35. Él es mío

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Miro a Akane. Su rostro aún reflejaba la belleza de su juventud. 

-Es tiempo - ella toca mi mejilla con tristeza - tienes que regresar y pelear al lado de tus seres queridos. 

-Temo no volver a verte - digo triste 

-No lo harás - ella responde de inmediato 

-Akane 

-¡Baka! - me dice mientras me saca la lengua, es tan hermosa - eres una heroína en este mundo, ve y se una heroína en el tuyo, sé que nos volveremos a encontrar allá. 

-¿Cómo es que estuviste viéndome todo este tiempo? 

-El ojo puro, tiene muchas habilidades - dice con una sonrisa - la única cosa buena que hizo mi madre fue ponerte ese par de ojos. 

-¿De quién solían ser? - pregunto llena de curiosidad. 

-Esos ojos... - ella sonríe - solían ser de Enaka, mi hermana. 

-Muy bien... entonces me iré - anunció

-¿Podrías hacerme un último favor Suki-chan? 

-¿Cuál? 

-¿Podrías pelear con tu traje de guerrera? - dice y yo observo el traje, no parecía en lo absoluto un traje de pelea, sin embargo no dudo mucho y me lo pongo, se ajusta a mi cuerpo a la perfección y luego de eso Akane toma mi mano, un ardor surge pero entonces lo veo, escondido entre mi piel un tatuaje de una luna con un ojo blanco y una descripción "princesa de la guerra". 

Abrazo a Akane y me voy. Un dolor recorre mi interior. ¿cómo podría sentirme como una persona normal nuevamente? Había traído dolor y esperanza a ese mundo. 

- - - ♡ - - -


Caigo entre las piedras, para ver a a Obito absorbiendo a Kakashi quién parece estar herido. Salto hasta donde él esta. 

-¡Hey idiota! - le grito con todas mis fuerzas 

-Así que has logrado escapar - dice - contaba con que así sería, es por eso que he mandado a Kakashi allá. Pero que sorpresa, hasta te has cambiado... ¿con ese vestidito piensas morir? 

-¿Qué sucede contigo? - le digo - ¿por qué haces todo esto? 

-No hay nada que puedas hacer para detenerme  - lo miro seria y triste al mismo tiempo.

-¿Eso crees?  - suspiro profundo - ¿por qué tengo la sensación de que estás perdiendo? 

-¡Debí matarte cuando eras una niña! 

-¡Mi padre creía en ti! - grito y él me mira serio, parpadeante. 

Entonces Kakashi logra salir gracias a su Sharingan, Obito al verlo corre hasta él y lo golpea con su rodilla. Salto hasta él para interponerme pero Kakashi me empuja y caigo lejos mientras Obito remata  a Kakashi hiriendo. 

-Yo no... pude mantener la promesa que te hice... Sí, soy escoria - kakashi dice como si se estuviera rindiendo. 

Miro a Kakashi, tirado, no tengo palabras.  

-Pero eres un héroe de Konoha... no tienes porque hacer esto...

Obito en cambio comienza a reír y burlarse de él. No puedo soportar como le habla. 

-¡Deja de reírte idiota! - le grito mientras me acerco a él 

-Han pasado más de catorce años y sigues siendo la misma niña estúpida que no puede quedarse callada! - Obito me grita con mala cara - observa como voy a rehacer este mundo, observa lo que haré con tu idiota hermano y con tu estupido novio. 

La voluntad del fuegoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora