Paradise City

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Steven.Pov

Estaba en un bar, Tommy me había llamado para juntarnos a tomar algo, el quería que hablemos, que le cuente de como andaba, siempre fuimos grandes amigos, no lo negaría.  por eso no le negué la invitación, supuse ya le había avisado a Mich que llegó, así que sería mejor mantenernos lejos mientras el este ahí.

Tomábamos unos tragos y hablábamos de diversas cosas, la banda, giras, shows, hasta que llego el tema "mujeres". Deje el vaso de whisky en la barra y sonreí de lado, ante su pregunta tan concreta.

-¿Alguna que te robó el corazón? Groupies tienen miles, pero ¿hay alguna fija?.- Pregunto curioso.

-Ella y yo, Dos locos viviendo una aventura prohibida, pero deliciosa.- Sonreí de lado, al recordarla en mi cama, como varias veces.- Pero es un laberinto sin salida, donde el miedo se convirtió en amor.- Lo mire de refilon y negué.- Somos su Novio, ella y yo

-Bueno, Mich y yo, igual que ustedes compartimos en la vida un eterno amor. La dama perfecta, toda una belleza, ella es mi inspiración
Somos feliz ella y yo.

Me sentí mal, pero no podía ocultarlo, me había enamorado de ella, desde el primer día que la había visto, ella era hermosa, perfecta para mi. Me tenía loco, no lo negaría y Lucharía por ella, como tenía que ser.

-Ella y yo, Solos nos vemos a escondidas para ahogar esta prohibida pasión. Y aunque tiene dueño, yo solo tengo un sueño, ser su protector. Me enamoré, no pude evitarlo.

-Steven vamos, lucha por su amor. Ella tiene que ser tuya. Quizás el no mande en su corazón.- Prendió un cigarro, para girar a mirarme.

-No Tommy, no me aconsejes en tu posición. Tú, no sabes quien es victima en esta confusión. Ella y yo teníamos claro que era una locura esta relación, Pero la carne nos llamaba, y la cama nos hacia una invitación, a solo hacer el amor.- Le di un trago amargo a la bebida, quería matar el sabor amargo de la traición.

-Ya te expliqué, Cuando hay personas que se aman, el amor tiene que vencer. Ella ahora es tu mujer, Piénsalo. Voy al baño.- Palmeo mi hombro y se levanto, para ir al baño, perdiéndose entre la gente, prendí un cigarro y negué, no podía seguir con esto.

Estaba muy entretenido pensando en Mich, cuando la vi aparecer frente a mis ojos, su minifalda de cuero me estaba matando, venía junto a Mel, a la rubia la vi desaparecer entre la gente y ella, se acercó.

-Hola mi guapo, ¿te gusta? Sólo para vos.- Me sonrió y me abrazó por el cuello para besarme, sin darme tiempo a decirle que estaba con Tommy en el bar. Pero el Alcohol y la droga que había consumido, provocaron que vuelva a caer a sus pies, olvidándome de su novio. La abrace por la cintura y la coloque entre mis piernas, para seguir besándola.

-¡Oye Steven! no me dijiste que era tan guapa.- Tommy se sentó en su lugar, dejándonos a los dos congelados.- Hola soy Tommy.- Mich me miro y trague en seco, pero Tommy la hizo girar para mirarla, quedando con la boca abierta.- ¡MICHELLE!

-Tommy... yo~yo puedo explicarte.- Tartamudeo nerviosa.

-No, no tenes nada que explicarme, y vos...- Me señalo con asco.

-Te pido perdón, pero me traicionaron las ganas de volverla ver y admitiré que salí con tu mujer y que la amo.- Lo interrumpí, jalando a Mich para dejarla detrás mío y cubrirla, sabía que terminaríamos a los golpes en cualquier momento.

-Ya veo que todo era mentira cuando ella me decía, Que solo se iba de gira por la banda y dormía en el mismo cuarto que su amiga. - Escupió con asco, suponía se refería a Emy.- Me mintió, tu y ella en una cama, acá en Detroit, Quizás en las vegas o Carolina, cuantos hoteles ensucio. Tú también, los odio a los dos.