She will be loved

Capítulo 26

"Las piezas del rompecabezas están unidas"

La familia Delacour y Hermione aparecieron en la entrada de San Mungos. Harry observo como la castaña se adentraba al lugar sin mirar atrás, Apolline y Silvia le siguieron . Su ceño inmediatamente se arrugo con preocupación, la ira empezaba aumentar en su interior al imaginar la desesperación que su amiga sentía.

Definitivamente estaría igual que ella si a Ginny le ocurriera algo.

— Harry, ¿estás bien? — Cuestiono Ronald al notar su cara.

El hombre pelirrojo no iba a negar que la vergüenza cubría su rostro mientras sus pasos vacilaban en la entrada del edificio.

— ¿Cómo es que Bill pudo...? — La voz del joven se desvaneció mientras apretaba los puños con fuerza. — Nunca lo creí capaz de un acto tan horrendo.

— Lo sé, hasta yo lo desconozco.

Hermione se dirigió hacia Armand con lágrimas en los ojos. El hombre al notar la presencia de su familia permitió que un suspiro de alivio escapara de sus labios.

— ¿Dónde está Fleur? ¿Cómo está? ¿Le hizo algo ese imbécil? — Pregunto la castaña con voz temblorosa. — Necesito verla.

— Me temo que tendrás que esperar. — Respondió Armand bajando la mirada. — Ahora mismo la están revisando.

Apolline abrazo al hombre buscando un consuelo para el dolor profundo que en esos momentos sentía. Silvia coloco una de sus manos en el hombro de la chica de cabello rizado con cuidado. El vínculo del ritual se fortalecía cada vez más, quizás el triple de rápido que debería haber desarrollado. Sin embargo, a pesar de las circunstancias, la salud de Fleur estaba en riesgo.

Como Veela tarde o temprano llegaría el momento para su transformación; el siguiente paso de su lazo. El que podría unir más a la pareja, o separarla definitivamente.

— Todo estará bien, cariño.

La castaña asintió distraídamente limpiando su rostro.

Un curandero se acercó a la familia con su ceño arrugado, y nerviosamente paso una de sus manos a través de su cabello. Inmediatamente reconoció a los padres de la joven Delacour y a la persona que en esos momentos era la única cura, poción o salvación.

— Familia Delacour. — Exclamo en voz alta, ignorando el encanto de las mujeres rubias.

— Somos nosotros. — Dijo Armand liberando a la mujer en sus brazos. — Soy su padre y...

— Yo soy su esposa, ¿cómo está Fleur? — Interrumpió la morena observándolo fijamente.

El hombre contemplo por un momento el rostro de la chica frente a él con incredulidad, pero después de unos segundos recobro su compostura. Tenía que comunicarle a la familia una terrible noticia.

— Mentiría si dijera que está bien. — Susurro el curandero bajando la mirada. — Al parecer la transformación fue un poco más de lo su cuerpo resistir. Intentamos estabilizarla con algunas pociones pero... no hay magia capaz curar la herida más profunda que sufrió.

— ¿A qué se refiere? — Pregunto Hermione desconcertada.

Harry y Ronald se colocaron detrás de Silvia esperando la respuesta. La anciana se limitó a sacudir su cabeza con preocupación antes de responder ella misma.

— Las Veelas al sentirse amenazadas o furiosas más allá de lo que puedas imaginar... pueden perder el control y transformarse en lo que llevan en la sangre. Fleur, al no serlo completamente, su transformación solo se basa en la fuerza física y emocional, pero afecta directamente su magia, sobre todo la primera vez.