Yami No Hero: Dark Earth

Problemas

Narrador:

-No voy a luchar en esta guerra y eso es definitivo.

Los ojos de Black resplandecían de un color morado, por su parte, Yahiko daba un par de pasos hacia el frente y se paraba justo frente a aquel joven pelinegro.

~Se que no podré derrotarte en combate, pero tampoco aceptó tu decisión por no pelear, lo mismo va para ti Lucy.

Yahiko volteaba a ver a aquella frágil chica, la cual solo pasaba saliva.

Por otro lado, las miradas de todos mostraban cierta curiosidad.

-Según lo que vi en la mente de Yukizome, ese chico los superó a ustedes o por lo menos a algunos.

Las palabras de Black eran serias y su mirada igual, este daba un suspiro pesado y simplemente salía de la habitación.

Por su parte, Yukizome se quedaba impactada, pues no esperaba que Black dijera aquello tan abiertamente.

Himari sujetaba a Black del hombro antes de que esté terminar de cruzar la puerta y hacia que voltease a verla.

-Si quieres probar que lo que dije no es verdad, entonces prueba tu fuerza y haz que sienta el golpe que me vas a dar.

Los ojos de Black brillaban de un color morado mientras el puño izquierdo de nuestra heroína comenzaba a brillar de un color blanco.

Ambos jóvenes estaban decididos en combatir, sin embargo, Yahiko posaba su mano en el hombro de Himari, l cuál sólo suspiraba y salía de la habitación empujando a Black.

-Será mejor que decidas bien Lucy, solo tendrán una semana para que yo los lleve a ese lugar pacifico.

Black decía aquello y simplemente desaparecía de la vista de todos.

~Ese idiota, solo hará que los humanos nos odien más por no pelear junto a ellos.

Tras decir aquello, Yahiko era el siguiente en irse de la sala, al poco tiempo, los demás se fueron por su lado.

Yukizome, por su lado, se quedaba pensativa mientras volvía a recorrer la ciudad, tratando de rastrear la energía de Black.

>El...en verdad ha cambiado, talves no debí de traerlo conmigo.

Aquella idea pasaba por la mente de nuestra joven heroína, la cual había llegado hasta un parque, el cual era todo verde y en el centro se encontraba un pequeño estanque.

>¿Qué es lo que debería de hacer?

Está miraba su reflejo en el estanque y simplemente daba un suspiro lleno de pesar.

Black se aparecí atrás de ella y daba un bostezo, llamando así la atención de Yukizome, la cual volteaba a verlo algo furiosa.

-Sabes que no es mi culpa que eso haya pasado, solo dije la verdad, el vivir en paz los ha debilitado a tal punto que nisiquiera pueden detener a esos chicos.

El tono de voz de Black era tranquilo y calmado, pues no quería llamar la atención de nadie en esos momentos.

>Lo sé, pero no debiste de ser tan directo, pudiste haberles dicho otra cosa o hacer algo más que solo resguardar a los que no van a querer pelear.

Yukizome decía aquello en un tono completamente serio con cierto toque de molestia.

-Tu sabes bien que tengo razón, se hn hecho más débiles por no haber entrenado y también sabes que aunque me des un golpe no lo voy a sentir.

Nuestra joven heroína solo daba un leve gruñido y comenzaba a caminar de nuevo, esta vez rumbo había su casa.

>Necesito pensar que decidiré antes de que la guerra empiece.

Con aquellas palabras, la joven dejaba a Black en medio de aquel parque, el cual solo sonreía ligeramente y miraba hacia el cielo.

-No es tan simple como creen, este mundo...no, todo cambiará en cuestión de un parpadeo.

Nuestro joven héroe estaba a punto de irse, cuando frente a él salía Dante de unos arbustos.

-¿Que hacías ahí Dante?

Black mostraba una cara de confusión, guardando para sus adentros una pequeña sonrisa.

=Solo quiero tener un enfrentamiento contigo, como en los viejos tiempos.

Dante se ponía en guardia y sonreía de oreja a oreja, pues desde hace mucho el esperaba tener un combate con su primer rival.

-En ese caso, salgamos de la ciudad, no quiero que la situación empeore.

Black chasqueaba los dedos de su mano izquierda y los dos se teleportaban a un desierto.

El rostro de Dante cambiaba a uno de sorpresa, admirando a su alrededor.

=Debes de enseñarme a hacer esto Black.

Dante decía aquello de forma animada con una sonrisa en su rostro.

-Te lo enseñaré si logras hacer que sienta dolor con un ataque.

Black sonreía ligeramente y se ponía en guardia.

=No creas que lo que dijiste era verdad, yo no deje de entrenar tan fácilmente.

Dante rodeaba sus pies en llamas y salía disparado hacia Black, el cual no dejaba de mirar fijamente a su contrincante.

Dante lanzaba una patada hacia el rostro de Black, el cual bloqueaba de manera inmediata, el choque de aquel ataque generaba un enorme estruendo.

-No está mal, nada mal.

Black sujetaba rápidamente la pierna de Dante y lo arrojaba haci el cielo.

Dnate comenzaba a lanzar varias bolas de fuego hacia su rival, por otro lado, Black extendía su mano derecha y comenzaba a lanzar bolas de fuego por igual.

El choque de aquellos ataques generaba una cortina de humo, haciendo que Dante quedase oculto mientras caía de pie.

Al alzar su mirada, Dante se topaba con la mano izquierda de Black extendida hacia su rostro.

-Sin embargo, aún te falta poder y control para lograr aunque sea dsrme un golpe directo sin que yo lo vea venir.

El rostro de Dante mostraba una clara expresión de nervios y algo de miedo, pues los ojos de Black brillaban de un color morado y su pupila ahora era como la de un reptil.

La palma de la mano de Black comenzaba a iluminarse de manera lenta, por su parte, Dante observaba a Black con algo de miedo, pues no sabía si este lo iba a atacar en serio.

Black Bajaba su mano y volvía a l normalidad.

-Te llevó de regreso a la ciudad, los demás deben de haber sentido parte de mi energía.

Black volvía a chasquea sus dedos y regresaban al parque del cual se habían ido.

-Si los demás están a tu mismo nivel, puede que puedan ganar la guerra, si no, la tendrán difícil.

Tras decir aquello, Black desaparecía de l vista de Dante, el cual se encontraba temblando.

=Esos ojos, eran como los de Dark Gaia...pero eso no puede ser posible, Black lo derrotó y eso lo vimos todos.