¡Hey! ¡Conserje Kim! - [Namjin]

Capítulo 13 - La malvada pelirosa

El amor era moldeado por los enamorados, siendo transformado en algo complicado por las vendas que cubrían los ojos de los implicados.

Y en aquella Universidad, seis personas lo experimentaban de formas completamente diferentes, vertiendo sus emociones en moldes complicados que los alejaban cada vez más.

Era lunes y empezaba la semana después de aquel fin de semana lleno de emociones. Los pasillos concurridos y las voces elevadas no fueron suficientes para que Yang Mi pasará desapercibida. Tenía el cabello rosado algo desordenado y unas profundas ojeras que había intentado ocultar con maquillaje.

Sabía muy bien que había dejado a Tae confundido en el parque de diversiones, pues no habían terminado de subirse a todas las atracciones y sin embargo, ella había decidido irse a su casa de inmediato.

Estaba demasiado nerviosa por lo que había visto. ¿Porqué Namjoon estaba con el conserje? ¿Y quién era el mocoso?. Sí, a ella le gustaba Taehyung y quería que fuera su novio pero aún así, también le agradaba el sexo magnífico y placentero que le brindaba Namjoon. Él director guapo y grosero que ella había rechazado por TaeTae.

Apretó los labios y cuándo vió al peliazul en los casilleros, se acercó de inmediato apretando sus libros contra su pecho. Se veía como una niña buena y educada en aquel vestido azul de puntitos pero en realidad, ocultaba a una completa zorra que disfrutaba jugar con los hombres, tenerlos como posesiones en un estante de trofeos.

—Tae Tae— Susurró y él mencionado la observó de soslayo. Parecía molesto y cansado, como si tampoco hubiera descansado cómo se debe. Usaba una camisa sin mangas que enseñaba el tatuaje de una rosa en su antebrazo y unos jeans rotos en las rodillas. Su cabello estaba desordenado y su chaqueta de cuadros rojos estaba amarrada sin cuidado en su cintura.

Seguramente Tae no había dormido por la actitud que ella había tenido en su primera cita. Claro que no podía estar más alejada de la verdad, pues Taehyung simplemente se sentía miserable por haber perdido su oportunidad con Kookie, él pelinegro con boca de besitos que no sentía nada por él.

Mentira

Jungkook los observaba desde su casillero, apretando con fuerza sus libros hasta que sus nudillos tensionaban su piel. Tenía puesto un enorme saco de lana color blanco y unos jeans apretados color negro. Su cabello estaba atado en una cola alta y parte de sus mechones cubrían sus mejillas.

Quería desconfiar de Taehyung y odiarlo, de todos modos él mismo le había pedido a Taehyung que lo dejará en paz, pero en realidad no podía alejarse lo suficiente. Se sentía tan estúpido por estar preguntándose contínuamente cuántas veces Tae y Yang Mi habían tenido relaciones sexuales. Cuántas veces ella lo había complacido y había eliminado su recuerdo de su mente, si es que Taehyung pensó en él alguna vez.

—Yang Mi.—Saludó Taehyung y nisiquiera notó las ojeras en su rostro ni su cabello desordenado. —¿Qué quieres?.

Yang mi tragó y estiró su mano, apretando suavemente el antebrazo de Taehyung. —Lo siento.

—¿Por?—Taehyung cerró su casillero con fuerza y la miró fastidiado

—Por mi comportamiento en nuestra primera cita.

Jungkook cerró los ojos mientras escuchaba todo, ocultó detrás de una columna de concreto al lado de los casilleros. Se había acercado sin poder detener su curiosidad y sus ansias por escuchar la voz de Tae.

—No tiene importancia.— Taehyung se encogió de hombros—Estabas indispuesta.

—¡No! ¡No contigo! Tú me gustas Tae, muchísimo—Jaló a Taehyung por la chaqueta y se impulsó, buscando los labios de Taehyung que recibieron el besó sin emoción. Sus ojos abiertos mientras observaba la bonita chica que cerraba sus ojos y expresaba su cariño con sus belfos.