─ Las sospechas de un mentiroso. ─
La noche estaba llegando finalmente a la Aldea de la Hoja, habían pasado unos días de la ronda preliminar de los exámenes chuunin, y tras un pequeño descanso el equipo de la niebla se había decidido finalmente por comenzar su entrenamiento. Jin observaba sentada desde la rama de un árbol la puesta de sol, y como los últimos rayos de luz alumbraban los rostros de los Hokages.
━¿En qué estás pensando esta vez?━preguntó Daiki apoyándose sobre el tronco y cerrando los ojos algo aburrido.
━... ¿Por qué debería estar pensativa?━respondió sin hacerle demasiado caso a las burlas de su compañero.
━Te voy conociendo poco a poco aunque no lo parezca.
Rió un poco por lo bajo y sintió como su compañero se sentaba a su lado para hacerle compañía. Poco a poco comenzaban a llevarse mejor y a dejar sus diferencias de lado por su propio bien y el del equipo.
━¿Conque pensando en el próximo Mizukage?━dedujo el Kaguya y la contraria sonrió levemente dándole a entender que estaba en lo correcto.━Realmente te preocupas por el futuro de Kirigakure.
━Sí... Después de todo llevo las esperanzas de mucha gente a las espaldas.━contestó intentando parecer tranquila.
━No estás sola en esto, nos tienes a nosotros.━pasó un brazo por sus hombros y sonrió de lado.━Godaime Mizukage, ¿no?
La pelinaranja abrió los ojos de golpe y se puso tensa, separándose inmediatamente del albino y negando rápidamente con la cabeza y sus manos.
━¿Qué dices?━se rió por lo bajo y el contrario la miró confundido.━No me gusta hacer tanto papeleo, me gusta seguir como ANBU... Prefiero ver el mundo a estar encerrada en un despacho.━dijo excusándose y sobándose la nuca.
Daiki la miró serio y sin apenas expresión en el rostro, no entendiendo muy bien lo que quería decir.
━Yo pienso que tú lo harías bien.━ladeó la cabeza confundido por la actitud de la chica.━Pero si no... ¿A quién le dejas el cargo entonces?
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Serendipia ─ Naruto Uzumaki
Random❝ Uno buscaba el éxito y la aprobación de los demás, la otra vagaba por el mundo y sus pensamientos intentando encontrar el sentido de la vida; pero su compañía fue más que suficiente para hacerlos felices y cicatrizar las heridas que brotaban de su...