Aquella familia tradicional, la que lo había acogido desde que recordaba tenía dos años, aunque aquel recuerdo se había disipado durante lo que pareció un buen rato, donde se fijó en qué actualmente su familia estaba distinta a como hace años, de pequeño a él le encantaba jugar con su pequeño hermano, pero conforme fueron creciendo... Aquél cariño, o algo cercano a eso según el menor, se fue deshaciendo hasta no quedar nada.Su hermano menor lo odiaba, todo por qué sabía que él no pertenecía a la familia en realidad.
—Mañana es nuestro primer día Haru, ¿no estás feliz?
El menor le hizo un mal gesto con la mirada, indicándole que no quería hablar ni escucharlo mientras comía.
Siempre era así.
—Uhmm...
—¿No fue suficiente mi gesto? —preguntó el menor, mientras observaba con desdén a su mayor— he dicho que hagas silencio, quiero comer en paz.
El de cabellos rubios se oprimió en su asiento, sintiéndose mal, el tenía una buena intención. Pero no dejo que su ánimo decayera, siguió comiendo hasta acabar con la cena y luego poder irse a su habitación.
El frío le helaba los huesos, podía ver los diversos libros, las distintas consolas dispersadas en estantes, su escritorio, su ventanal el cual le reflejaba una hermosa vista de Seúl... Su pequeño refrigerador, su cama, todo estaba hecho y todo era para él.
¿Lo era, no?
—¡Ya llegamos! —escuchó una voz abajo, y en menos de lo que espero uno de sus padres entró en su habitación— ¡Hwanwoong, llegamos!
El menor sonrió, adoraba a su padre Omega, el Alfa casi no era cercano a él.
—Bienvenido, papá.
—Aaaaah, ¿estás bien? —sonrió emocionado, abrazándolo— digo, podemos bajar y mientras comemos una gelatina, pues...
—Papá, de verdad amas la gelatina —interrumpió Woong.
Sus padres, eran dos chinos de familias adineradas, y él tenía un montón de primos con los que convivía unas que otras veces, solamente había uno que le caía medianamente bien y que no lo miraba por encima del hombro, esperaba verlo al día siguiente.
—¿Nervioso por el primer día? —preguntó el Omega mayor, mientras soltaba su aroma a mandarina cerca de allí.
—Un poco, no quiero cambiarme nuevamente.
—Ya sabes cómo es tu padre —se quejó el mayor moveteando una de sus manos en señal de que le restase importancia— eres un Xú, no te preocupes por nada, además, tu primo estudia allá, podrán verse en los descansos.
—No es eso papá... Yo, tengo miedo, en la escuela anterior no pude encontrar a algún alfa que me gustara... Y los betas solo me molestaban por mi aspecto.
Hwanwoong tenía la apariencia de un príncipe, y aunque sonara infantil, le gustaba pensar que algún día encontraría a un rey que le hiciera sentir aquellas mariposas que tanto mencionaban los libros de literatura que siempre leía.
—Lo encontrarás, no te preocupes por nada —dijo suavemente el mayor de la habitación, sonriéndole con suficiencia— ahora, si me disculpas iré a ver cómo está tu hermano. ¡Nos vemos!
Se despidió dejándolo solo, lo que fue suficiente para ir a la habitación que su pequeño hermano le indico si quería comprobar aquella verdad, el olor a miel y nuez que emanaba de él estaba saliendo sin querer, lo que podría alterar a algún sirviente alfa que hubiese en la mansión. Llegó a la habitación buscando entre los cajones, y documentos hasta que encontró lo que tanto buscaba, de la misma forma en la que temía.
Su acta de nacimiento, y también su acta de adopción.
—Padres... Padres...
Sus padres biológicos, los nombres se veían borrosos para su vista lo que lo hizo maldecir en su mente, luego se fijó en los nombres de sus progenitores actuales.
Xú Minghao, y Wen Junhui.
—Uhmm... Haru-ssi, ¿por qué encontraste esto?
Quiso llorar ahí mismo, detestaba pensar en la idea de que no fue querido por sus primeros progenitores y de alguna manera le dió lástima a la pareja actual, que decidieron llevarlo con él...
Quería morirse ahí mismo, pero también dió gracias por tener una vida plena en el último tiempo.
Lástima qué... Para su hermano menor enterarse de eso no haya sido precisamente lo mejor.
—¿Woong-ah, que haces aquí?
La presencia de su padre Alfa lo tensó, volteándose con aquél papeleo en las manos.
—Hijo... Nosotros íbamos a...
—No te preocupes papá, lo entiendo —sonrió amargamente mientras bajaba las hojas a la mesa— es, es Haru quién necesita mucho apoyo... Podrían ir a hablar con él, yo solo necesito —rió— pensar, ya sabes.
El alfa no pregunto nada más, dejándolo solo en esa sala, y el Omega lentamente fue a su habitación a descansar esperando que aquél año en su escuela le fuera mejor.
Quería saber lo que era ser feliz en verdad.
Y esa cosa, enamorarse, también quería saber que era.
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YA APARECIÓ HWANWOONG AAAAA
La emoción xd
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🥺💙🌫️ 𝑪𝒂𝒎𝒊_𝑳𝒂𝒏 🌫️
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݁ opportunity 𝄒 ⠀ravnwoong / minsung
FanfictionLee Youngjo era el alfa de su familia, el hijo mayor con un fantástico olor a Pino, sus padres estaban orgullosos de él y siempre fue el niño prodigio, sus amigos lo llamaban 'Ravn' por qué era un as en el Freestyle y era aclamado por muchas chicas...