Bijou

It's a chance you have take with love

A pesar de no estar en su mejor día ni que su aspecto no fuese el de siempre, estando algo hambriento y cansado, corrió hasta llegar a la parada de autobuses, temprano, para ver si tenía la suerte de encontrarse con Freddie, no resistía más el mantener dentro los sentimientos recién descubiertos, sabía que no tenía que esperar otro día, para él sería absurdo retenerlo y seguir posponiéndolo, incluso estaba ansioso porque por fin lo supiera todo.

Supongo que ya es una decisión, dejaré de ser un imbécil y hablaré de una vez, aunque claro, tengo que encontrar las mejores palabras, no es cualquier cosa y para ya haber demorado tanto creo que deben ser algo más... especiales; él me ha dado tanto... y yo no le he regresado el favor, merece demasiado, lo merece todo... ¿acaso seré capaz de dárselo? Eso es lo que temo, no serle suficiente, cuando él se merece el universo entero... sé que si algo malo llegara a pasar me culparía hasta el último día de mi existencia.

¿Cómo es que se puede querer tanto a una persona en tan sólo unos meses?

Tal vez sea más fácil si dejo de cuestionarme y hago lo que tengo que hacer, nunca resolveré ni una sola duda si me quedo "pensando", ¿es ésto extraño?, sí, porque es totalmente nuevo, pero tengo la certeza de que si existe algún futuro dejará de ser así, y probablemente se convierta en lo mejor que me pudo haber pasado... ¡eso es!, tomaré el riesgo, puede salir algo bueno y algo terriblemente malo, pero si esto último es el caso sabré que al menos lo intenté, y que no me quedé callado, y podría seguir mi vida con una linda experiencia, que a pesar de no haber salido del todo bien, no fue tiempo desperdiciado; y si todo sale perfecto, no lo sé... creo que no conozco del todo ese tipo de felicidad, no lo he experimentado como se debe..., lo sabré hasta que pase, espero que sea así, y lo espero con todas mis fuerzas.

Mientras me centraré en el presente, tal vez sólo algunos planes a futuro, pero ahora eso no es mi prioridad, aún tengo tiempo para ocuparme de ello, ahora me importa lo que podría pasar con nosotros, si es que existe un nosotros...

No demoró más y finalmente salió de su casa, el día comenzó con demasiado frío, así que tuvo la necesidad de llevar una bufanda consigo; sentía que sus manos se congelaban, pero no prestó mucha atención a ello, estaba tan ocupado pensando en lo que diría que no le llegó a molestar tanto la helada mañana.

Mientras se daba miles de palabras para alentarse y apaciguar sus nervios al caminar hasta la parada, Freddie apenas cerraba la puerta de su casa para ir hacia el mismo lugar, era raro en él salir tan temprano, pero a causa de que últimamente no había dormido nada bien, y ese día no era la excepción, estuvo yéndose cuando aún no amanecía por completo, la oscuridad todavía no se iba por completo, el Sol apenas se asomaba, las calles estaban casi vacías, había mucho silencio; una ciudad que recién comenzaba a despertar.

En su cabeza rondaban cientos de cosas, todas referentes o relacionadas a Brian, como ya llevaba desde días atrás, pero esa mañana se sentía diferente al respecto, tenía el presentimiento de algo, no sabía si bueno o malo, sólo sentía que algo pasaría; ese sentimiento le provocó una ligera sensación de nervios, aunque no era molesta, lo tenían un poco inquieto; principalmente unas ganas enormes de verlo, más intensas que la de cualquier otro día.

El trayecto se le hizo bastante corto, ésto por ir encerrado en sus pensamientos. Al llegar sólo recargó su espalda en un poste de luz para esperar, con la cabeza gacha, sin mirar nada realmente, sólo recordando a la persona que más ansiaba en el mundo. Estaba distraído, tanto que no vio a Brian, quien  aparentemente estaba esperando el autobús, no reparó en su presencia hasta que éste se le acercó; tímido, nervioso, emocionado, pero decidido.

—¿Fred...? —llamó con la voz algo temblorosa al menor—, p-pensé que llegarías más tarde —continuó, pues pensó que tendría más tiempo para preparse, pero ya no había oportunidad de echarse para atrás de nuevo—, ¿cómo estás? —dijo, dándose unos segundos más para lo que seguía, jamás estaría listo por completo, pero eso no quería decir que no lo haría.