Mi promesa de protegerte-Todorokixtu

Capítulo 6

"Un niño de 6 años se encontraba sentado en la camilla del cuarto del hospital. Miraba a la ventana, hace poco le habían quitado la venda de la cara, sólo habían salido por unos minutos en busca de más vendas cuando una niña de cabellera negra cruzó la puerta. 

Era la tercera vez que iba, el chico llevaba una semana ya en el hospital, tenía entendido que a la menor nunca la dejaban entrar. Al parecer se había escabullido de nuevo.

—Deberías ir...

—¡De nuevo no!— el chico giró a verla, fue estúpido pensar que le gritó a él, ella tenía un juego en sus manos, ese juguete él se lo regaló —Perdona, acabo de perder— rió nerviosa, a sus ojos ella era muy bonita... si no fuera por la marca en su pálida piel.

—Tienes que irte... ¿Acaso no recuerdas quien te hizo esa horrible herida? deberías de tenerme miedo

Shoto parecía confundido ¿en realidad nunca lo culpó de esa marca? quería oír sus reclamos, su enojo, quería ver esos ojos decepcionados... aunque le duela.

Porque si no era así de igual manera nunca se sentiría bien.

La niña caminó hasta él a paso decidido, tomó el brazo del contrario y lo peñiscó el niño se alejó y sobó su brazo. La miró aún más confundido e iba a hablar.

—Shoto, escúchame primero— lo detuvo —esta marca siempre me recordará a ti, me mantiene ligada a ti de alguna u otra forma... así es como lo veo yo. El color se parece ¿No crees que tenemos algo en común que resalta entre las demás cosas?

El chico la miró sorprendido ¿cuánta amabilidad puede caber en ella? ¿acaso no lo culpa?

Pensó mejor, ella siempre estaba preocupada por los castigos que le daba Endeavor por no ganar ante el agua.
Abrió los ojos más de lo esperado, ella sonreía como siempre, de forma ingenua e inocente. Sintió enojo y eso le hizo querer gritarle, tomó a la menor por ambos brazos y la sacudió ¿que tan lejos debes de llegar para poder proteger a quien quieres? se sentía ofendido, no por saber que su fuego no le ganaría, si no por saber que ella decidió protegerlo aunque eso signifique ponerse en riesgo ella misma.

—¡NI SE TE OCURRA VOLVER A VENIR! ¡NO TE QUIERO VER MÁS FRENTE A MI!

Aquello lo había dicho por la furia que sentía hacia si mismo... si todo sigue de esa manera ¿cómo será el héroe numero 1?

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Ella llegaba tarde, nunca llegaba tarde a ningún entrenamiento, nunca demoró ni un segundo en todos estos años de entrenamiento junto a él recordaba su último encuentro, su mirada parecía triste, el brillo que tenía en sus ojos había desaparecido con el paso del tiempo. Esa chica volvía a ser la niña del mercado en donde la encontraron, sus ojitos azules eran tan oscuros que parecían llegar a ser casi negros.

Hace unas horas ambos chocaron, ella se disculpó avisando que no se volvería a meter en su camino.

—¡No está!— Fuyumi llegó corriendo, cansada y asustada —no está en su cuarto, no está en la casa... ¡Se ha ido!

La frustración y el fastidio no tardaron en aparecer en la cara de Endeavor, se lo notaba enojado, salió del cuarto y tras él Shoto desesperado se desvió del camino esperándola ver saliendo del cuarto de baño en donde se le había pasado el tiempo.

Pero eso no sucedió, no había nadie en ese cuarto, estaba vacío, los libros de los estantes desaparecieron, el futón estaba cuidadosamente doblado, el pequeño escritorio no contenía nada.