❝Mi Sexy Sugar Daddy❞© (+18)Christopher velez |Completa|✓

Capitulo 20° Galletas que Rompen el Hielo.

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-llegué bien, gracias pequeña- dijo Christopher en la línea.

Sonreí inconscientemente, pero al recordar las vidas perdidas se anuló mi sonrisa.

-¿supiste de todas las muertes de niños pequeños?- dije neutral .

Estaba claro que no quería que supiera que estaba feliz pero a la vez triste.

-si, y lo lamento mucho, he odiado toda mi vida las injusticias, no es válido que por una venganza cobren las vidas de pequeñas criaturas- comentó christopher con tristeza.

Ese comentario conmovió mi corazón, al menos no es un ser humano que no siente culpa de nada.

Él tiene sentimientos.

- es algo que rompe mi corazón en mi pedazos, Christopher - digo con un nudo en mi garganta.

-lo sé cariño, a mí igual, ¿te parece si nos vemos hoy y te consuelo?- pregunta con una chispa de felicidad.

Desde hace 2 semanas he esperado poder pasar tiempo con él, hace mucho que no lo veo, mi corazón se hace chiquito si él no está a mi lado, es como el conpremento perfecto para mi vida, es esa pieza que te da felicidad instantánea..

-¡Claro! Me encantaría que estuvieras un rato conmigo- hago un berrinche, aunque sé que el no lo sabe.

-entonces ven y abre la puerta, querida - dijo algo arrogante.

Solté el teléfono en mi cama y bajé las escaleras corriendo.

Mis padres trabajaban hasta tarde, así que tenía gran parte de la tarde libre.

Abrí la puerta lo más rápido que pude, y en cuanto lo ví allí parado frente a mi, me aventé a él como si se tratara de un mono .

Lo abracé con todas mis fuerzas.

En verdad lo extrañaba...

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Le invité un café a Christopher mientras me contaba como le fue en su viaje.

-¿segura que no te han mandado mensaje de nuevo?- preguntó algo preocupado.

Yo negué, le di mi celular para que el fijara.

Lo revisó.

Lo ví como algo normal, no lo revisaba por ser alguien tóxico si no, por mi seguridad.

- ¡Okey! Parece que todo está bien - afirmó- pero tengo que llevármelo, ¿puedo?- yo asentí y el saco algo de un bolso de cartón que traía - esto es para ti, no quiero perder comunicación contigo - me entregó la cajita , estaba forrada por un papel rojo briilante y un moño decorativo color plateado.

Lo abrí y valla sorpresa que me encontré...

Era un iPhone X color blanco con las esquinas doradas , era muy bello pero no podía aceptar un regalo tan costoso.

-no lo puedo aceptar Daddy, esto es muy costoso- reproché entregándoselo.

-Tómalo Como Un regalo por haberte dejado sola por mucho tiempo - me lo volvió a entregar, lo mire desaprobadamente - Por favor muñeca - ruega con una hermosa sonrisa y sus ojos mirándome fijamente.

-Está bien, solo por esta vez, no me gusta que me des regalos así, prefiero regalos sencillos pero con un valor sentimental - expliqué.

Él se quedó quieto y me di cuenta del gran error que cometí.

Él no podía darme algo con valor sentimental, por qué, el no siente nada por mi, solo era atracción física.

- te apetece unas galletas- dije tratando de cambiar de tema.

Él asintio y yo me fue rápidamente ala cocina, una vez allí, suspiré.

¡¡Soy demasiado estúpida!!

No tuve por qué hacer dicho eso!

Eso me pasa por sentir algo por alguien, y que mi amor no sea correspondido.

Me golpeo mentalmente.

Serví las galletas en un plato, eran galletas que mi madre horneó con sus propias manos, y son deliciosas.

Salí de la cocina con el plato en mis manos y se las di a Christopher.

El agradeció y procedió a meterle una a su boca.

-¡Wow! ¡Son realmente deliciosas! ¿Quien las hizo?- halagó.

-mi madre - respondí con orgullo.

Por lo menos olvidó lo que dije.

- Tiene muy buen sazón, vendré más seguido a comer estás deliciosas galletas y de paso te veo muñeca- me guiña el ojo.

Solo le interesa las galletas- pensé indignada.

Solo me quedo responder.

-Mi madre estará encantada de hacer galletas para ti - sonreí de lado.

Por varios segundos hubo un silencio incómodo.

- bueno princesa, me tengo que ir - se levanta del sillón - mis guardespaldas me esperan allá afuera y no hay buen pronóstico del clima, no me gusta que sufran- explicó.

Le importa la salud de sus empleados. ¡Que lindo!

-No te preocupes - sonreí- fue bueno verte hoy - respondí neutral.

-opino lo mismo y espero que estos días que no estuve para ti hayas cumplido con cada una de las reglas, por qué por lo contrario habrá castigo- sonrió egocéntricamente.

Había olvidado el contrato.

Por suerte no hice nada malo.

No hubo ninguna regla Rota.

- no hubo ningún problema, te lo aseguro- respondí nerviosa.

El asintió, me tomo por la cintura y me besó.
-Te traeré los papeles, espera- dije y fui a mi habitación por la carpeta, regresé y se la entregué.

Solo se inclinó a mi y me besó.
Un beso de despedida, pero feroz, apasionante, lleno de deseo.

Sin embargo no había tiempo para eso.

Allá afuera hay persona que lo esperan, para cuidar su espalda, pero también hay personas malas con la única razón de hacerle daño a Christopher.

Terminó el beso con una mordida, me miró a los ojos, sonrió y salió de mi casa.

Si este hombre me vuelve a morder el labio así de sexymente juro que me dará un ¡orgasmo!

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¿Cómo están pequeñas pecadoras? Espero que estén bien y que haya disfrutado de este capítulo.

Comenten que tal les pareció el capítulo.

"Que su vida esté llena de buena vibra ❤️😊"

Atentamente: Janet Estrada ❤️.

Capitulo editado.

22 de Junio del 2021.