🌫️ ᧗ Capítulo Dieciocho ᧗ 🌫️

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Ese día, el olor a Pino había sido cambiado por diferentes olores, pintura, aceite, algo que parecía aguacate y también sardinas... Youngjo solamente estaba de camino a buscar algo que su hyung le había pedido, y maldita sea su suerte cuando tuvo que entrar en ese lugar para que aquél contenido cayese sobre él, su cabello, zapatos, pantalón, camiseta e incluso su mochila habían sido alcanzados por aquellas sustancias...

Lee Youngjo estaba enfadado, quería lanzar contra las paredes a quien haya hecho esto.

—¡Oh Dios mío! —una exclamación se escuchó llegar a él, seguido de ese olor a miel y nueces— hyung, hyung... Ah, es un desastre. Lo siento mucho.

—¿Fuiste tú?

Aquél chico, que los ojos de Lee veían, era hermoso. Tenía el cabello rubio, los ojos como de un tigre y los labios ligeramente entre abiertos, algo carnosos y rosados, se le notaba algo agitado, se veía tan inocente que no lo creía capaz de hacerle eso. El azabache completamente ajeno a las demás cosas no se percató de que había una discusión entre sus amigos y otros tres chicos a un lado, ambos reaccionaron de inmediato queriendo separar al grupo pero oh, sorpresa... Tenía que llegar el jefe de pasillos.

—Bomin-ah —lo llamaron los hermanos Lee, este les indico que debían irse pronto con la mirada pero un profesor se les adelantó.

Los siete chicos, ahora castigados se habían ido a una de las salas vacías que tenía el recinto, encontrándose con que debían pasar al menos tres horas encerrados, hubiese sido genial de no ser por qué nuevamente una pelea estaba armandose allí dentro.

—¡Idiotas! —gritó Seoho casi abalanzandose sobre los gemelos, quienes se escondían tras Hwanwoong— ¡Nunca te había visto, pero no me caes bien!

Al rubio no le gustó eso, es más, lo puso triste.

—Honnie-ah, lo sient-

—Dongmyeong no quiero hablar contigo —respondió el omega— no puedo creerlo, te creí mejor que esto. ¡Youngjo no te ha hecho nada!

—¡Eso no lo sabes! —saltó a defender Dongju.

—¡Ya basta, cállense! —gritó Bomin asomándose al salón, había oído todo y estaba enfadado— ¡No me importa quien inició, todos están castigados!

El azote de la puerta los dejó callados, Hwanwoong se alejó de los gemelos pero estos fueron tras él.

Leedo y Youngjo se miraban, este intentaba disimular el asco que sentía del olor nuevo del menor.

—Youngjo-ah, lo siento...

—Lo sé hyung, deberé bañarme al menos cinco veces.

—No es sólo eso —murmuró— ¿Recuerdas los gemelos que te conté?

Todo tuvo un ligero sentido para Lee, sin embargo no tenía pruebas de que ellos habían planeado todo, tampoco podía hacer mucho caso, no quería crear un disturbio a sus padres quienes ya estaban muy ocupados, todo lo que podía hacer era hablar con su hyung mientras el olor a miel y nueces estaba extendiéndose por todo el aire.

—¿Ese es tu olor? —preguntó Seoho a Hwanwoong— huele bien, pero cálmate. ¿O acaso quieres que los tres alfas de aquí te devoren?

—No hay necesidad de ello —dijo Keonhee parándose al lado del rubio, tomándolo por la cintura lo que tomo a todos desprevenidos— tampoco de ser tan grosero, Woong-ah —miró a su primo— ve con los gemelos, yo me encargo de esto.

Xú sin decir nada salió de ahí, sentándose con los dos menores quienes miraban atónito al castaño, asombrados por aquél acto.

—¡Es increíble! —bramó enojado el rubio, sus orejas bien levantadas y todos los ojos sobre él— este comportamiento tan rebelde, ¿no les avergüenza? No quería que se metieran en problemas y ahora estamos enfrentados a un castigo que puede quedar en nuestro expediente siempre... ¡Piensen en ello!

—Que raro habla —burló en voz baja Leedo.

—¡Fue muy extremista! —siguió, su rostro rojo de rabia y de tristeza— estas cosas pueden salir mal, pudieron hacerle un daño más grave. ¿Sabían que un objeto como ese cayendo a una gravedad elevada pudo incluso matarlo?

Los gemelos Lee palidecieron, no querían ser marcados como los chicos que asesinaron un estudiante.

Todo por complacer a un padre que no se preocupó por verlos crecer.

—¡Disculpense!

Youngjo por fin había volteado, encontrándose con el rostro enojado de ese Omega rubio, los gemelos no iban a levantarse pero al final obedecieron parándose frente al Lee azabache, bajando la cabeza.

—Lo sentimos mucho... Hyung. De verdad lamentamos haberte hecho esto.

Seoho rió sin gracia, sin creerse que acabase de suceder tal cosa.

—Es increíble —dijo Keonhee fascinado, sin quitarle la vista no precisamente a su primito.

—¿Eres su alfa? —preguntó Im mientras movía sus orejas— deberías controlarlo un poco, es extraño.

—¿Por como habla? Es normal en él, el crecer en un ambiente rígido como en el suyo lo hace así.

—... ¿Se conocen muy bien? Eso es genial.

Chwe río amargamente, le gustaba pensar que su círculo familiar era perfecto, o al menos era bueno pero si tenía que ser sincero consigo mismo habían cosas que detestaba, el solo saberla le hacía crearse mil mentes todas las noches acerca de cómo, por qué o cuando sucedieron.

Y era agobiante.

—Sólo... No seas tan duro, hay quienes hacen cosas para complacer a otras personas —explicó el castaño al Omega azabache— oh cierto, no me he presentado. Mucho gusto hyung, soy Chwe Keonhee.

—Im Seoho, ¿debería decir que es un gusto?

Al castaño le causaba gracia su aspereza, quizás podría divertirse haciéndolo enojar.

—No seas tan malo, ¿escuchaste algo de lo que dije?

—Primero que nada soy tu hyung, repétame. Segundo, de suceder eso o no. Igual no estuvo bien, ¿tienes idea lo que esté castigo nos hará en un futuro?

Keonhee volteó a verlo alzando una ceja.

—Deberías relajarte un poco hyung, aparte de Hwanwoong dudo que exista alguien tan histérico. Solo es un castigo.

Seoho rodó los ojos. No iba a pelear con él.

—Hyung, hablanos —pidio Dongju mientras se cruzaba de brazos, puchereando al rubio.

—Woong-hyung —rogó Dongmyeong también.

—... Estoy decepcionado chicos, pudieron evitar esta catástrofe pero no lo hicieron...

—Algún día hyung —dijo el menor de los gemelos— algún día te contaré todo... Pero ahora, ahora es muy difícil...

El llanto lastímero de Dongju se escuchó en todo el aula, había algo que ellos dos no podían decir por miedo, y Hwanwoong quién se había dado cuenta de ello no pudo evitar ir a abalanzarse sobre él para abrazarlo, la tensión se sentía en el aire con las vistas de un triste Dongmyeong quién estaba también a punto de quebrarse, un aún molesto Seoho que no quería dar su brazo a torcer, un Keonhee y Leedo algo celosos del rubio pero también preocupados por la situación... Y no olvidemos a Youngjo, el alfa de cabellos azabaches que miraba con atención la escena, quién de solo mirar al rubio querer proteger a su amigo había hecho un cambio extraño en él, de esos cambios que solían abrirte los ojos y de pronto tenía esa necesidad de abrazarlo, consolarlo y decirle que todo estaría bien...

"¿Qué me sucede?".














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Hay tensión en el Keonho, y Ravn se siente extraño... Hablando de cosas extrañas quiero su opinión a ver qué me dicen...

¿Cómo ven que los wanas hablan de tirarse pedos xd ? Es que no puedo entenderlo aún xddd

Por cierto, ¿Cómo va su cuarentena? 😎👉🏻👈🏻

¡Gracias por leer! ✨

🌫️ 𝑪𝒂𝒎𝒊_𝑳𝒂𝒏 🌫️

  ݁      opportunity     𝄒  ⠀ravnwoong / minsungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora