「༻ 3 ༺」

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—Y bueno... ¿Qué es lo que te sucede?

Shizune encendió un cigarrillo y se sentó sobre el frío suelo, dejó escapar el humo mientras le daba la espalda a Kakashi.

—¿Alguna vez has deseado algo prohibido? —preguntó el peli plata mientras observaba la nada.

—Por supuesto. Todos los humanos anhelamos lo que no se puede tener, solo pocas veces uno tiene bastante suerte como para acostarse con Kakashi "el del Sharingan" —La azabache comenzó a reír burlonamente.

Kakashi no prestó mucha atención al mal chiste de la mujer. El estrés se iba acumulando cada vez más, a tal punto de visitar a la Kunoichi experta en ninjutsu medico más de dos veces por semana, esto nunca lo hacía, no había necesidad; pero, desde que su hambre interna se había vuelto cada vez más abyecta, le costaba mucho trabajo encontrar la paz.

La quietud era una ramera a la cual le gustaba jugar todo el tiempo con él, Kakashi había pagado el precio de sus servicios por adelantado y con creces pero, la muy puta siempre llegaba bastante tarde, otras ni se preocupada por aparecerse.

—No sabía que existiera una mujer prohibida para ti. Estoy segura que todas las mujeres estarían dispuestas a bajarse las bragas frente a ti —Shizune le seguía dando la espalda.

La chica dibuja pequeños círculos invisibles en la loza. Kakashi miró su nuca, le gustaba joderla porque ella conocía su lugar en la absurda jerarquía piramidal; ambos estaban muy abajo, sepultados por un sinfín de cargos fantasmas, personas a las que protegían y a las cuales nunca conocerían. Shizune como todos los shinobis estaba hecha una piltrafa, un despojo humano.

—En mi habita un deseo —Kakashi guardó silencio un par de segundo—... Quiero saber qué fue lo que la guerra hizo de ella ¿estará igual de rota que tú? Las expectativas que tenía sobre la vida ¿han cambiado?

—Por como hablas, puedo intuir que es una Kunoichi y que ella es joven, quizás bastante joven para un lobo solitario como tú. —Shizune se puso de pie y tomó la botella de Sake, se la llevó a la boca.

—¿Cuándo me hice un lobo solitario? —Kakashi preguntó en voz alta pero, la pregunta iba dirigida a él mismo.

—Desde que estamos en la academia nos adiestran, somos simples títeres en una partida eterna de shogi, pienso que si Shikamaru fuera quien moviera las piezas, estaríamos menos dañados —Shizune se recostó al lado del ninja que copia.

Le cedió la botella de Sake y continuó hablando.

—Dime, ¿te hubiera gustado vivir otro tipo de vida? —La mujer de mediana edad, la cual estaba desnuda, llevó sus rodillas hasta su pecho y abrazó ambas piernas con sus brazos.

—Ni siquiera soy consciente de que existen otras formas de vida. —Kakashi bebió un gran sorbo de la bebida embriagante.

Ambos se quedaron en absoluto silencio, cada uno torturándose de diversas formas dentro de sus pensamientos. Después, volvieron a fundirse en un solo cuerpo; el sexo siempre liberaba sus mentes, era como ciempiés navegando por sus genitales, o una ruidosa tormenta que te aísla de cualquier sonido. Solo una cosa era segura. No había amor, nunca lo hubo.

Kakashi se imaginaba enterrándose en aquella flor de cerezo, el cuerpo de Sakura fue trasplantado de alguna manera en el de su compañera de sábanas; de ese modo el peli plata alcanzó otro tipo de orgasmo, uno más íntimo y placentero.

Estoy muy contenta escribiendo estos pequeños drabbles acerca de la fatalidad que conlleva ser un ninja. Nuestro amado sensei siempre me ha parecido un ser un tanto roto, me imagino que ser un shinobi destruye tu humanidad de diversas formas... 

espero que les esté gustando esta cadena de Drabbles bebés.

【Confesiones obscenas】ᴋᴀᴋᴀꜱᴀᴋᴜDonde viven las historias. Descúbrelo ahora