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Taehyung se empezó a dejar llevar por la mano de Hoseok, no podía pensar en nada más que en los ojitos llorosos que lo miraban directamente.

—Chicos ¿Están? -Se escuchó la puerta de la habitación abrirse junto con la voz de Seok Jin. Hoseok y Taehyung inmediatamente se separaron, pero Jin alcanzó a ver la escena rara. —¡Oh! ¡Oh! Perdón, yo, yo debí tocar antes, yo, amm, los esperamos afuera, ya está todo, lo siento, lo siento. -El cerebro de Jin se quedó unos segundos sin funcionar al intentar procesar lo que estaba pasando, pero cuando se dió cuenta volvió a sonreír nervioso y cerró la puerta torpemente. —Lo sabía. -Se dijo a si mismo.

Dentro de la habitación, Taehyung y Hoseok se miraron de nuevo a los ojos. Tae no tardó en alterarse cuando vió lo cerca que estaba de Hoseok. Inmediatamente se levantó y froto sus manos en su pantalón, sintiendo los nervios y la sangre subiendosele a la cabeza.

—Llamame cuando estés listo...

—Ya estoy listo. —Hoseok inmediatamente habló, sin quitarle la mirada a los ojos cristalinos de Taehyung.

—Bien. —Tae rodó los ojos y tragó saliva. Se acercó de nuevo a Hoseok pero no lo miró a los ojos. Simplemente se dedicó a seguir ayudándole a vestirse, sin decir ninguna palabra. Un silencio que hasta a Hoseok le parecía incómodo.

—Taehyung, lo lamento... —Decidió hablar el primero, pero a Taehyung parecía no importarle, lo cogió de la silla de ruedas y lo sacó del baño para llevarlo al tocador. —Tae... –Hoseok intentó de nuevo.

—Dejalo así.

La voz grave y molesta de Taehyung sorprendió un poco a Hoseok, lo vio a través del espejo acomodando algunas cosas.

—Por favor, Tae es que yo...

El reflejo de Taehyung volteando bruscamente hacia él lo detuvo.

—¿Qué? ¿Que quieres? ¿Disculparte por ser un estúpido? ¡Si! ¡Lo sé! ¿Quizá por ser un tonto egoísta? ¡Bien! ¡Te perdono! ¿O tal vez por ser un ciego imbécil que solo piensa es si mismo y en sus propios sentimientos? Ya lo sé Hoseok, ya sé que lo sientes... —El castaño se quedó perplejo al escuchar al rubio explotar.

Taehyung sintió un enorme peso de encima menos, sintió una ola de sinceridad en su cuerpo. Se sentó en la orilla de la cama con la cabeza baja.

Hoseok por su parte simplemente se giro hacía el, y tratando de no acercarse mucho volvió a hablar.

—Ouch, eso fue... Muy específico, pero a su vez, muy acertado he de decirte. –Espero respuesta pero Taehyung no dijo más. —Escucha, yo en serio lo lamento, perdón por ser un tonto, un estúpido egoísta y por solo pensar en mi mismo. -Hoseok tomo las ruedas y se acercó un poco más a Tae. —Yo, ni siquiera sé por qué me comporté así.

—Namjoon se ofreció a cuidarte, a ayudarte y ayudarme. También tengo una vida, no me la puedo pasar 24/7 a tu lado, así que si eso te molestó, es mejor que te acostumbres.

Taehyung siguió sin levantar la mirada, pero se oía más firme y duro.

—Lo sé, y tienes razón. Aunque... No creo que esa haya sido la razón por la que me puse así.

Tae por fin levantó la mirada y sus ojos se dirigieron a los de Hoseok.

Si no fue por qué te dejé a cargo de Nam ¿Por qué otra cosa pudo haber sido?

—No lo sé ¿Hiciste algo que me hiciera enojar? Contestó Hoseok con un tono bromista. Pero Taehyung simplemente lo miró serio. —Jeje, ya, entiendo. No lo sé, quizá fue uno de esos arranques bipolares que tuve hace unos meses.

El duelo  [Vhope]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora