entiendes que todavía te amo, créeme que preferiría que estuvieras muerto— su amor dolía tanto como una apuñalada.

Colocó los pedazos rotos de la fotografía en la caja y la puso en su lugar. Abrazo sus piernas para luego volver a llorar.

Su misma rutina desde hace 12 años.

Michael

Tengo que hacer algo. Debo hacer algo.

Tengo tanto estrés por la gira que empiezo a enloquecer cada vez más. Debo hacer algo para calmar mi estrés.

Mi ojos de detienen en Wendy, trae 2 cajas en sus manos y se dirige a la biblioteca.

—¡Hey Wendy!—ella me miró y se acercó a mi.

—Buenas Noches señor Jackson— me saluda con cortesía— ¿Puedo ayudarlo en algo? .

—¿Para que son esas cajas?— pregunto de manera curiosa.

—Es fin de mes señor Jackson, día de la limpieza. En la biblioteca se encuentran libros y hojas que ya nadie utiliza, es mi deber mantener el lugar limpio y ordenado.

—No te preocupes Wendy—tomo las cajas— yo me encargo de eso, le doy la noche libre.

—¿Está seguro señor Jackson?— yo asiento con la cabeza y ella sonríe— muchísimas gracias Señor, con su permiso.

Ella se retira y yo camino a pasa apresurado a la biblioteca.

Bien. Por dónde empezamos.

Cajones.

Gracias mente, por lo menos sirves para algo.

De nada.

Comienzo a sacar las cosas de aquellos cajones. Libros y cosas que nadie a usado en mucho tiempo, y también mucho polvo.

Tu quisiste hacer esto michael ahora te aguantás.

Tienes razón mente. No puedo echarme para atrás, y es solo polvo.

No me di cuenta cuando ya llevaba horas en estos cajones, no pensé que seria tan cansado. Lo es y mucho.

Dentro de un cajón encontré una caja mediana plateada. La abrí para ver su contenido.

Eran más que todo cosas de mi propiedad. Fotos, rollos fotográficos, estampillas. Debía de tener mucho tiempo esa caja allí dentro.

Pero hubo algo que me llamo la atención. Una foto en específico de una mujer, alguien que creí haber olvidado... Pero al observar esa fotografía sentí esas absurdas mariposas en el estómago, ese nerviosismo dentro de mi salió a flote y esa adrenalina que tanto había olvidado.

Y eso era lo último que deseaba ahora.

No quería volver a mi pasado.

Ese pasado que tanto odio... Pero que a la vez amo.

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