Oɴᴇ sʜᴏᴛs - Sᴡᴏʀᴅ ᴀʀᴛ ᴏɴʟɪɴᴇ.

𝑬𝒖𝒈𝒆𝒐 𝒙 𝑳𝒆𝒄𝒕𝒐𝒓𝒂 (𝑷𝒆𝒅𝒊𝒅𝒐)

*Créditos de la imagen a su respectivo autor.*

¡ADVERTENCIA! El contenido aquí es +18, leer bajo su propia responsabilidad.

¡Advertencia! El contenido aquí escrito está fuera de lo que en el anime/novela ligera está narrado. La escuela a la que Kirito y Eugeo, junto  a la protagonista, asisten no tiene nada ligado a sao ni nada por el estilo. Dicho esto, disfruten el cap.

La campana sonaba indicando que era hora de entrar a clases. Corrí lo más rápido que pude hasta el salón, no podía llegar tarde el primer día. Recientemente me había mudado y me habían inscrito a aquella nueva escuela, así que mis demás compañeros estarían algo avanzados en el curso pero estaba segura de que encontraría buenas personas que me apoyarían a emparejarme con ellos.

Cuando entré al salón, los que ya estaban presentes me miraron de una forma extraña, supongo que no tenían idea de que hacia ahí. Pasé a una de las butacas vacías y me senté, esperando la llegada del profesor y los demás. Detrás de mi escuchaba a dos chicos hablar animadamente, uno rubio y el otro pelinegro. Tenía curiosidad por unirme a su charla, quizá podríamos ser buenos amigos, pero en ese momento apareció alguien delante de mí.

– ¿Uh? ¡Ah! Ya veo porque me parecías conocida. Eres [T/n], esa chiquilla que almorzaba sola.

Me pareció reconocerlo, estuve examinando su rostro hasta que pude hacerlo. Era un idiota que solía aprovecharse de los demás compañeros seguido en la escuela a la que asistía antes, eso hasta que se mudó y todos pudieron descansar de él. No esperaba encontrarlo en la nueva escuela.

–Oh... Hola de nuevo, Ryota-kun..

–Que forma de saludar! Deberías de mostrarte más alegre, seguro que te sientes feliz de volver a verme. – Dijo de forma arrogante, realmente lo odiaba. En la escuela anterior me molestaba seguido, cuando me veía sola, que era la mayoría del tiempo, llegaba y decía cosas de mí, incluso una vez había tirado mi almuerzo encima de mi. Pero esta vez sería distinto, esta vez no me arruinaría ni una vez, me defendería de él.

El profesor llegó así que ese granuja fue a sentarse, el profesor me hizo presentarme ante todos, y una vez que lo hice, pudimos comenzar las clases. A pesar de ese momento con Ryota, mi primer día fue todo un éxito, o al menos eso había creído.

Cuando finalmente el día había acabado tome mi mochila y me dispuse a salir, cuando de pronto una fuerte mano me tomó por el brazo y me hizo retroceder, estampando mi espalda a la pared.

–Oye pequeña, que no acabamos de saludarnos. ¿No te da gusto verme?

Miré a unas compañeras que justamente iban saliendo, pero ellas no parecían dispuestas a ayudarme a quitármelo de encima.

–¡Te estoy hablando! – Repitió Ryota, casi gritándolo en mi cara.

–Oye, ¿todo bien aquí? – Preguntó el chico pelinegro que había visto en la mañana, Ryota enseguida me soltó.

– ¿Qué te importa a ti eso? – Dijo Ryota y se fue. El chico pelinegro se acercó a mí, igual que su amigo de cabellera rubia.

– ¿Te encuentras bien? – Preguntó el de cabello negro.

–Sí, gracias por intervenir. [ T/n ] [ T/a ], un gusto conocerlos. – Dije sonriente, haciendo una pequeña reverencia. Ellos también me sonrieron.

–Un gusto, yo soy Kirigaya Kazuto.

–Un placer conocerte, soy Eugeo. ¿Apenas te has transferido?