Mi Amigo Imaginario [OFFGUN] *TERMINADA*

Capítulo 2.

¿Dando un paseo? ¿Quién rayos pasea en un hospital?, eso se preguntaba Off acostado en la cama de su dormitorio, se sentía cansado, pero más que eso confundido, él no estaba loco, estaba seguro que ese chico fastidioso existía, a pesar de que sus amigos le digan que cuando entraron lo vieron hablando solo, cosa que hizo que se sintiera peor.

¿Quién había sido ese pequeño ser? Pensó que no era buena idea preguntarse y pensar tanto sobre eso, así que decidió tomar una siesta, aún era temprano, sin embargo, él quería que ese día terminara.

Se despertó por hambre, eran alrededor de las 9pm, se sorprendió por haber dormido tanto, eso explicaba el hambre, y se frustró porque sabía que ya no podría dormir el resto de la noche, con pesadez se dirigió a la cocina para buscar algo comestible en su refrigerador, sin embargo no encontró nada, ya saben típico de jóvenes universitarios, se acostumbran a comer fuera de casa y el mas que nadie no era muy hogareño por así decirlo, se le quemaba el agua así de malo era para la cocina.

-Buenas noches, me da lo de siempre- sonrió a la señora del restaurante.

-Pensé que no vendría hoy joven- dijo la señora con amabilidad- claro espera un rato que tengo más pedidos, puedes tomar asiento mientras esperas.

El solo asintió y se fue a sentar en una de las mesas de afuera, saco su celular para ver redes sociales, casi no tenía tiempo a sí que era buen momento para distraerse, sin embargo, al ver su celular recordó lo que había pasado esa tarde.

-Rayos Off deja de pensar en eso, parece una película de terror- se regañó en voz alta.

-Aquí esta tu pedido-dijo la señora del restaurante haciendo sobresaltar al joven de la mesa.

-A-aa si gracias- dijo tratando de calmar su pulso- aquí tiene- dijo dándole el dinero.

¿Ya les dije que esta de mala suerte? Aquel chico se disponía a subir a su habitación, estaba tan sumido en sus pensamientos que no noto que alguien estaba esperando al final de las escaleras.

- ¿Por qué te demoraste tanto? - escucho decir, rápidamente alzo la mirada, y entro en pánico.

-AHHHHHHHHHH! - gritó al ver a la misma persona que vio esa tarde en el hospital.

- ¿Podrías calmarte? - dijo el pequeño mirándolo molesto, mientras el otro se agarraba del pecho sin saber si correr o quedarse, pero luego pensó que tal vez, si era una persona y para su mala suerte vivía en su mismo condominio, era lo más lógico para él después de todo.

- ¿Qué rayos haces aquí, vives en este mismo condominio? - cuestiono más tranquilo, pues el pequeño chico no le aterraba, solo le inquietaba la manera en que este aparecía de la nada.

-En realidad, no tengo idea, capaz viví aquí...talvez- dijo pensativo.